Denuncian anomalías en la construcción de viviendas sociales
QUILLOTA. Vecinos llevaron el caso a la Contraloría, al Congreso y al Gobierno. Además, cuestionan la licitación.
Una serie de irregularidades en la licitación y construcción de sus viviendas sociales denunciaron vecinos de Quillota, quienes se agruparon y llevaron el caso a la Contraloría Regional, al tiempo que enviaron una carta al presidente de la Comisión de Vivienda de la Cámara de Diputados, Gonzalo Winter, así como al ministro de Vivienda y y al ministro secretario general de la Presidencia, a quienes les exponen detalladamente la situación.
En la misiva dirigida a Winter le explican que "la comunidad Altos de Merced, de Quillota, consiste en 14 edificios de 20 departamentos de cada edificio, en los cuales, 9 de ellos, presentaron deficiencias importantes en su construcción, evidenciadas por profesionales de construcción (habitantes) como también la propia empresa inmobiliaria que lo comercializó. El problema consiste en que las cañerías de agua caliente y fría estaban hechas con un material de PVC no apto para este tipo de proyectos, por cuanto el agua caliente terminaba por despegar el adhesivo, causando filtraciones aleatorias en cualquiera de los 5 pisos de 9 de los 14 edificios del proyecto".
Empresa no respondió
Agregan que "esta situación no fue remediada por la empresa inmobiliaria, la cual operaba con un rut específico para este proyecto, presentando la quiebra a 6 meses de la entrega, cuando los reclamos empezaron a llegar. Los arreglos realizados eran estéticos, reemplazando vulcanita de las paredes o pintando, no realizando los cambios estructurales del sistema hídrico necesarios. Los vecinos realizaron sus propios arreglos, siendo en vano, debido a que las filtraciones siguen (a la fecha, 6 años después de su entrega) ocurriendo entre los pisos de los departamentos".
Por otra parte, advierten que los problemas se repetirían en Viña del Mar y en Quintero, ya que "esta agrupación de usuarios descubrió que esta situación no era única para su condominio, encontrando dos programas Serviu en los cuales se presentaron fallas del sistema hídrico idénticas a las de su comunidad, por parte de la misma constructora: Conjunto habitacional Alto Reñaca y Condominio Brisas del Mar".
Añaden que "estos problemas no se limitan solo a una constructora o comuna, sino que la misma condición se encuentra a nivel provincial, afectando las comunas de Quillota, La Cruz, La Calera y Nogales".
Pidieron información sobre el tema a Serviu, pero la respuesta no fue satisfactoria, por lo que hicieron la solicitud vía Transparencia, y tras recibir la respuesta, constataron que "todas las licitaciones de la comuna de Quillota fueron adjudicadas a la empresa Anta Ltda. (...) Llama la atención que las licitaciones deberían ser declaradas desiertas si solo emerge un proveedor (violación principio de competencia de mercado público). También llama la atención que más de la mitad de las licitaciones poseen brechas de adjudicación, tales como no presentar boleta de garantía (siendo exigida en la licitación), no presentar ITO en la propuesta (requisito de exclusión de la postulación) y no contar con la experiencia necesaria en las primeras postulaciones".
Dimensiones menores
Otra irregularidad que encontraron los vecinos es que "las dimensiones físicas de las casas eran inferiores a lo pactado en el contrato individual de propietario, y éstas a su vez eran inferiores a lo ofertado por el proveedor durante la licitación. También llama la atención que los valores entregados por Serviu a la empresa en todas las licitaciones fueron superiores al valor solicitado por la empresa licitante, situación idéntica que fue encontrada por la Contraloría en el Serviu de la región Metropolitana la semana pasada, y sancionada por multas sobre los 200 millones de pesos".
Por otro lado, exponen que "las casas presentaban deficiencias estructurales en los muros interiores, los cuales se doblaban al aplicar mínimo peso en medio".
Una de las vecinas afectadas es María Margarita Silva, quien vive en el primer piso de la torre 7, y para ella "es una estafa, vivimos en una forma miserable y deplorable. Fue un sueño roto y nadie del ámbito gubernamental nos apoyó".
Consultado al respecto, el director regional de Serviu, Tomás Ochoa, señaló que "tomamos conocimiento del tema y procederemos internamente a realizar todas las averiguaciones para determinar si tenemos competencias respecto a lo denunciado. Finalmente, ratificamos nuestro compromiso por el cumplimiento de la normativa legal y el resguardo de nuestros beneficiarios".
"Es una estafa, vivimos en una forma miserable y deplorable. Fue un sueño roto".
María Margarita Silva, Vecina afectada