Luis Cuadra Santana

A sus 18 años, Isidora Niemeyer tiene ambiciones que pocas personas pueden perseguir con tanta seguridad.

Hace unos años, el equipo chileno de remo comenzó a hacer ruido. Se consagraron como una de las disciplinas fuertes en el país, siendo candidatos para brillar en los Juegos Panamericanos de 2019.

Entre los nombres que surgieron estaba el suyo, pues siendo menor de edad ya participaba de competencias mundiales y se volvió frecuente ver su nombre en el podio.

En 2018, haciendo equipo con Cristina Hostetter, se quedó con el bronce en la prueba dos sin timonel de la cita planetaria Sub 23.

El año pasado, en Lima, volvió a demostrar sus capacidades. Junto a las hermanas Melita y Antonia Abraham, más Soraya Jadue, se quedó con la medalla de oro en los cuatro pares de remos cortos femeninos. Además, con Yoselyn Cárcamo pudo obtener el segundo lugar en el doble para peso ligero.

Sus buenas actuaciones la llevaron a ser elegida como una de las mejores deportistas jóvenes por el Comité Olímpico de Chile en 2019.

Ahora vive un momento distinto. La pandemia pospuso los Juegos Olímpicos, cita a la que espera clasificar, pero también tiene un nuevo desafío: ingresó a estudiar Tecnología Médica en la Universidad Andrés Bello, en Viña del Mar.

Entre risas, la porteña dice que la cuarentena la ayudó, porque así tiene clases online y se puede organizar con mayor facilidad. Por otro lado, la pandemia la hizo dejar el Centro de Entrenamiento Olímpico de Curauma, donde suele vivir, y la llevó a volver con su familia, aunque asegura que "nunca paré de entrenar. Entrenábamos súper fuerte y mucho, dos veces al día, aunque fuera en la casa".

Hoy está de vuelta en el complejo deportivo para intentar hacer realidad sus sueños. Por ahora, no hay fecha oficial para el regreso de la competencia, pero debe seguir preparándose para cuando llegue el momento.

Según comenta la remera, se habla de un posible retorno en enero de 2021, fecha en la que se disputarían los Clasificatorios Panamericanos en Río de Janeiro, torneo que debió disputarse en abril de este año.

- ¿Cómo han sido estos meses de cuarentena para usted?

- No fue tan malo. Como vivo en el Centro de Entrenamiento Olímpico de Curauma, cuando tocó la cuarentena me tuve que ir a mi casa y fue bueno, porque como nunca estaba ahí, al fin pude estar con mi familia todos los días.

- ¿Cómo afectó esto en su rendimiento? Imagino que estuvo sin entrenar por un tiempo...

- La Federación y mi club me facilitaron el material para entrenar: pesas, barras y ergómetro, con eso tenía todo para seguir. Nuestro DT, Bienvenido Front, nos mandaba lo que teníamos que hacer todos los días y lo hicimos igual de fuerte que si estuviéramos acá (en el centro), solamente que en vez de entrenar en el agua lo hacíamos en el ergómetro. No perdimos mucho. Al principio fue fácil, pero cuando llevaba como un mes y una semana comenzó a ser más difícil. Entrenar sola en tu casa es fome. Al comienzo tienes la motivación, pero después de un tiempo cada vez cuesta más. Justo cuando comenzó a llegar ese momento pudimos volver a remar y entrenar en el CEO. Ahí fue mucho más fácil. Cuando nos dieron los permisos especiales para deportistas, con eso ya seguimos sin ningún problema.

- ¿Cómo ha sido el retorno a vivir en el Centro de Entrenamiento Olímpico en Curauma?

- Me gusta vivir acá, porque no tengo que preocuparme de nada, nos dan todo y lo tenemos todo, aparte que podemos entrenar sin ningún problema. Todo es perfecto.

- ¿Cuáles son sus expectativas para cuando regrese la competencia?

- Mi expectativa es quedar en el doble ligero y poder ir a clasificar a los Juegos Olímpicos. Después quiero mantenerme en el bote para poder ir a Tokio si se realizan.

- ¿Cree que la pandemia puede haber cortado su buen momento?

- No, para nada. Trabajamos la cabeza mucho más fuerte que nunca. Ya podíamos estar tres horas haciendo ergómetro y era súper normal.

- ¿Se proyecta para los Juegos Olímpicos? ¿Ayudó que se pospusieran?

-Para los Juegos Olímpicos estoy tratando de hacer todo lo posible y hacer las cosas bien para poder llegar a ese sueño. Sirvió que se pospusieran porque igual nosotras somos todavía súper chicas, entonces cada año nos ayuda más a mejorar. Lo tratamos de ver por esa parte, tenemos un año más para avanzar.

- ¿Cómo ve al equipo de cara a los próximos desafíos, incluyendo los JJ.OO.?

- El equipo está cada vez mejor. Para los Juegos Olímpicos aún no estamos para una medalla, pero tal vez sí para llegar a unas finales.

- ¿Cómo ha compatibilizado los estudios con el entrenamiento?

- Bien, más ahora que son online. Ha sido súper fácil compatibilizarlo porque aparte que tomo ramos que no me interfieran en los entrenamientos, si es así después tengo la grabación. No pierdo tiempo yendo a Viña, termino de entrenar y entro a clases. Aunque algunos me odien, yo amo las clases online.

"Entrenar sola en tu casa es fome. Al comienzo tienes la motivación, pero después de un tiempo cada vez cuesta más".

"Mi expectativa es quedar en el doble ligero y clasificar a los JJ.OO. Después quiero mantenerme en el bote para poder ir a Tokio". "Sirvió que se pospusieran los Juegos Olímpicos, porque somos chicas todavía y cada año nos ayuda a mejorar".

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