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Otra figura es el presidente del PPD Heraldo Muñoz, hombre fuerte en la oposición y con una larga trayectoria política. El 21 de agosto declaró a Radio Agricultura que no descartaba una eventual candidatura presidencial y afirmó que "Chile puede optar más que por Daniel Jadue y Joaquín Lavín". "Lo veré, pronto llegará la hora de tomar una decisión", puntualizó.
Una de las últimas opciones que han surgido, también en la DC, corresponde a la senadora por la Región del Maule, Ximena Rincón, quien dijo a La Tercera que "hoy día nuestra preocupación dice relación con el 25 de octubre y la elección de los constituyentes". Agregó que "no tengo problema en competir" ya sea en primarias internas, a nivel de coalición o en primera vuelta, reparando en que "no es la prioridad hoy día".
Las alternativas de Matthei y Lavín ciertamente captan atención al interior de Chile Vamos, sobre todo en la UDI, como lo expresa su correligionario, el diputado Osvaldo Urrutia, quien destaca que "es sumamente relevante y demuestra la influencia que tiene nuestro partido el hecho de que los dos candidatos presidenciales del oficialismo mejor posicionados en la actualidad sean de la UDI, como es el caso de los alcaldes Lavín y Matthei".
En la misma línea, Urrutia remarca que lo más relevante sobre los jefes comunales es que "no sólo tienen una tremenda trayectoria en política, sino que vienen del mundo municipal, lo que le daría al próximo gobierno un sello mucho más social, que es lo que vamos a requerir producto de todos los efectos negativos que ha provocado la pandemia".
"Ambos alcaldes son figuras destacadas y reconocidas al interior de la UDI, por lo tanto cualquiera que sea el candidato a La Moneda va a representar de la mejor forma los intereses del partido y también del sector, por lo respetados que son al interior de Chile Vamos" apunta Urrutia, sumando que "cuando estamos hablando de una elección presidencial, lo más lógico es que todos los partidos en la coalición se cuadren con el candidato mejor posicionado, independiente de su militancia".
En tanto, el senador Francisco Chahuán considera que "son nombres de bastante trayectoria, que ya han intentado en ocasiones anteriores una carrera presidencial, pero que han perdido ya sea en primarias o en la votación final. Tienen todo el derecho del mundo a intentarlo de nuevo y representar a su partido en una primaria interna de Chile Vamos, donde finalmente se elegirá al representante de todo el sector y no solo de un partido en específico".
En lo que respecta a la búsqueda de un nombre propio al interior del partido, el parlamentario sostiene que "RN siempre estará disponible para que uno de sus representantes sea abanderado y lidere un proyecto colectivo como opción presidencial, pero el tema es cuándo es el momento adecuado. Hoy nosotros como partido estamos mucho más preocupados de dar respuesta a las múltiples necesidades de los chilenos, tras los efectos que ha generado la pandemia. Esa es la prioridad y no aventuras personales o estar pensando en candidaturas en medio de una crisis sanitaria y económica que golpea duramente a las familias. Eso es hasta frívolo".
Sobre sus aspiraciones presidenciales, indica que "he dicho que uno siempre debe estar disponible para ser candidato presidencial si mi partido así lo requiere", pero advierte que "también he sido tajante en señalar que hoy no es el momento. Hoy la preocupación de todos debe ser derrotar la pandemia, recuperar los puestos de trabajo que se han perdido, entregar todo lo que sea necesario para apoyar a la clase media, y paralelamente, eliminar los abusos y discriminaciones que están afectando a los chilenos. Solo después de eso, habrá tiempo para las candidaturas. Eso es lo que hace un militante de RN: pensar más en Chile que en proyectos personales".
En la oposición, donde ha aparecido una mayor cantidad de alternativas para los comicios, son prudentes y asumen que antes de pensar en candidaturas para las presidenciales de 2021, están el plebiscito de octubre y el trabajo para sortear la crisis sanitaria y sus consecuencias en la población.
Al respecto, el diputado Jorge Brito (RD) afirma que "no veo de qué forma una candidatura presidencial, cuando falta más de un año, pueda quitarnos el esfuerzo, la atención. De hecho, cuando conversamos con gente en el territorio, la mayoría no ve con buenos ojos esta situación, porque están sufriendo desempleo, cesantía, en algunos casos suspensión de contratos y, en consecuencia, hay tantos desafíos que lo mejor que puede hacer cada una de esas candidaturas, es trabajar como nunca para poder ayudar a las personas".
En una línea similar, el diputado socialista Marcelo Schilling asevera que "en el PS definimos que nuestra única preocupación hasta el 25 de octubre es trabajar en la campaña por el 'Apruebo', y toda definición de candidatura de toda especie quedó postergada para después".
Por su parte, el exsenador por la Quinta Cordillera, Ignacio Walker (DC), opina que "es muy prematuro hablar de nombres", sumándose también a lo expuesto por Schilling en términos de ocuparse del plebiscito y una posible convención constitucional. Así y todo, asegura que "lo que sí es importante es ir perfilando cuáles son los tipos de alianzas de gobierno que se van planteando. En ese sentido, sostengo que entre medio de Joaquín Lavín en la UDI y de Daniel Jadue del PC, hay todo un país y que las fuerzas políticas que sean capaces de plantear una alternativa hacia el centro, la moderación y la sensatez, alejado de los extremos, va a ganar la Presidencia de la República. En ese escenario, creo que la DC, con otras fuerzas de la centroizquierda, incluso del centro, tiene un rol muy importante que jugar".
En lo que alianzas respecta, Walker sostiene que "ni la Concertación ni la Nueva Mayoría son replicables. El punto es evitar la tentación de apostar a la llamada 'unidad de la oposición'; yo sostengo que eso sería la izquierdización de la oposición, especialmente si consideramos que hay 13 partidos políticos de izquierda, a diferencia de los seis que eran parte de la Nueva Mayoría. En ese sentido, la izquierdización, lo único que hace es subsidiar al candidato de la derecha, porque le regala votos del centro, de los independientes, de sectores medios, moderados; por eso no es casualidad que Joaquín Lavín se esté moviendo hacia el centro y la socialdemocracia, porque constata que el centro está huérfano de representación política y que la izquierda moderada está crecientemente hegemonizada por el PC y el FA".
Schilling, por su parte, expresa que "si hay unidad para trabajar en conjunto por el 'Apruebo en el plebiscito, se habrá asentado una base fundamental para explorar las posibilidades de unidad después, y más aún si hay definición de un mecanismo común para resolver candidaturas únicas a la alcaldía en distintas comunas y a gobernadores regionales. Esas son las bases para poder cimentar un camino de unidad hacia la definición de un candidato presidencial común".
Eso sí, el legislador socialista advierte que "ninguna de estas empresas es sencilla: ni la unidad para el plebiscito ni para las municipales, ni gobernadores regionales y tampoco para una candidatura común. Creo que si se quiere prosperar, hay que empezar a abordar los aspectos programáticos que podrían servir de sustento a esas candidaturas y si los candidatos están de acuerdo con esos contornos, podrán participar en los mecanismos de selección que se definan de común acuerdo".
En cuanto a la diversidad de orgánicas dentro de la izquierda y la centroizquierda, el parlamentario admite que puede llegar a ser un inconveniente para lograr un acuerdo amplio, pero asume que "puede ser una fortaleza, si tienen la voluntad real de superar los gobiernos de derecha y ofrecerle una alternativa más social al pueblo chileno. Si esa voluntad es de verdad, se superarán todos los obstáculos, pero si no es así, se antepondrán cuestiones particulares que arruinarán el que Chile tenga una alternativa diferente a la actual, que tanto estropicio ha causado. Este no es un concurso de belleza, son ideas para el país las que están en juego".
La consejera regional Nataly Campusano (CS), destaca que los nombres que han aparecido en la oposición como opciones presidenciales tienen características para liderar un proceso. "Creo que esto no tiene que ver con los nombres de los candidatos, sino con los proyectos que cada uno representa. Por parte del FA es una discusión que estamos dando en este momento, que debemos zanjar, de ver cuáles van a ser nuestras alianzas y, sin duda, cuál va a ser nuestra carta. Pero desde ya creemos que debe ser una carta transformadora que venga de la mano con todo lo que ha sucedido en este último tiempo en Chile", explica.
"Todo tipo de alianza tiene que ver con lo sustantivo., en los programas, en el horizonte del Chile que queremos, tengamos cosas en común. Eso es lo primero que hay que discutir antes si vamos o no con un candidato común, lo que obedece de los distintos espacios de las diferentes coaliciones. Por tanto, ahí le tiro la pelota a todas las fuerzas políticas de la oposición, para poder situar ese horizonte común, pero con la discusión en lo sustantivo, con el debate que debe haber previamente para cualquier tipo de alianzas que puedan existir, porque si no hay ejes transformadores, creo que no tiene sentido uniones de esas características", subraya la candidata a gobernadora regional.
Sobre posibles pactos con la centroizquierda, Jorge Brito considera que "lo primero que debe hacer la ex Nueva Mayoría es ponerse de acuerdo entre ellos. No puede ser que estén planteando propuestas exactamente contrarias desde el mismo partido, como vimos el pasado fin de semana con el PS. Entonces, nosotros entendemos que con ellos puede existir unidad de propósito en algunos aspectos, pero eso sólo se puede dar si, primero ellos mismos se ponen de acuerdo con sus bases y, en segundo lugar, renuncian a los caudillismos y la política de la élite, y se abren a una más ciudadana".
"Tenemos en el país un proceso de 'activación' de la ciudadanía a raíz del estallido social, pero eso tiene que consolidarse y marcar la pauta para todo lo que viene en Chile. En ese sentido, hay que preguntarle a esos partidos si van a continuar con la lógica en la ex Nueva Mayoría o se abrirán a un diálogo ciudadano donde la gente decida", añade.
Consultado por potenciales alianzas con la Democracia Cristiana, Brito pregunta "¿Cuál DC? ¿La de Chahín? ¿La de Walker? ¿La de Ascensio? ¿La de Calisto? La DC que vemos hoy día es muy distinta a la que veíamos hace un tiempo con Mariana Aylwin o con Gutenberg Martínez. Por eso decía que primero deben ponerse de acuerdo entre ellos para conversar con el resto". 2
Hay que preguntarle a esos partidos si van a continuar con la lógica en la ex Nueva Mayoría o se abrirán a un diálogo ciudadano".
Si se quiere prosperar, hay que empezar a abordar los aspectos programáticos que podrían servir de sustento a esas candidaturas".
Por parte del FA es una discusión que estamos dando en este momento, de ver cuáles van a ser nuestras alianzas y cuál va a ser nuestra carta".
El punto es evitar apostar por la llamada 'unidad de la oposición'; yo sostengo que eso significaría la izquierdización de la oposición".
He dicho que uno siempre debe estar disponible para ser candidato presidencial si mi partido así lo requiere (...) pero hoy no es el momento".
(Lavín y Matthei) no sólo tienen una trayectoria política, sino que vienen del mundo municipal, lo que daría al gobierno un sello más social".
destacan nombres ¿y se suma otro?
acuerdos antes que nombres
alcanzar mínimos comunes
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