Correo
Contribuciones
A contar de enero de este año entró en vigencia el reavalúo de las propiedades, proceso en el que se actualizan los valores fiscales de éstas y que tiene una clara incidencia en las contribuciones, es decir, en los impuestos que deben pagar quienes sean propietarios de bienes raíces de carácter agrícola, como terrenos para cultivo; o no agrícola, como casas, departamentos, estacionamientos y bodegas. El que no paga podría perder su propiedad.
Las contribuciones son un aporte al desarrollo de las comunas y al bienestar de sus habitantes. Sin embargo, el reavalúo de las propiedades ha traído como consecuencia el aumento del impuesto, lo que, sin duda, afectará significativamente el bolsillo y capacidad de pago de muchos propietarios que deben sumar al pago de sus créditos hipotecarios, las contribuciones.
Es paradójico y contradictorio pensar que el impuesto territorial busca el bienestar de los habitantes, cuando en estos tiempos de pandemia aumentar este impuesto no está, precisamente, en esa línea. Dada la crisis sanitaria, vale preguntar si era necesario este aumento o dónde está el bienestar de los habitantes. Habría sido importante un apoyo gubernamental de comprensión y contención a una parte de la población, congelando los reavalúos en este año tan particular, o definitivamente, mantener los valores de años anteriores.
Si bien a un grupo de adultos mayores se ha eximido del pago de contribuciones, otra parte de la población, especialmente la clase media, ausente en las ayudas, sigue siendo golpeada e incomprendida con este reavalúo.
Guillermo Fuentes Contreras Director carrera Contador Auditor, Universidad Central de Chile
Tercer retiro y beneficiados
El retiro del tercer 10% nos brinda un muy buen ejemplo de una mala política pública, pero, además, nos permite ejemplificar lo importante del diseño con una lógica clara y bien pensada.
Retirar fondos, en teoría, busca ayudar a las familias de menores recursos que han sido afectadas por la pandemia, lo que tiene una intención implícita de focalizar recursos. No obstante, la implementación será universal, aun cuando un gran porcentaje del grupo anterior ya consumió todos sus fondos en retiros previos, de tal modo que los mayores beneficiados no serán aquellos a los que se piensa ayudar.
Las políticas públicas requieren de un marco que sea lógico para que sean efectivas, lo cual, claramente, no se cumple si se busca ayudar a un grupo que no terminará recibiendo los beneficios esperados. La distinción entre focalizar y universalidad es importante, pero más aún es hacerlo bien y no a través de acciones demagógicas sin lógicas claras.
Ignacio Aravena Colaborador Fundación Piensa y Ms. Urban Planning, NYU
Cotización adicional
Cerca de US$ 35.000 millones han sido rescatados por más de 10 millones de personas desde sus fondos de pensiones, lo cual, sin lugar a dudas, debilita las pensiones futuras, pero, por otro lado, fortalece nuestro sistema privado de pensiones.
Hoy es impensado tocar los fondos previsionales existentes y, por lo mismo, los esfuerzos de la oposición son hacia la cotización adicional, la cual piden vaya íntegramente a un fondo común, desconociendo las encuestas que sostienen que debe ir directo a las cuentas individuales.
La situación es compleja para el Gobierno, pues los estragos económicos de esta segunda gran ola están afectando el bolsillo de todos los chilenos.
Un tercer retiro es un tercer espaldarazo a nuestro sistema previsional y se debe capitalizar dicha popularidad, por ejemplo, dirigiendo el 6% de cotización adicional íntegramente a la cuenta individual del trabajador, para compensar los efectos en las futuras pensiones.
Eduardo Jerez Sanhueza
Salud mental
Otra pandemia, de la cual poco se habla, es aquella que afecta a la salud mental.
En una encuesta realizada por Ipsos en 30 países en relación a la salud mental y emocional de sus habitantes a un año de la pandemia, Chile figura como el segundo país más afectado de los sondeados, solo superado por Turquía, con peor salud mental durante esta crisis sanitaria. Un 56% de los encuestados en nuestro país indicó que efectivamente su salud mental y emocional empeoró.
Hoy, con el 90% de la población confinada, si no se toman las medidas preventivas indicadas, podría seguir empeorando esta situación.
Hay que revisar lo que se está haciendo, lo esperado y sus resultados, contrastarlos y tomar decisiones basadas en evidencia, si se sigue o no con estos planes de prevención que se indican y recalcan a diario.
No obstante, en vista de los resultados, da la impresión de que estos no avanzan.
Herman Durán Urra Fundación para el Progreso