Los descriterios del Intendente
POR RODRIGO ROZAS, presidente de la cámara de comercio y turismo de viña del mar
En Estados Unidos la ley sanciona implacablemente con cárcel a aquellas autoridades que, haciendo uso de su cargo, inducen al desconcierto civil o, bien, cuando sus declaraciones generan caos y pánico económico en las ciudades.
Así las cosas, el Intendente de la Región de Valparaíso, licenciado en Ciencias Jurídicas, señor Jorge Martinez Durán, debería agradecer vivir en Chile, y de esa manera no tener que responder por los desafortunados comentarios que a muchos les sonó como una clara y contundente amenaza, al decir que la región podía entrar en cuarentena a la brevedad, dados los altos índices de contagio, cargando toda la culpa a la población, cual inspector de colegio retando a sus alumnos, en un vano intento por desviar el foco de atención respecto de su mal manejo al momento de implementar medidas que justamente frenen o aminoren el contagio.
Es el propio señor Intendente quien tiene las herramientas legales para ordenar el aumento de dotación de las Fuerzas Armadas y Carabineros en las calles con el fin de cautelar que las normas de mascarillas y distanciamiento social se cumplan como corresponde. Pero nada de eso sucede y, muy por el contrario, las calles están inundadas de comercio ilegal, obstaculizando el paso de los peatones, generando aglomeraciones y desorden, lo que finalmente provoca más contagios y aumentos de la delincuencia y la ley de la selva en las calles.
Pero volvamos a las infaustas declaraciones del señor Intendente que ocasionaron pánico en el comercio y gatillaron que los dueños de establecimientos, ya cansados por el esfuerzo económico realizado hasta el momento, decidieran finiquitar personal y definitivamente bajar la cortina para siempre. La irrefrenable verborrea del Intendente ocasionó que hoy existan personas sin trabajo, aumentando la ya alta tasa de cesantia, que a la sazón es una de las más altas del país.
Como representante del Comercio y Turismo de Viña del Mar, le solicito formalmente al señor Martínez que fije la mirada en cómo implementar medidas que vayan en beneficio de evitar el contagio, compatibilizándolo con políticas acertadas de manejo económico, y evite así dar conferencias de prensa en el piso 18 de la Intendencia, que sólo generan pánico y desconcierto en la población, y que, como efecto final, sólo derivan en pérdidas de empleos.
El comercio viñamarino ya no puede seguir siendo víctima de políticas locales desacertadas, que dañan el empleo y sepultan negocios y empresas que sólo están luchando por sobrevivir.
Bastante difícil la tenemos ya con los efectos del estallido y la crisis sanitaria.