Mauricio Claver-Carone prácticamente asegura la elección en el BID
BANCO. Corre solo y por primera vez la entidad no estaría con un latinoamericano a la cabeza, sino que con un estadounidense.
Efe
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) elige este fin de semana nuevo presidente, con el estadounidense Mauricio Claver-Carone como único candidato, lo que prácticamente asegura que por primera vez en su historia, la institución no estará encabezada por un latinoamericano.
Claver-Carone, el principal asesor para Latinoamérica del presidente de EE.UU., Donald Trump, quedó como único aspirante al puesto tras la retirada del argentino Gustavo Béliz, que era el único que disputaba el puesto al estadounidense de origen cubano.
Días atrás, también la expresidenta de Costa Rica Laura Chinchilla había retirado su postulación mencionando cambios "abruptos" en el proceso, en referencia a la tradición de que la Presidencia del BID la ocupe siempre un país latinoamericano o un caribeño y la vicepresidencia un estadounidense.
Elección telemática
La elección del sucesor del actual presidente del BID, el colombiano Luis Alberto Moreno, que ocupa el cargo desde 2005 y fue reelegido en 2010, se llevará a cabo en una Asamblea de Gobernadores del banco que comenzará este sábado y que, de ser necesario, podría prolongarse al domingo, algo que ahora se ve más improbable.
La votación tendrá lugar a puerta cerrada, por primera vez de manera telemática debido a la pandemia del coronavirus, y con voto secreto.
Un grupo de países, encabezado por Argentina, había promovido el aplazamiento de las elecciones a marzo de 2021 precisamente por el hecho de que la elección tenga que hacerse por vía electrónica y, ante la candidatura de Claver-Carone, para que tuviera lugar después de las elecciones estadounidenses de noviembre próximo.
Esa iniciativa había sido promovida inicialmente por el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, el español Josep Borrell, pese a que la UE no es socio como tal del organismo, y seguida por países como México, Costa Rica y Chile, así como por organizaciones regionales, expresidentes y otros.
El motivo es el cambio en el equilibrio de poder que supone que por primera vez un estadounidense se haga con este puesto, algo a lo que el propio Claver-Carone ha defendido que EE.UU. también es "parte de esta región" y que, como mayor accionista del BID, desea ayudar a Latinoamérica a superar la crisis causada por la pandemia.
Estados Unidos hizo valer el acuerdo alcanzado el pasado 9 de julio para celebrar de manera virtual la elección este 12 de septiembre, y advirtió de que se opondría a cualquier esfuerzo "por secuestrar el proceso electoral" de la institución.
Fracasa aplazamiento
La celebración este sábado de la elección confirma que los países que promovieron la postergación de los comicios no lograron el apoyo suficiente como para forzar un aplazamiento.
Los socios del BID que abogaron por retrasan las elecciones necesitaban más de 25% del poder de voto para evitar que este sábado haya quórum en la reunión de la asamblea, en la que los representantes de los países miembros deben elegir al próximo presidente, que tendrá un mandato de cinco años.