Culminado el primer mes de este 2020, uno de los más importantes en términos turísticos dentro del año, tenemos la tranquilidad de afirmar que si bien las cifras son decrecientes, dan cuenta de nuestra capacidad para sostener esta temporada de verano.
Porque a pesar del temor de una baja considerable, producto del actual y conocido escenario social del país, nuestra comuna ha registrado un notable flujo de visitantes nacionales y extranjeros, quienes la han escogido como el destino ideal para sus vacaciones de verano.
Así fue ratificado por Marcelo Vidal, director regional de Sernatur el viernes pasado, quien indicó - entre otros antecedentes - que la ocupación hotelera registrada entre el 20 y el 25 de enero alcanzó un 47,6% en el Gran Valparaíso, cifra levemente inferior al 50,1% del mismo período de 2019, correspondiendo un 47,4% a Viña del Mar.
Como se previó un escenario con una importante baja en el turismo nacional y local, desde el primer minuto comenzamos a trabajar con el sector público y privado para aminorar los efectos de dicha caída, impulsando diversas iniciativas, como promover una atractiva agenda de eventos y actividades familiares y apoyar la promoción del trabajo de emprendedores locales.
Ya pasado este primer mes, me alegra enormemente que autoridades ratifiquen que el descenso en el rubro no haya sido tan dramático como se esperaba. Por ello, agradezco a los visitantes que confiaron, aceptaron nuestra invitación, y eligieron a Viña del Mar para disfrutar sus días de descanso, y, especialmente, agradezco a los empresarios gastronómicos, hoteleros, de servicios asociados y al sector comercial, por su esfuerzo y compromiso con el turismo.
Así como podemos decir hoy que el balance turístico preliminar es bueno hasta ahora, proyectamos que la tendencia mejorará en febrero, gracias al habitual recambio de turistas que registra el segundo mes del año y la nutrida agenda de panoramas programados, como el Torneo de Rugby de Selecciones, El Derby y el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar. Este último evento, si bien tendrá en su próxima versión un sello acorde al actual contexto nacional, igualmente generará un gran movimiento económico en nuestros servicios hoteleros, gastronómicos y comerciales.
Estos promisorios resultados no son azarosos, son - como siempre lo he manifestado - producto de un trabajo sostenido en el tiempo y con un esencial espíritu colaborativo entre el sector público y privado. Esta ha sido la impronta de la gestión turística que desarrollamos en Viña del Mar, la que seguiremos cultivando para abordar de la mejor manera, y entre todos, los desafíos presentes y futuros del turismo, actividad que ha sido nuestra principal vocación, el motor económico de Viña del Mar y uno de los principales impulsores de la oferta laboral en la comuna, dando trabajo a miles de viñamarinas y viñamarinos.
Virginia Reginato Bozzo