DOS TEOREMAS DE BIENESTAR PARA CHILE
ECONOMÍA: El primero dice que el equilibrio competitivo es Paretoeficiente, y el segundo se refiere a la adecuada distribución de los recursos.
El primer teorema del bienestar (PTB) dice que, bajo algunos supuestos, todo equilibrio competitivo es Pareto-eficiente. El segundo teorema del bienestar (STB) dice que, bajo algunos supuestos, cualquier equilibrio Paretiano puede ser alcanzado con una apropiada redistribución de los recursos.
A Pablo le gusta más el pomelo que la naranja y a Nardo le gusta más la naranja que el pomelo. Supongamos que ambos tienen las mismas cantidades de ambas frutas y transan en el mercado. ¡Es esperable que Pablo esté dispuesto a dar naranjas a Nardo a cambio de pomelos y Nardo de pomelos a Pablo a cambio de naranjas, esa transacción voluntaria llevará a un equilibrio Paretiano! Esto lo garantiza el PTB. Si Pablo tuviera más de ambas frutas y ellos transan en el mercado, se llegaría a otro equilibrio Pareto-eficiente, pero será un equilibrio "injusto". La eficiencia de Pareto es deseable no porque sea "justa" sino porque es una situación que evita el "desperdicio", por ponerlo de alguna forma. Se podría redistribuir las frutas de Pablo para Nardo y dejar que ellos transen en el mercado, para alcanzar otro equilibrio Paretiano, esto lo garantiza el STB, y ojalá este equilibrio sea "más justo". ¿Por qué son importantes estos conceptos en la coyuntura actual? Veamos…
¿está preocupado por la eficiencia? deje al mercado actuar
Notar que el "no desperdicio" aludido, se logra mediante el equilibrio competitivo. ¿Qué significa esto? Nadie obligó a Pablo o Nardo a transar por una u otra fruta. El equilibrio de no desperdicio se alcanzó en base al intercambio libre y voluntario en una economía de mercado donde se alcanzarán precios de equilibrio. Primer mensaje: ¡la economía de mercado es buena, si es competitiva! Muchos Pablos y Nardos transando, pero con un grupo de Nardos amigos, poniéndose de acuerdo en cuánto ofrecer a otro grupo de Pablos, no es una economía de mercado competitiva. Notar que los beneficios de una economía de mercado son más que una simple teoría. La economía de mercado que se ha implementado en Chile ha permitido que los ingresos de todos sus ciudadanos, incluyendo los pobres, vaya en aumento. Basta comparar los niveles de pobreza con aquellos de países vecinos donde la economía de mercado no se implementó de forma tan extensa como acá. El problema, los beneficios de un equilibrio competitivo y el PTB no nos dicen nada de igualdad.
¿está preocupado por la desigualdad? ¡deje al mercado actuar!
Un mundo donde muchos Pablos tienen el doble de frutas que muchos Nardos, podrá alcanzar un equilibrio Pareto-eficiente, pero no igualitario. Entonces, ¿habrá que eliminar el mercado? ¡Incorrecto! Notar lo siguiente, según el STB si se aplica una política redistributiva de fruta de Pablo a Nardo y se deja operar al mercado donde todos transan libremente, se alcanzará un equilibrio Paretiano, donde no habrá desperdicio. El ejemplo dado es muy sencillo para discutir las sutilezas de políticas redistributivas en el mundo real. Lo importante acá es el concepto: la competencia, la transacción libre, los derechos de propiedad y el mercado, serán importantes para alcanzar, sin desperdicio, una asignación que se considere deseable. Poner a cargo del gobierno, por ejemplo, el qué producir, dónde, cómo, de quiénes y para quiénes, será una tarea que nunca podrá ser realizada mejor que el mercado.
Consideraciones adicionales
Quizá alguno piensa que el modelo Chileno debe cambiar porque ambos, la economía de mercado y el estado subsidiario no han funcionado. Este es un diagnóstico equivocado. Chile tiene muchos desafíos: una economía pequeña, grupos empresariales dominantes, y desigualdades de origen. En estas condiciones, el gobierno debió cumplir un rol, pero no lo hizo. Debió garantizar que el mercado opere competitivamente. Lejos de esto, algunos miembros de los diferentes gobiernos coadyuvaron a que diferentes grupos empresariales se privilegien con situaciones anticompetitivas. Entonces creer que es necesaria una mayor participación del gobierno en la economía es un error. Del mismo modo, si se piensa en que los derechos de propiedad son el problema, se está cometiendo otro error, ningún modelo socialista ha sido exitoso para elevar los estándares de vida de la población. La sociedad civil debe pensar cómo hacer para que los mercados sean realmente competitivos en sus múltiples dimensiones. Con esta base y garantizando competencia se puede pensar en políticas redistributivas donde amerite. Pero destruir la base de la economía de mercado y sus poderosos incentivos puede ser muy costoso para todos, ricos y pobres.