Cuidando la salud familiar: control de plagas
LAS INVASIONES DE INSECTOS Y ROEDORES, ENTRE OTRAS, PROVOCAN DAÑOS TANTO A LA SALUD DE PERSONAS Y ANIMALES DOMÉSTICOS COMO EN LA INFRAESTRUCTURA DE LAS VIVIENDAS. ANIMALES DOMÉSTICOS COMO EN LA INFRAESTRUCTURA DE LAS VIVIENDAS.
Las plagas pueden hacer su aparición en cualquier momento y lugar. Por ello es necesario estar siempre alerta para controlarlas y así evitar problemas mayores o tener que llegar a tomar medidas más extremas como las fumigaciones, con los riesgos que eso puede implicar para los integrantes de la familia, incluidas las mascotas.
En las ciudades convivimos a diario con diversas especies cuyas poblaciones crecen hasta convertirse en plagas, como ratas, aves e insectos que se asientan en zonas más urbanas, entre otras cosas, por la disponibilidad de fuentes de alimentos que hay en ellas. Es saludable siempre evitar el contacto callejero con animales como las palomas, pero si hablamos de plagas que están a diario en nuestros hogares se hace indispensable adoptar otro tipo de control.
Los controles de plagas caseras más comunes son los de cucarachas, termitas, mosquitos, moscas, hormigas, pulgas, piojos y aquellos relacionados con las plantas que tenemos en nuestros jardines, patios y viviendas
Más allá de ellos, podemos realizar en nuestros hogares medidas preventivas entre las que se cuenta:
• Limpiar, desinfectar y ordenar. Con el fin de evitar las fumigaciones y los riesgos para la salud familiar que éstas conllevan, se recomienda mantener los espacios de la casa higienizados.
• Mantener la comida bien guardada, almacenada en recipientes con tapas y refrigerada.
• Control de la basura. Reciclar y separar los residuos ayuda a la prevención de plagas, es importante mantener los basureros con sus tapas para evitar que se cuelen insectos y roedores y tener que llegar a una fumigación obligatoria.
• Tener mosquiteras en las ventanas. Así evitaremos los molestos zancudos u otros insectos y no nos restringirá la necesaria ventilación diaria de las habitaciones.
• Asear a las mascotas. Si tenemos animales de compañía en casa, es indispensable ser cuidadoso en la higiene de estos y evitar que se llenen de pulgas o garrapatas que puedan afectar la salud de la familia.
• Sellar los conductos de ventilación y agujeros. Así evitaremos que entren al interior de la vivienda insectos, roedores o hasta palomas.
• Aplicar productos químicos de venta libre, comprados en supermercados o tiendas, ya que poseen bajo nivel tóxico y no afectan la salud familiar o de las mascotas.
Si estos sencillos pasos no son suficientes para controlar una plaga se hace necesario contratar los servicios de una empresa de fumigación profesional (se recomienda por lo menos hacerlo una vez al año), la cual usará productos más potentes y específicos (y a la vez más perjudiciales para la salud) pero sabrá tomar medidas de prevención y cuidado para evitar los riesgos que conllevan para quienes habitan el lugar.