Correo
Acusación
Escribo estas líneas con la indignación que me origina el haber tomado conocimiento de que la Comisión Chilena de DD.HH. ha denunciado al Presidente Piñera ante la Corte Penal Internacional por "su participación en la comisión de delitos de lesa humanidad". Ante tal infundada acusación, espontáneamente me nace denunciar y protestar.
En efecto, más allá del juicio político que nos merezca la gestión del actual Gobierno, es público y notorio el especial interés que el Presidente ha puesto por la vigencia y preservación de dichos derechos, incluso en los momentos más álgidos del estallido delictual y revolucionario que se manifiesta en Chile desde octubre del año 2019, por lo que esta acusación carece de todo fundamento y deja al descubierto la maniobra política que encierra.
Desde otra perspectiva, me pregunto: ¿hasta cuándo los chilenos tendremos que aceptar el actuar de organismos ideologizados e instrumentales de la izquierda revolucionaria como son el Instituto Nacional de Derechos Humanos, la Comisión Chilena de Derechos Humanos y variadas organizaciones nacionales e internacionales que levantan una y otra vez el noble tema de los derechos humanos en una interesada instrumentalización en beneficio de sus propios intereses ideológicos y como herramienta de amenaza para impedir la actuación legítima de todos los que puedan oponerse a la violencia demencial que desatan o avalan?
Soy un simple ciudadano, pero no importa; levanto mi voz en defensa del Presidente y su Gobierno y para protestar contra los acusadores: son ellos los verdaderos ofensores de los derechos humanos.
Francisco Bartolucci Johnston Abogado
Propiedad de la cotización
El tercer retiro previsional ya es una realidad y pronto veremos cómo millones de afiliados nuevamente harán uso de su ahorro previsional. A la fecha, los dos primeros retiros han transferido más de US$ 37.000 millones a los afiliados y se espera que con el tercer retiro se superen los US$ 50.000 millones.
Los retiros previsionales no son ni una victoria ni una derrota para nadie, son solo mayor liquidez de ahorros previsionales a costa de futuras pensiones. Lo que está sucediendo es que estamos pasando desde un sistema previsional a uno mixto entre previsión y de ahorro, puesto que seguirán los retiros previsionales por uno u otro argumento debatible.
Lo que sí se fortalece es el espíritu de propiedad de la cotización previsional y, por lo mismo, los altos porcentajes de aprobación de que cualquier aumento de cotización vaya íntegramente al fondo del trabajador, pues si va a una distribución de reparto, el ahorro individual a retirar no existe.
Eduardo Jerez Sanhueza
Encuesta
La reciente encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) ratificó que la diputada Pamela Jiles es la figura mejor evaluada, con un 54% de evaluación positiva versus un 28% negativa.
Lo que llama la atención de este fenómeno, propio de contextos sociales polarizados y de una profunda crisis, es que Jiles se ha posicionado a costa de los ahorros previsionales de las chilenas y chilenos, dejando a millones de personas sin fondos para sus futuras jubilaciones y sin soluciones que les permitan recuperar lo gastado. Pero, además, lo hace denostando a quien se le cruce por delante e instrumentalizando (a su favor) el malestar social.
No hay ideas, no hay propuestas y menos soluciones al contexto país, solo el uso de la rabia ajena para consolidar un liderazgo artificial, representando un riesgo para nuestra democracia y estabilidad institucional. Sin embargo, la última palabra aún no está dicha: serán las personas quienes, a través de su voto, podrán ratificar este favoritismo surrealista o poner la necesaria sensatez en las elecciones.
Rodrigo Durán Guzmán
La precariedad del artista
Este 1 de mayo se conmemoró, en todo el mundo, el Día del Trabajo. Este significativo día nos sorprende, nuevamente, en medio de la pandemia por covid-19, crisis sanitaria que ha golpeado especialmente a creadores, artistas y trabajadores del ámbito del arte y la cultura.
En Chile, desde hace décadas, quienes trabajan en el mundo del arte se vienen enfrentando a condiciones laborales precarizadas. Con la crisis sanitaria y, por ende, económica, esta situación de precariedad se agudizó, gatillando el cierre de teatros, salas de exposiciones y centros culturales.
En unas semanas nuestro país iniciará un proceso político-histórico con la elección de los convencionales constituyentes. El proceso constituyente que dará vida a una nueva Constitución para Chile, tiene el enorme desafío y deber de reposicionar a la cultura, el arte y el patrimonio en el lugar que se merecen y no solo como una actividad económica prioritaria, sino como un área de desarrollo integral fundamental para la vida de los ciudadanos y las ciudadanas de este país, de tal manera de avanzar a convertirnos en una nación más íntegra, humanista y verdaderamente desarrollada.
José Albuccó Académico de la Universidad Católica Silva Henríquez, creador del blog Patrimonio y Arte