Cartas
Cálculo de pensiones
El tema es que cuando se calculan las pensiones en Chile, la tabla con las expectativas de vida tienen como tope estimado que el pensionado va a vivir hasta los 110 años.
Ante la pregunta si variaría mucho el monto de la pensión si se baja a 100 años, por ejemplo, los expertos dicen que no, porque son muy pocos los afortunados: en el hombre subiría 0,16 % y en la mujer, 0,61%. Ahora bien, si se calcula con 85 años la tabla, la pensión en el caso del hombre sube 13,96% y en la mujer, 17,3%.
El problema es ¿quién les paga la pensión a los chilenos que superen los 85 años de vida? De que los hay, los hay, pero ¿serán tantos los chilenos que superan los 85 años como para que las AFP no puedan afrontar esa pensión por el tiempo que resta?
Tal vez un seguro estatal, más la parte de la AFP, podría solventar las pensiones en los casos en que el pensionado viva más de los 85 años, pero ¿serán tantos como para seguir considerando los 110 años? Que levante la mano quien tiene parientes que hayan superado los 110, 90, 85 años. Sólo las cifras reales pueden ayudar a resolver la inquietud.
Luis Enrique Soler Milla
Fondo colectivo
La creación de un Fondo Colectivo Solidario de Pensiones introduciría de manera indirecta un sistema de reparto en Chile, paralelo al actual, y nos pondría en el camino de la captura política de los fondos de pensiones como ocurrió en Argentina. Sería un caballo de Troya para demoler el sistema previsional actual, que representa uno de los pilares del modelo de desarrollo seguido durante décadas.
Es de esperar que quienes han defendido con tanto ahínco el argumento de que los fondos previsionales ahorrados son de propiedad de los cotizantes -lo que si bien es efectivo, la finalidad a la que están destinados está determinada por la ley- para fundamentar el apoyo al proyecto de reforma constitucional que permitiría el retiro de parte de ellos, en el futuro se opongan con el mismo ímpetu al traspaso de tales fondos a manos del Estado, para que sea éste el que reparta jubilaciones.
Adolfo Paúl Latorre
Votación I
La diputada Jiles celebra enajenada, la gente hace memes.
No merecemos pensiones ni ayuda del Gobierno, nosotros hemos forjado nuestro destino.
Matías Hemard P.
Votación II
Después de la votación en la Cámara de Diputados sobre el proyecto del 10% de rescate de los fondos de pensiones, sólo me hago una pregunta: ¿Qué pensarán los electores de los diputados Jiles y Alarcón de las payasadas e insolencias protagonizadas por estos durante y después de la votación? Como están las cosas, seguramente estarán aplaudiendo a rabiar.
Alejandro Niklitschek Heck
Una pausa
Desde que el Ministerio de Educación decretó la suspensión de clases presenciales por la pandemia, el sistema escolar y universitario ha sido sometido a una fuerte presión por adaptarse a esta nueva modalidad a distancia. Ha sido una carrera contra el tiempo, comenzamos intentando homologar el sistema presencial que teníamos, pero al poco andar nos dimos cuenta que el actual contexto nos pone a prueba con nuevos desafíos. Necesitamos detenernos un momento para hacer una pausa física y mental.
Por una parte, están los profesores, quienes han debido sortear los embates de los sistemas digitales, a través de capacitaciones exprés y elaboración de material educativo que responda al desarrollo de aprendizajes y de priorización curricular.
A los apoderados, por su parte, no les ha quedado más que apoyar a sus hijos en las tareas escolares, sin tener noción de aspectos pedagógicos y disciplinares de las asignaturas del currículo nacional.
Es crucial que el Ministerio de Educación permita entregar esta flexibilidad de hacer una pausa a los establecimientos escolares, ya que cada comunidad educativa ha estado expuesta no sólo a las exigencias curriculares de una pandemia, sino que a las variables de posibles contagios, que han incidido en el contexto familiar y educativo de las familias chilenas.
Han sido meses agobiantes y desafiantes. Dejemos el computador por unos días, volvamos a organizar las actividades cotidianas, reflexionemos en cuanto a los aprendizajes que se han logrado obtener en tiempos de pandemia, permitámonos decantar las incertidumbres que ningún ser humano del siglo XXI se esperaba. Queda mucho por recorrer.
Carlos Guajardo Académico Facultad de Educación, Universidad Central de Chile
Robo de madera
Nuestros Congresales rechazan endurecer sanciones contra el robo de madera. Se protege a la delincuencia. Se argumenta que el proyecto de ley busca proteger a la industria forestal. ¿Y por qué no? La protección ciudadana es un derecho constitucional y una obligación del Estado.
Enrique Escobar Gattás
Preocupación
Desde hace un tiempo, Chile está de cabeza, sin rumbo, sin nadie que tome el control, donde cada uno se arroga el derecho a tener razón, a imponer por la fuerza sus ideologías, donde los delincuentes tienen todos los derechos y los afectados son condenados.
¿En qué momento se perdió el control de todo?, digamos que hace rato, agudizándose con el estallido delictual disfrazado de social. Con la pandemia el terrorismo se calmó un poco, pero nuevamente ya se ve que se repite la historia del 18 octubre y, para colmo, con la venia y amenazas de ciertos parlamentarios, que si no logran imponer su criterio, volverá un estallido 2.0. El hecho de ser parlamentarios no les da derecho alguno a tomar algo que no les corresponde, aunque tengan mayoría parlamentaria, pues hay un gobierno que ganó las elecciones y, les guste o no, se le debe respetar.
Este país retrocedió casi 60 años después de casi haber sido los tigres de Sudamérica. Aquí sólo cabe preguntar quién manda a quién. Quién será el "príncipe valiente " que se atreva a tomar la conducción de este país, poner orden, recuperar el Estado de derecho, principios y valores, derechos y deberes, y terminar con la quema permanente de la Araucanía, para que vuelva a ser el país que fue hasta hace pocas décadas.
M. Cristina Ruiz Tagle L.