La Estrella, presente en tiempos de cambio
El popular diario porteño cumple un siglo de existencia manteniendo su compromiso fundacional de servicio y modernidad. El primer ejemplar del diario aparece a días del gran cambio político que significó la llegada a La Moneda de Arturo Alessandri Palma, tiempos de crisis con miles de cesantes.
El diario La Estrella, que ayer 1 de enero cumplió 100 años de existencia, nace en tiempos de cambio. Diez días antes del lanzamiento del primer ejemplar, asumía la Presidencia de la República Arturo Alessandri Palma, tras reñida elección. Su llegada a La Moneda respondía a demandas y esperanzas. El mundo, aún no cerraba las heridas de la Primera Guerra Mundial, la Gran Guerra, que dejaba terreno propicio para la segunda que se iniciaría en 1939. La comunicación social experimentaba impactantes avances. El cine, ya consolidado, pasaría a ser sonoro y la radio irrumpía en 1922 en nuestro país con información, cultura y entretención a domicilio. Con el Gobierno de Alessandri, en medio de conflictos, termina el parlamentarismo y en 1925 se aprueba una nueva Constitución mientras la crisis salitrera deja miles de cesantes. Vive Chile y el mundo, tiempos de cambio. Son los años locos - the roaring twenties- con el charlestón, precoz expresión de globalización, y con una burbuja de prosperidad que estalla en 1929.
La ciudad cuna del diario es el motor económico del país, con la banca y su mercado de valores, hoy desaparecido, de proyección internacional. El puerto es la principal puerta de entrada al país. Llegan migrantes, corrientes culturales y nuevas tendencias. En el deporte, importación del Siglo XIX, domina el fútbol con su bandera porteña tradicional: Wanderers. La ciudad tiene, cuando aparece La Estrella, 182.422 habitantes y su expansión requiere nuevas líneas de tranvías y 26 ascensores. El conflicto social y la pobreza acompañan al desarrollo de la poderosa ciudad.
En ese ambiente, al alero de El Mercurio, aparece La Estrella con un compromiso que consigna su primer editorial: "Aspiramos a cimentar un diario donde resplandezca un bien entendido espíritu de modernidad, y donde junto a la noticia fresca que dicta la vida cotidiana, pueda encontrar el lector (cualquiera sea su condición) la nota amable de la crónica ligera o el comentario fundado…aspiramos a desarrollar una obra cultural intensa por medio de la difusión de las actividades intelectuales, literaria y artísticas". El diario, fundado en 1921 por Agustín Edwards Mc Clure, gran renovador de la prensa nacional, al ritmo de los tiempos, ha cumplido con su compromiso de modernidad. Ello se manifiesta en lo tecnológico, en lo periodístico y en la paridad de género, más allá del discurso: el diario, con acierto, lo dirige una mujer.
En tiempos de competencia mediática y de erráticas redes sociales, la supervivencia de La Estrella a través de un siglo se explica, no como una decisión de su empresa editora, sino como el reconocimiento de la comunidad a su incesante tarea de servicio público, alerta, como en 1921, a la necesidad de información responsable en crispados tiempos de cambio social.