El histórico circuito italiano de Imola se convirtió ayer en el séptimo cielo para la escudería alemana de Mercedes y para el piloto británico Lewis Hamilton. En un circuito de la vieja escuela, que llevaba 14 años ausente de las pruebas de Fórmula Uno, y a cien kilómetros del centro neurálgico de la señera industria de constructores de Ferrari, el fabricante germano volvió a conquistar el campeonato de constructores de la categoría. Así, sumaron un inédito registro que considera siete títulos consecutivos y los tiene a un paso de sumar una nueva corona en el mundial de pilotos.

Esto, gracias al triunfo conseguido ayer por el séxtuple campeón de F1 en el GP de Emilia Romagna, donde Mercedes hizo el 1-2 gracias al segundo puesto obtenido por el finlandés Valtteri Bottas.

HAMILTON, CERCA del MITO

La novena victoria de Hamilton en trece pruebas de esta campaña lo deja a las puertas de su séptimo título mundial. Sería campeón en la siguiente fecha, en el GP de Turquía (15/11) si su compañero Bottas no le saca más de siete puntos en la carrera.

En Imola, escenario del trágico GP de San Marino de 1994, donde fallecieron el brasileño Ayrton Senna y el austriaco Roland Ratzenberger, protagonista además del excluyente duelo entre el español Fernando Alonso y el alemán Michael Schumacher por el título en 2005, la F1 regresó ayer con una carrera emocionante de inicio a fin y con varios giros de guión.

Bottas no falló en la salida, pese a que sus estadísticas no eran muy halagüeñas, con solo una victoria en las tres "poles" conseguidas esta temporada, un dato que acabó empeorando en el GP italiano. El triunfo de Hamilton y Bottas configuró una histórica jornada para su escudería. Algo que valoró el jefe del equipo, Toto Wolff.

"No suelo prestar atención a los números. Tenemos un grupo que es increíble. Juntos, hemos intentado elevar el listón, lo hemos conseguido y es un momento para estar orgulloso", dijo Wolff, quien aseguró que su equipo está en condiciones de "seguir empujando" y ya con ganas de asumir el "nuevo reto" que supondrá la próxima temporada.

Aunque el resultado no fue el mejor para la Fiorentina, que cayó derrotada ante la Roma por 2-0, el chileno Erick Pulgar sigue dando muestras de su recuperación física, al ingresar ayer en el segundo tiempo del partido disputado en la capital italiana.

En la última semana el antofagastino acumula casi 150 minutos en cancha con la camiseta viola, producto de sus ingresos en los partidos con Udinese y Roma, por el torneo italiano, más los 90 minutos en la Copa Italia, ante Padova.

La actuación del nacional fue correcta, aunque no trascendente para revertir un resultado que los romanos empezaron a concretar a los 12 minutos, cuando Leonardo Spinazzola anotó el 1-0.

Con la desventaja, el técnico de la Fiore, Giuseppe Iachini, decidió el ingreso de Pulgar por un bajo Gaetano Castrovilli, con la tarea de cerrarle los circuitos en mediocampo a los romanos. Algo que por pasajes consiguió el cuadro de Florencia, pero que a los 70' vio como el español Pedro Rodríguez decretaba el definitivo 2-0.

Sánchez a madrid

Otra buena noticia que llegó desde Italia para el entrenador de la selección chilena, Reinaldo Rueda, tiene que ver con Alexis Sánchez.

Según el Corriere dello Sport, el cuerpo médico de Inter dio el alta al jugador nacional, quien "con confianza, podría llegar a una eventual convocatoria para el partido de este martes ante Real Madrid en España".

En todo caso, asegura el medio, la titularidad de Sánchez está descartada. "Aún no está claro que el chileno de garantías como titular o pueda sentarse en la banca".

Christiane Endler sigue dejando el prestigio del fútbol chileno en lo más alto del orbe luego de concretar ayer otra actuación destacada en el arco del Paris Saint Germain, que goleó por 4-0 a FC Fleury 91. Con este resultado, las parisinas se mantuvieron en el segundo puesto de la Ligue 1 de Francia, a dos puntos del líder, Olympique de Lyon, que venció 5-0 a Montpellier.

La presentación de "Tiane" nuevamente fue destacada por su entrenador, Olivier Echouafni, quien valoró que su equipo no haya recibido goles en los últimos seis partidos, de los cuales cinco los saldó con amplias victorias.

"La serie continúa y esto es muy bello. No hemos recibido ningún gol desde la primera fecha. Desde entonces, hemos estado en una constante fase ascendente, donde no hemos dejado de anotar y mantenemos una solidez defensiva que inicia el arco", dijo el estratega del PSG.