Paolo Navia S.
Hace aproximadamente una semana, y a raíz de la contingencia que se ha generado a nivel local tras la llegada del coronavirus a la región, los dueños de "Cervezocracia", local de cerveza artesanal ubicado en la calle Blanco de Valparaíso, decidieron reinventarse implementando una nueva modalidad de reparto a domicilio para solventar las cuantiosas pérdidas económicas generadas por la emergencia sanitaria.
Este complejo escenario se arrastra desde el inicio del estallido social, en octubre de 2019, y que se acrecentó luego que el Presidente Sebastián Piñera decretase el Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe, lo que en una primera instancia derivó en un toque de queda nocturno obligatorio desde las 22.00 horas hasta a las 5 de la madrugada, horario que según representantes del comercio, es donde se generan altas ganancias en materia gastronómica.
La medida es vista como la antesala a una eventual cuarentena total, lo que, sin duda, tendrá un impacto directo en el rubro turístico porteño, siendo los restaurantes y bares uno de los segmentos que ha sentido con mayor fuerza el impacto del coronavirus en la actividad económica, debiendo cerrar sus puertas al público para prevenir nuevos contagios.
"Para los que tenemos emprendimientos, lo más preocupante en estos momentos es poder pagar el arriendo del local y las cuentas básicas, pues ya ni siquiera tenemos a gente contratada y somos los dueños los únicos que estamos trabajando para juntar dinero para el arriendo", precisó Alexis Huerta, dueño de "Cervezocracia".
Cambio de roles
Los dueños del local de cerveza artesanal no se encontraban preparados para esta contingencia, puesto que su apertura se había generado a comienzos de marzo, teniendo un alentador inicio desde el punto de vista comercial.
No obstante, esta realidad hoy cambió de manera drástica, enfocando ahora su giro exclusivamente al reparto de comida y cerveza a domicilio debido al cierre del local como medida de prevención.
"No tenemos otra opción, pues a partir del cierre del local se tuvo que despedir al personal contratado y los dos dueños estamos cocinando, repartiendo los pedidos, gestionando los insumos y difundiendo la nueva modalidad a través de redes sociales", agregó Huerta, precisando que actualmente se están centrando en la distribución de cerveza artesanal, así como también de chorrillanas y las tradicionales calugas de pescado.
La iniciativa, debido a la crisis sanitaria por el covid-19, se ha replicado en un número importante de locales porteños. Tal es el caso del restaurante "Mar de Amores", ubicado en el corazón del cerro Alegre.
Allí, su socio principal, Sergio Mesa, tomó la decisión de no cerrar sus puertas para comenzar a entregar productos frescos a diversos puntos de Valparaíso, siendo su especialidad el clásico mariscal, preparación que gracias al nuevo giro de reparto a domicilio se puede preparar de manera fácil y rápida en las casas de los consumidores.
"Nosotros queremos que la gente pueda hacer en sus casas el mismo mariscal que se comía en el restaurante. Para eso enviamos un 'sachet' que incluye almejas, choros, camarones y ostiones, además de caldo de caldillo de congrio", explicó Mesa.
En este sentido, una de las particularidades del restaurante "Mar de Amores" guarda relación con sus productos, pues al ser un local enfocado netamente en la comida del mar, los peces y mariscos son sacados al momento de estanques con agua de mar que mantienen al interior del establecimiento culinario.
"Tenemos estanques con circulación de agua de mar y por lo mismo los mariscos se sacan vivos y frescos, así que la idea es reinventarnos y sacar promociones y productos nuevos para el despacho a domicilio", precisó el socio mayoritario de "Mar de Amores", quien fue tajante al expresar que "nuestro personal ha debido tomar nuevas funciones, pues el chef actualmente está fileteando los pescados, el administrador está haciendo las entregas en vehículo, al igual que yo, y la segunda administradora ahora toma los pedidos telefónicos y también es cajera".
Uso de aplicaciones
En esta línea, son varios los locales que han utilizado nuevos mecanismos para hacer crecer su porcentaje de repartos a domicilio. Por ejemplo, en "Club Gordos", restaurante con sede en Valparaíso y Viña del Mar, se han centrado en la publicidad en redes sociales y en la utilización de aplicaciones de delivery.
"Estamos invirtiendo recursos en publicidad en redes sociales, anuncios, papelería y trabajando con todas las aplicaciones posibles. Sumado a eso, en los próximos días también iniciaremos un reparto propio con opciones más baratas y promociones", manifestó Diego Hernández, dueño del "Club Gordos".
A su vez, y como medida de ahorro, Hernández agregó que "actualmente estamos buscando otro tipo de proveedores, más pequeños, por un lado para abaratar costos, pero también para ayudarlos a ellos, que al igual que nosotros están pasando por un mal momento económico".
Un caso parecido se registra en los restaurantes de comida peruana "Nazca", ubicados en calle Esmeralda, quienes a raíz de la contingencia han mantenido cerradas sus puertas hace aproximadamente ocho días, tiempo donde se han dedicado a perfeccionar una plataforma propia para repartos a domicilio, la cual será inaugurada a partir de la próxima semana.
"Las actuales aplicaciones de reparto cobran mucha comisión, y si a eso le sumas el IVA, casi no quedan ganancias. Por lo mismo, estamos trabajando en una plataforma propia para que nuestro público se contacte directamente con nosotros, pues ante la crisis es necesario reinventarse", finalizó César Fustamate, administrador del restaurante "Nazca".
"Estamos invirtiendo recursos en publicidad en redes sociales, anuncios, papelería y trabajando con todas las aplicaciones posibles de reparto".
Diego Hernández, Dueño del "Club Gordos"
"Lo más preocupante en estos momentos es poder pagar el arriendo del local y las cuentas básicas, pues ya ni siquiera tenemos a gente contratada".
Alexis Huerta, Dueño de "Cervezocracia"
"Las aplicaciones de reparto cobran mucha comisión, y si a eso le sumas el IVA, casi no quedan ganancias, así que estamos trabajando en una propia".
César Fustamante, Administrador de "Nazca"
7 horas, de 22 a 5 de la madrugada, es el tiempo en el que se extiende el toque de queda.