En noviembre retoman obras en el Instituto de Neurociencia porteño
REGIÓN. El director nacional de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas, Raúl Irarrázabal, confirmó los trabajos.
Un año y tres meses lleva sin movimiento mayor u obra gruesa la edificación del nuevo Instituto de Neurociencia de Valparaíso, construcción que espera retomar las faenas para el edificio en noviembre de este año.
Así lo confirmó el director nacional de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas (MOP), Raúl Irarrázabal, quien explicó que la paralización de la obra por el hallazgo de restos arqueológicos en el lugar, nunca significó no retomar la construcción.
"Hay una paralización de las obras de construcción de elementos nuevos, del edificio definitivo, pero el hallazgo de restos arqueológicos no significa que se deje de lado la construcción, todo lo contrario, es algo que le aporta y le da más valor a la construcción porque cuando se abra se podrá mostrar ese material. Por lo que en noviembre esperamos retomar la obra", aclaró Irarrázabal.
El director nacional de Arquitectura del MOP detalló que "uno nunca sabe la fecha exacta porque no sabe lo que va a encontrar, pero hacemos una proyección estimada en noviembre o diciembre de este año, donde debiesen estar listos todos los temas arqueológicos zanjados, para poder retomar la obra definitiva que es el edificio, que empiecen a haber estructuras metálicas y muros que se empiecen a levantar. Esto significa que a partir de noviembre debiéramos ver la excavación de lo subterráneo".
El funcionario del MOP reconoce que el proyecto "se ha alargado, pero en ninguna forma se ha paralizado", y por esto, dijo que "el Ministerio de Obras Públicas y la constructora tienen toda la disposición de seguir adelante a pesar de las dificultades porque cada nuevo hallazgo significa disponer de nuevos recursos de los cuales no se disponían originalmente y de toda la tramitación que corresponde que hace todo muy complejo".
El trabajo arqueológico ha sido complejo. Irarrázabal detalló que "se han agregado nuevos trabajos que no se tenían previstos originalmente, pero que de cierta forma estaban contemplados porque cuando se partió el proyecto había una caracterización arqueológica del sitio, se sabía que se iban a encontrar restos. Mientras no se hiciera la caracterización mediante los pozos de sondaje no era posible saber todo lo que se iba a encontrar, que ha sido mucho de lo que uno se imagina y todo tiene su etapa".
Como primera etapa, afirmó, se partió con la caracterización del lugar para el hallazgo arqueológico, luego el sondaje que falta una parte menor y "finalmente falta la tercera etapa que es el descarpe. Cada una de las etapas significa disponibilidad de recursos y temas administrativos".
Inversión millonaria
Como los procesos arqueológicos han sido tres, Irarrázabal explicó que por cada uno de estos hallazgos, que van desde fósiles hasta estructuras antiguas, se debe hacer una inversión que estaría contemplada dentro de la iniciativa.
Más de mil millones en total que se sumarían a la inversión inicial del proyecto, que supera los $7 mil millones. "Con los trabajos que se han hecho en el terreno, que se encuentra en la parte posterior de la iglesia La Matriz, llevamos cerca de $800 millones de pesos gastados y faltaría que se sume una cifra equivalente. Estamos hablando de casi $1.600 millones que podría costar solamente el tema arqueológico, a lo que se agregan los $7 mil millones, por lo que no es simple. El hallazgo arqueológico es un proceso complejo que lleva tiempo y con un costo importante asociado", concluyó Irarrázabal.
"El Ministerio de Obras Públicas y la constructora tienen toda la disposición de seguir adelante a pesar de las dificultades".
Raúl Irarrázabal, Director de Arquitectura del MOP