Correo
Esfuerzo de todos
Que no se engañe la gente que cree y piensa que la vacuna terminará con el virus. Esta pandemia mundial requiere que los habitantes del globo terráqueo se pongan las pilas de una vez por todas. Lo primero, evitar salir de casa, excepto por condiciones de trabajo y compras urgentes. Lentamente el virus será vencido, pero no es fácil debido a la tozudez de la gente que espera un Año Nuevo normal. Todo el 2021 será muy movido.
Renato Norero V.
Alfredo Barría
Alfredo Barría murió en Valparaíso. Alfredo fue mi mentor y maestro en la cinefilia, acogiéndome a mis 13 años en su curso de Apreciación Cinematográfica en el Instituto Chileno Norteamericano de Valparaíso.
Gracias a él descubrí el cine mudo, el neorrealismo italiano, la vanguardia alemana, la nueva ola francesa... Gracias a él descubrí a Buster Keaton, a Carl Dreyer, a Andréi Tarkovski, a Josef von Sternberg... Todo lo que sé de cine hoy en día fue gracias a él.
Lo acompañé en su idea de crear el Festival de Cine de Valparaíso en sus primeras versiones, primera tentativa de un festival de cine patrimonial en América Latina, donde invitó a críticos y cinematecarios de todo el mundo. Alfredo fue el Simón Bolívar de la cinefilia cuando internet recién comenzaba. Alfredo rescató la memoria de cineastas olvidados cuando a nadie le interesaba la memoria. La primera proyección pública de "La batalla de Chile", de Patricio Guzmán, fue organizada por él en Valparaíso, así como también la primera proyección de "Ordet", de Carl Dreyer; de "La sed de mal", de Orson Welles, o de "Mouchette", de Robert Bresson, en copias restauradas.
Ojalá exista en algún lugar un paraíso lleno de cines y películas para descubrir, donde Alfredo pueda sentirse a gusto y feliz por la eternidad. Los que nos quedamos aquí nos ocuparemos de mantener su recuerdo vivo.
Adiós maestro. Hasta pronto amigo. La función debe continuar.
Nicolás Lasnibat Cineasta
Delincuencia
Preocupante noticia apareció en la página 3 de vuestro Diario publicado el 25 de diciembre. Ante las balaceras y la violencia desatada se señala: "La situación es incontrolable en los sectores altos de la Ciudad Puerto. Y el presidente del Core, Manuel Murillo, precisa: "Hemos perdido como autoridades, tanto políticas como policiales, esta batalla que la droga y la delincuencia nos ha ganado".
Yo no soy abogado y como simple ciudadano pienso que si las leyes y el sistema no funcionan, hay que cambiarlos. Quienes suelen clasificarse de progresistas o pacifistas y postulan que con estos delincuentes que siembran el terror es posible entenderse y negociar o razonar, caen en la mayor de las ingenuidades. Son un grave peligro público, absolutamente irrecuperables para la sociedad.
Terroristas, delincuentes, narcotraficantes, una mezcla letal. Siembran la muerte y la inseguridad en los barrios, en nuestras ya muy tensionadas poblaciones por el covid-19, cuya extrema vulnerabilidad en lo socioeconómico las caracteriza. Es hora de que esos delincuentes armados que amenazan la vida de nuestra gente inocente se enfrenten a las más drásticas medidas por parte de la sociedad organizada.
Tienen que enfrentarse a la institucionalidad sabiendo que sus vidas, al igual que la de las personas que ellos amenazan y matan, también corren similar y, ojalá, mayor peligro.
Basta ya. No vaya a ser que pronto sea demasiado tarde.
Nathan Novik
Brechas en educación
La crisis sanitaria que hemos atravesado durante este 2020 ha evidenciado y acrecentado las brechas en materia de derechos sociales y, particularmente, en materia de educación. Según la encuesta "Estamos Conectados", de Educación 2020, tenemos 16 mil estudiantes menos en el sistema que en el año 2019; y si se suma a ello la baja conectividad a internet de los sectores socioeconómicamente más vulnerables, nos situamos en un complejo escenario para el año 2021, donde, al parecer, la pandemia tardará un buen tiempo más en ser superada y las clases presenciales serán de difícil implementación, especialmente considerando que muchos establecimientos no cuentan con los recursos para un regreso seguro de los y las estudiantes.
En este marco, resulta urgente que los niños, niñas y adolescentes sean puestos al centro de la preocupación estatal y que las medidas que se tomen en relación al ejercicio del derecho a la educación consideren las particularidades territoriales y socioeconómicas de todas las infancias que habitan nuestro país. Hasta ahora han sido muy invisibles y los datos dan cuenta de ello.
Ponerlos al centro implica una efectiva priorización, tanto presupuestaria como administrativa, que permita garantizar que ningún niño o niña se quede fuera por no contar con elementos básicos para acceder a la escuela, ya sea presencial o telemáticamente. Lo anterior, sin lugar a dudas, requiere no solo de medidas en el ámbito educativo, sino también un fortalecimiento de la protección social de las familias y cuidadores.
Camila De la Maza Coordinadora de Seguimiento Legislativo en Corporación Opción