Ajustes escuchando la voz de los alcaldes
El confinamiento de fin de semana de casi un millón 300 mil personas en la región llama a examinar permisos de vacaciones y aforos. Ayer se informaba de 338 nuevos casos en la región y 10 fallecimientos, totalizando 1.531 muertes desde el inicio de la pandemia. Las luces rojas alertan, pues Valparaíso y Biobío son las zonas del país con mayor aumento de casos activos.
Con el retroceso a la fase 2 del plan Paso a Paso de las comunas de San Antonio, Quintero y Catemu, casi un millón 300 mil personas de la Región de Valparaíso quedan en una condición de semiconfinamiento, con restricción total de movimiento los fines de semana. Esta elevada cifra incluye a 331 mil visitantes que han llegado a la zona mediante el permiso de vacaciones.
Para la comuna costera de Quintero el hecho es lamentable, pues castiga, una vez más, a su actividad turística de fin de semana. Reiterando una opinión que no ha sido debidamente atendida desde el nivel central, el alcalde, Mauricio Carrasco, afirma que "lo dijimos a través de todos los medios, los alcaldes de las distintas comunas balneario, que los permisos tienen que ser con un aforo máximo, no puede ser que una comuna de 30 mil habitantes tenga más de 15 mil permisos de vacaciones… Entendíamos todos los alcaldes que hay que reactivar el país, pero en forma ordenada".
El mismo confinamiento de fin semana ya afecta a las ciudades de Valparaíso y Viña del Mar, lo que no ocurre con la vecina comuna de Concón, que al pasar a la fase 3 ha recibido una gran carga de visitantes mediante permiso de vacaciones.
Así, el gran tema pendiente en medio de las restricciones es ese permiso, donde si bien el beneficiario debe indicar su lugar de destino, no considera aforos locales, como lo plantea el alcalde de Quintero. Por eso comunas atractivas, con o sin restricción de fin de semana, se ven sobrecargadas con todos los riesgos asociados y con sus limitaciones propias de sistemas de control y de salud.
A esa sobrepoblación se agregan problemas como el comercio ilegal que afecta a Viña del Mar, atraído, precisamente, por los visitantes. Con esa dinámica de crecimiento poblacional y también con una buena cuota de irresponsabilidad, aumentan contagios y casos y la presión sobre el ya agotado sistema sanitario, público y privado.
Ayer se informaba de 338 nuevos casos en la región y 10 fallecimientos, totalizando ya 1.531 muertes desde el inicio de la pandemia. Además, las luces rojas alertan, pues Valparaíso y Biobío son las zonas del país con mayor aumento de casos activos.
Frente a esa realidad hay que insistir en la continuación del proceso de vacunación evitando discrecionalidades, pero también en cuanto a ese punto y al cuestionado tema de los permisos es necesario una efectiva atención desde el nivel central a la voz de los alcaldes.
Son los jefes comunales las autoridades de terreno responsables directamente de la salud primaria. Aquí el tema no es político, es de interés general, y exige ajustes en las medidas escuchando experiencias y sugerencias en esos aspectos clave de la lucha contra la pandemia como son los permisos de vacaciones y los calendarios de vacunación.