Aviación civil se cuadra con la operación vacunas 2021
Federación Aérea de Chile puso a disposición a los 2.000 pilotos asociados a los 70 clubes aéreos del país, así como las más de 400 aeronaves capaces de llegar a las 340 pistas de aterrizaje, para trasladar los productos a las localidades más apartadas del territorio.
Miles de personas participan en el gigantesco desafío logístico que implica vacunar contra el covid-19 al grueso de la población crítica durante el primer trimestre, y al grueso de la población objetivo del país en el primer semestre, nada menos que 5 y 15 millones de habitantes respectivamente.
Los pilotos civiles están entre quienes se cuadraron con la operación vacunas, a través de una alianza entre el Ministerio de Salud, el Ministerio de Transporte y la Federación Aérea de Chile (Fedach) y sus clubes asociados, lo que ha permitido llegar en forma rápida y segura con la valiosa y esperada carga a las localidades más apartadas del territorio nacional.
Setenta clubes aéreos emplazados entre Arica y Punta Arenas que reúnen a unos 2.000 pilotos civiles en todo el país representan un activo fundamental para grandes tareas contrarreloj como la vacunación masiva, y así lo entiende la federación, que está inserta en la unidad de Logística Aeroportuaria del Ministerio de Transportes.
"Nosotros tomamos contacto con el Ministerio de Salud y pusimos nuestra capacidad a disposición, los pilotos y más de 400 aeronaves de clubes o de pilotos socios de ellos, para colaborar en el programa de vacunación, porque nuestra vocación es la ayuda a la comunidad", con los aviones que les permiten llegar a las más de 340 pistas de aterrizaje que existen en el país, señala el presidente de la Fedach, Mauricio Malbec.
Comenta que aun cuando gran parte de las vacunas se trasladan actualmente en camiones, "hay muchas zonas de Chile en las cuales el acceso es muy difícil y muy lento, lo que es complejo sobre todo para la vacuna Pfizer, que requiere un resguardo muy riguroso de temperatura, entonces nosotros somos muy útiles en trasladar, en especial esa vacuna; las otras también las transportamos, pero a lugares donde no llega el transporte terrestre".
Así, por ejemplo, las vacunas llegan en avión comercial al aeropuerto de Balmaceda, en Aysén. Y desde allí los aviones de los clubes aéreos de Coyhaique y Aysén las han llevado "a los poblados más pequeños, a las islas, y todo muy rápido. En un día despachamos a seis lugares distintos. También hemos ido dos veces a Juan Fernández, ahí el apoyo ha sido de la línea ATA con la que tenemos una estrecha relación como federación porque su dueño es asociado nuestro como piloto civil y él dio todas las facilidades para llevar las vacunas sin costo al archipiélago".
Los aviones de la Fedach han distribuido los productos biológicos en el norte, en las regiones de Valparaíso, O'Higgins, del Maule, Biobío y en la Patagonia. "Lo más potente es en Aysén porque están más alejados y con difícil conectividad. Estamos súper contentos del apoyo que hemos podido dar y eso nos motiva porque nuestro lema es 'Volando con sentido', de modo que para nosotros -que nos definimos en forma coloquial como los bomberos del aire- es una gran satisfacción", resume Malbec.
Una colaboración efectiva y silenciosa
Uno de los clubes aéreos presentes en ese esfuerzo logístico es el de Talca. "En el caso de la Región del Maule, tuvimos el honor de trasladar las primeras vacunas del laboratorio Pfizer para Talca, Linares y Curicó", dice su presidente desde hace 15 años, Nathán El Moro, padre de dos aviadores, uno de los cuales pilotó la aeronave que cumplió esa misión.
Piloto desde hace 27 años, durante los cuales le ha tocado transportar de todo en emergencias de la magnitud del terremoto y tsunami de 2010, así como participar en las más diversas operaciones de búsqueda y evacuación de personas, dice que "somos una pista importante en la zona central, iluminada, con aproximación instrumental, y hacemos un aporte relevante a la región en todo lo que es el traslado de órganos y de enfermos", poniendo a disposición su infraestructura y apoyo.
Ejemplifica con el traslado de órganos, que parte con el aviso telefónico, y si es de noche implica que, como el club no tiene empleados, uno o dos directores se tengan que levantar a encender las luces para que el avión pueda aterrizar. En el vuelo viajan los médicos que apenas tocan tierra son llevados en ambulancia al hospital donde extraen el órgano donado y se lo llevan al lugar donde se efectuará el trasplante. Si el donante es múltiple, puede haber tres o cuatro vuelos con los especialistas correspondientes durante toda la noche, para lo cual se requiere la presencia de representantes de la institución responsable de la pista.
La recompensa es la satisfacción de ayudar, sobre todo cuando hay traslado de personas heridas o enfermas de gravedad y también se hace necesario contener a la familia, agrega El Moro, revelando que la disponibilidad de los pilotos y los clubes aéreos no se agota en las vacunas.
Apoyo en salud y al combate de incendios
Lo mismo es válido para el Club Aéreo de Valparaíso y Viña del Mar (CAVV), cuyo aeródromo de Rodelillo se halla en una ubicación estratégica, en zona no inundable y equidistante de los hospitales Van Buren y Gustavo Fricke para efectos de traslado de órganos, "que
la ministra gloria hutt recibe las vacunas en el aeródromo de talca. a la izq. el titular del club aéreo, nathán el moro Hendriksen, junto a su hijo que las trasladó, nathán el moro villagra.
Rosa Zamora Cabrera
rosa.zamora@mercurio valpo.cl