Paolo Navia S.
Durante veinte años, cada fin de semana que Everton jugó en condición de local, el concejal Carlos Williams (RN) acudió sagradamente al estadio Sausalito para hacerse cargo de la locución de dichos pleitos, además de otras funciones que lo hicieron merecedor de un intenso cariño y respeto por parte de la hinchada evertoniana.
Reflejo de aquello fue el sentido y espontáneo homenaje que el locutor radial protagonizó en mayo del año pasado, cuando los hinchas oro y cielo le cantaron a todo pulmón la tradicional canción de "feliz cumpleaños", además de recibir diversas muestras de afecto por parte de los simpatizantes del club de la Ciudad Jardín.
Episodio que, sin embargo, significó un antes y un después en la vida del concejal, quien fue claro al precisar que, tras dicho acontecimiento, su relación con los representantes de la denominada Casa del Deporte, liderada por Javier Aravena, cambió para siempre.
"De ahí en adelante dejé de ser visto con el cariño de siempre y más bien pasé a ser prácticamente una amenaza para algunos y, principalmente, para las personas que tienen a cargo la dirección de la Casa del Deporte", argumentó.
Una decisión política
Enemistad que, en definitiva, concluyó con su salida de la caseta oficial del estadio Sausalito, lugar desde donde narró los principales hitos deportivos de Everton, siendo sus relatos ampliamente recordados por los hinchas de la Ciudad Jardín.
La decisión adoptada por el municipio de Viña del Mar caló hondo entre los simpatizantes oro y cielo, quienes a través de redes sociales lamentaron el alejamiento de Carlos Williams desde el coloso viñamarino.
"Esto fue muy emotivo para mí, pues he recibido un respaldo mayoritario por parte del público y de los hinchas, apoyo que no fue bien visto por otras personas. En este sentido fue mucha la gente que a través de la radio, redes sociales o de manera presencial me preguntó por qué yo no estaba a cargo de la locución de los partido de Everton, pues pensaban que fue una decisión personal, pero en ningún caso fue así", agregó el edil.
Alejamiento del estadio Sausalito que no estuvo exento de polémicas, pues a pesar de su vasta trayectoria, Williams no fue comunicado de manera oficial de su despido, sino que simplemente se le negó la entrada al recinto deportivo.
"A mí nadie me dijo nada, ni me dio los motivos de mi salida, sino que a través de terceros y de funcionarios municipales que trabajan en el estadio Sausalito me comunicaron este hecho, además de no dejarme entrar a la caseta de transmisión", manifestó el concejal.
Desvinculación que, sin embargo, tendría un trasfondo político y que se basaría en su trabajo fiscalizador y en su participación como testigo en la acusación por notable abandono de deberes y falta a la probidad que un grupo de concejales presentó en contra de la alcaldesa, Virginia Reginato.
A esto, se suma la posibilidad de que Carlos Williams se convierta en la carta de Renovación Nacional para enfrentar una posible primaria en contra de la actual jefa comunal de la Ciudad Jardín de cara a las próximas elecciones municipales.
"Fue el propio director de la Casa del Deporte quien, en una reunión con el presidente de Everton, le comunicó que el municipio pondría a disposición un locutor para que el club dejara de contar con mis servicios. Decisión que yo creo que fue netamente política, pues yo precisé que estaba disponible y que no tenía ningún problema, si la dirección de mi partido lo consideraba, en ir a una primaria con la alcaldesa Reginato", comentó Williams.
Candidato a primarias
Ante este escenario, una de las autoridades que le ha prestado apoyo al concejal Williams tras su salida del estadio Sausalito ha sido el diputado Andrés Celis (RN), quien fue claro para catalogar dicha decisión como "un tremendo error".
"Yo creo que las decisiones siempre se deben tomar con la razón y no con la pasión, y esto lo digo porque acá 'no hay peor ciego que el no quiere ver', pues el concejal Williams ha fiscalizado y colaboró como testigo de la parte acusadora en la acusación por notable abandono de deberes en contra de la alcaldesa, y por lo mismo, él se ha convertido en un potencial candidato a alcalde y será una carta importante en el caso de que existan primarias en Viña del Mar", declaró el parlamentario, quien añadió que "todo eso significó que el municipio le pidiera al Everton que no veía con buenos ojos que Carlos Williams fuera la voz del estadio Sausalito y con esa determinación lo único que provoca es que la gente de Viña piense que toman decisiones egoístas y que no se condicen con lo que debiese ser el actuar de un municipio".
Finalmente, el diputado RN puntualizó "en el municipio creen que con esta decisión ganan una especie de satisfacción personal pero, electoralmente, lo único que hacen es perder votos. Además, es una falta de respeto para la trayectoria de Williams, y por lo mismo, mandé una carta a Javier Aravena para que me entregue una respuesta formal en relación a las causas de la salida del concejal, pues no puede ocurrir que a través de la política del terror se saque a la voz histórica del estadio Sausalito".
"Carlos Williams se ha convertido en un potencial candidato para alcalde y será una carta importante en el caso de que existan primarias".
Andrés Celis, Diputado RN
Antecedentes irán a la Contraloría
La Municipalidad de Viña del Mar precisó "por tratarse de una materia cuya procedencia resulta controvertida administrativamente, la alcaldesa Virginia Reginato ha oficiado a la Contraloría Regional de Valparaíso para que emita su pronunciamiento respecto de la materia". Se explicó que la función de locución de todos los partidos oficiales que se juegan en el Estadio Sausalito, corresponde a una actividad propia de la Municipalidad y que, como tal, "sólo deber ser ejercida por personal municipal sujeto a tutela administrativa".