A fines de diciembre de 2019, poco después de Navidad, el plantel de Everton se reunió por primera vez en el CDE, ubicado en Reñaca Alto, para encarar el comienzo de la temporada 2020.

En ese entonces, y después de toda la incertidumbre a nivel nacional que motivó el abrupto término del campeonato nacional del año pasado, el reinicio de las actividades futbolísticas se veía como una imagen difusa en el horizonte, distante, sin la certeza que efectivamente se cumpliera con la fecha que la ANFP había anticipado para el puntapié inicial.

Hoy, ese momento está a la vuelta de la esquina. Mañana, a 18.30 horas, en el estadio Sausalito, Everton y Universidad de Concepción abrirán los fuegos del torneo.

Los oro y cielo lo harán con un buen sabor de boca luego de estrenarse en sociedad el sábado pasado con un triunfo por 1-0 ante Unión La Calera en el marco de la Noche Oro y Cielo. Antes, los viñamarinos habían igualado con Deportes La Serena en el primer amistoso, para después vencer por 3-0 a los cementeros en el pasto sintético del Nicolás Chahuán en el valle del Aconcagua.

Haciendo un análisis más frío de la última victoria contra los cementeros, el técnico Javier Torrente se mostró conforme con el buen desempeño de su equipo, destacando en especial tres elementos de juego: buena recuperación de pelota, fluidez y agilidad para atacar, y la gran cantidad de ocasiones de gol. Sin embargo, asume que el hecho de no haber estado acertados en la definición hizo que el marcador no fuera más abultado.

Pese a ello, a rasgos generales, el argentino consideró que "todo es positivo por lo que viene y esperamos ahora empezar a lograr puntos y partidos en el campeonato".

"Siempre es bueno volver a competir, esperamos el partido con ilusión, queremos poder regalarle a nuestra gente un primer buen partido y un triunfo", agregó el técnico evertoniano.

De todas formas, la Noche Oro y Cielo también dejó un damnificado en el plantel auriazul: Benjamín Berríos sufrió un desgarro en el isquiotibial y se perderá la primera fecha del certamen, y lo peor es que probablemente su ausencia se prolongue por un tiempo más.

"Es un pequeño pinchazo, pero en poco tiempo esperamos contar con él", confesó Torrente, esperanzado que la recuperación se realice de buena forma para volver a tener a disposición rápido al "Topo".

Y aunque lamentó la baja del joven volante, lo cierto es que también se mostró absolutamente confiado de la entrega de su plantel y los otros nombres que maneja en mediocampo, otra de las conclusiones que sacó tras la Noche Oro y Cielo.

"El segundo tiempo lo pudieron hacer bien entre (Fernando) Saavedra y (Rodrigo) Echeverría. Tiene otro diseño el equipo cuando no juega Berríos, y la función la combinamos de otra manera, pero confiamos en Saavedra, Echeverría, (Carlos) Lobos y (Álvaro) Madrid, que están en buen nivel", afirmó el DT rosarino.

El rival del debut

El contrincante con que Everton iniciará su camino en la temporada 2020 ha generado ciertas dificultades a la hora de trabajar el partido debido a la nebulosa que se cierne sobre el equipo, que ha entrenado con mucho hermetismo y es poca la información con la que se cuenta más allá del arribo del estratega uruguayo Eduardo Acevedo y varias caras nuevas, con jugadores como el seleccionado panameño Cecilio Waterman, y los charrúas Nicolás Correa, Gonzalo Bueno y Guillermo Reyes.

"Es un poco una incógnita. Igual intenta jugar, aunque también tiene delanteros para jugar directo. Creo que es un plantel que si bien se ha conformado un poquito tarde, tiene condiciones para enfrentar este torneo, así que tendremos que estar nosotros bien, bien de la cabeza, abocarnos a hacer nuestro juego y poder sobrellevar el arranque del torneo contra un buen rival", adelantó Torrente.

Pero independiente de este escenario, el trasandino descartó que el Campanil corra con ventaja al manejar más información, sobre todo ante la posibilidad de ver y analizar con tiempo los dos amistosos que Everton sostuvo con Unión La Calera.

"Eso se decide adentro de la cancha, y la calidad de los futbolistas, las estrategias, serán las que definirán todo eso. Hoy uno revisa los equipos anteriores que el entrenador dirigió, también las características de los jugadores que llegaron, y está todo muy desarrollado", sostuvo el DT oro y cielo, quien más allá de tener bien medido al rival, opta por centrarse en los suyos.

"Nosotros hemos tratado de mantener la competencia a través de partidos amistosos, que no es lo mismo que competir por lo puntos, pero el equipo está con una pretemporada encima, está rodado, jugó partidos, hemos preparado todo eso para poder tener un buen torneo", admitió el adiestrador, deseoso de meter a su equipo en un torneo internacional el 2021.

"Nos gustaría poder arrancar ganando, que impongamos nuestra localía y podamos jugar un buen partido", añadió un entusiasmado adiestrador auriazul, ad portas de arrancar por primera vez con Everton tras su paso del 2018 y de mitad del 2019, un campeonato sentado en la banca viñamarina a contar de la primera fecha del torneo.

"Tendremos que estar nosotros bien, bien de la cabeza, abocarnos a hacer nuestro juego".

Javier Torrente, DT de Everton