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El coronavirus trajo consigo graves consecuencias económicas. Y si hay un sector donde han pegado fuerte es en el turismo de la región, que suma este capítulo a lo acontecido anteriormente con la caída en la llegada de pasajeros de cruceros y el estallido social. Sin embargo, el escenario por el que está pasando actualmente es el peor de todos, con cifras negativas de una magnitud nunca antes vista y donde, por ahora, las soluciones no parecen ir de la mano con la gravedad de la situación.
De acuerdo a una estimación realizada por la Corporación Regional de Turismo, las pérdidas de los alojamientos del territorio desde que comenzaron las restricciones más severas para responder a la emergencia, es decir, hace unos diez días, alcanzan los US$ 6 millones (cerca de $ 1.700 millones). Dicho cálculo, aclaró la entidad, resultó de los datos obtenidos del informe EMAT del mes de marzo de 2019, y no contempla el resto de las actividades relacionadas con el turismo en la región, como lo son las artísticas, restaurantes, tours y transporte, entre otros.
Duro golpe
"Esto ha sido un golpe tremendo para el sector. Nosotros hicimos una estimación basada en las cifras que teníamos el año pasado, y las pérdidas solamente en alojamiento son de alrededor de US$ 6 millones en los últimos 10 días, estamos hablando de US$ 600.000 diarios, aproximadamente, en base a la ocupación real que tuvo la región el año pasado", explicó el gerente general de la Corporación Regional de Turismo, Francisco Godoy, quien lamentó la situación que vive hoy la actividad.
"Para esta época, antes de que se desatara la emergencia, teníamos varias situaciones a favor, partiendo por el clima, y se habían programado actividades como las fiestas de la vendimia en diversos puntos que venían con mucha fuerza y que, por supuesto, debieron ser postergadas. Nosotros estamos haciendo un llamado a los turistas a que posterguen su viaje a la zona y los reprogramen, pero que no los cancelen. Claramente, hoy no podemos llamar a nadie a que visite la región", dijo el ejecutivo, quien destacó el impacto que esto también tiene en el empleo, recordando que sólo el área de alojamiento y restaurantes genera un 5% del empleo directo, sin contar el indirecto que llega a tres veces más.
Mayoría cerrados
Una encuesta realizada por la entidad para medir los efectos del covid-19 advierte que la mayor parte de los alojamientos del territorio están cerrados. "Consultamos a cerca de 140 establecimientos en la región y sólo el 30% de ellos está funcionando, pero en su mayoría haciendo otro tipo de labores, como limpieza, decoración, etc. La realidad es que no hay turistas. Algunos tienen trabajadores, pero eso no puede ser considerado como turismo finalmente", dijo Godoy.
De los que están cerrados, el 89,7% no tiene una fecha definida para volver a operar y el 10,3% estima que retomará sus funciones en abril. En cuanto a la llegada de pasajeros el 70% de los consultados vio canceladas más del 80% de sus reservas; y el 51% ha recibido reprogramaciones entre un 0% y un 20%, revela el sondeo. "Mientras más siga avanzando la propagación del virus, esto va a seguir empeorando", agregó.
Peor en valparaíso
"En concreto, en Valparaíso los hoteles en un 99% están cerrados, la situación es así de dramática y eso significa que no tenemos ingresos, y la caída de ocupación que se proyecta es hasta fin de año. De hecho, se cayeron todas las reservas hasta el mes de octubre", comentó la presidenta de la Asociación de Hoteles de Valparaíso, Verónica Castillo, quien advirtió que esta es la situación más complicada que ha vivido el gremio en los últimos años.
"Esto es catastrófico y es la peor crisis que hemos tenido en el sector desde que tengo conocimiento. Y lo más terrible es que no hemos tenido una respuesta concreta del Gobierno. Lo que más nos inquieta en este momento es que tenemos que responderles a nuestros trabajadores y no contamos con los recursos para hacerlo, algo que entendemos complica a todas las pymes de Chile. Además, cualquier acción tenemos que esperar que se decida en el Congreso", agregó la líder gremial.
"Hasta este momento con el estado de excepción decretado y el toque de queda el Gobierno aún no se hace responsable de qué va a pasar con los trabajadores y menos con la posibilidad de disponer una política paliativa para las pymes que estamos cayendo ya en punto cero (…). Hoy nos hemos pegado un frenazo en seco y cuando esto vuelva a un estado relativamente normal no vamos a ser los primeros entre las necesidades económicas de una familia".
"Estamos haciendo un llamado a los turistas a que posterguen su viaje a la zona y los reprogramen, pero que no los cancelen".
Francisco Godoy, Gerente general Corporación Regional de Turismo
US$ 600 mil pierde cada día el sector hotelero debido a las vacancias actuales, en comparación a la ocupación de 2019.