"Se podrían flexibilizar algunas medidas para recibir turistas"
"Nos hemos preparado, tenemos un plan de turismo seguro y confiable, hemos capacitado a casi mil personas, está la implementación de los protocolos por parte de Sernatur, de la Corporación, y un tema externo que sucede principalmente al interior de las casas finalmente nos termina perjudicando a todos", comenta el gerente general de la Corporación Regional de Turismo, Francisco Godoy, respecto al dramático escenario que enfrenta el sector, que hoy prácticamente no puede recibir turistas, dejando en una delicada situación a miles de emprendedores.
- ¿Cómo han recibido en la Corporación estos sucesos, la suspensión de los fuegos y la entrada a fase 2 de la zona?
- Sin duda que las restricciones en la Región Metropolitana fueron una pésima noticia porque estábamos haciendo una apuesta, invitando a la gente de allá a venir a la región y teníamos buenas cifras de ocupación en todo el territorio. Se estaba reactivando el turismo, de forma tímida, pero había movimiento y ya veíamos que la gente podía retomar sus trabajos. Se estaba comenzando a recontratar y empezábamos a notar nuevamente un flujo de la economía en el sector. Ahora, cuando la Región Metropolitana pasó a fase 2 en su totalidad, nosotros reorientamos nuestra estrategia pensando principalmente en el turismo intrarregional y también pensando en llamar a los turistas de otras regiones aledañas.
- Pero con la entrada a fase 2 parecen cerrarse los caminos.
- Ya con la vuelta a fase 2 de Valparaíso, Viña y Concón se ve truncada nuestra estrategia de turismo intrarregional. Sin duda que hay otras partes de la región como la provincia de Aconcagua, el litoral norte o el litoral sur que siguen en fase 3, pero el grueso de turistas a esas zonas también son de Santiago o de Valparaíso, Viña y Concón. Así que sin duda golpea muy fuerte. Entonces, esta situación sucede ad portas de un Año Nuevo que esperábamos fuera el puntapié inicial de esta temporada de verano. Lamentablemente no va a ser así.
- Ahora queda enero y febrero, pero también va a depender del autocuidado de las personas.
- Hoy es fundamental el autocuidado, sobre todo este fin de año, y de esa forma no tener un rebrote que nos pudiera complicar y afectar de gran manera el turismo en esta temporada de verano que esperamos que sea en fase 3 la mayor parte de enero y febrero, tanto nosotros como nuestro principal polo de turistas que es Santiago. (...) Tenemos todas las esperanzas cifradas en que en enero ya podamos salir de esto, ojalá en los primeros días pasar a fase 3 y seguir avanzando. Sabemos que si bien las medidas sanitarias y las restricciones son muy importantes porque van en pro de la salud, también tenemos que reactivar el turismo en la región y poder trabajar, lo cual ahora se hace muy difícil para los emprendedores turísticos en estas condiciones.
- Los gremios del sector han advertido la urgencia por ayuda y que se tomen medidas para mantenerse.
- Eso es fundamental. Si bien ha habido ayuda de los distintos créditos, subsidios al empleo, etc., el ecosistema necesita aún más apoyo entendiendo que los fondos son limitados frente a la necesidad que existe. Pero ahora lo que más se necesita es continuar trabajando y flexibilizar algunas medidas para poder hacerlo, principalmente los distintos alojamientos. (...) Por lo tanto, se podrían flexibilizar algunas medidas para poder recibir turistas.
- ¿Están elaborando una propuesta en ese sentido?
- Estamos trabajando en una mesa de turismo a nivel regional donde también solicitamos flexibilizar las medidas para que puedan llegar los turistas a la región. Por supuesto que vengan con reservas en un hotel que cuente con el sello de confianza turística de Sernatur, que tenga todos los protocolos y las medidas necesarias. Eso sería muy bueno y muy importante para poder reactivar el turismo en la región o al menos para poder mantenerlo y seguir trabajando.
- Se habla de que el turista pueda llegar con un PCR negativo y medidas como ampliar espacios en veredas o calles para que restaurantes, sobre todo los que no tienen terrazas, puedan funcionar.
- Respecto a lo primero, sería bastante bueno que con medidas como un PCR negativo y con otras que den seguridad sanitaria, y que hemos trabajado como sector, se puedan complementar para seguir recibiendo turistas. Se hace complejo pensar que un turista santiaguino si pueda viajar al extranjero, pero que no pueda venir a la región. Ese tipo de cosas no cuadra. Por lo tanto, creo que es necesario considerar algún tipo de flexibilización. Respecto a lo de las terrazas, por ejemplo cancelar el pago de patentes tanto para el uso de terrazas como las patentes comerciales, son medidas que, sin duda, irían en ayuda del ecosistema turístico. Ojalá podamos hablar de reactivación, pero hoy estamos hablando más de poder mantener los emprendimientos porque ha sido muy difícil y compleja toda esta situación. Si seguimos más tiempo en fase 2 que, por lo menos, se entreguen más facilidades a los emprendimientos turísticos y de servicios relacionados para que puedan seguir funcionando en la región y no morir.
- El 2020 va a ser un año perdido para el turismo regional.
- Así es. Las cifras que hay fue lo que se pudo funcionar en parte en enero, febrero y la primera quincena de marzo porque el resto ha sido prácticamente nulo. Durante septiembre y octubre hubo un pequeño repunte y también en noviembre con un tímido 20% de ocupación, y estoy hablando solo de los fines de semana. Además, hay que considerar que solo un 35% de los alojamientos estaba abierto, y eso influye muchísimo. (...) Ahora, ese repunte se dio especialmente los fines de semana y en un par de meses, pero eso frente a 7 u 8 meses sin funcionar y con las deudas enormes que se han contraído no es suficiente para nada.
- ¿Cuando pase un poco la parte dura de la pandemia se va a necesitar una agenda especial de reactivación para el sector?
- Va a costar y sin duda se va a requerir un plan especial de apoyo que puede pasar por la reducción de impuestos, de pago de patentes, incentivos. Hemos recibido ayuda del gobierno central y regional, pero vamos a seguir necesitando apoyo para mantener viva la actividad turística. Hablamos casi de 42 mil empleos directos en alojamientos y restaurantes. Durante la pandemia bajó un 75% a 80%. Se comenzó a reactivar en septiembre, octubre y noviembre y se recontrató, pero, lamentablemente, con lo que está pasando, muchos ya han decidido suspender nuevamente a sus trabajadores y otros bajar la cortina.
"Es fundamental el autocuidado. (...) Tenemos todas las esperanzas cifradas en que en enero ya podamos salir de esto, ojalá en los primeros días pasar a fase 3 y seguir avanzando".