Biden subraya a presidente palestino Abas "la necesidad de que Hamás cese" ataques a Israel
ESCALADA. Durante la última jornada, Israel bombardeó un edificio donde operaba prensa internacional en Gaza, mientras que las milicias palestinas lanzaron proyectiles a Tel Aviv y cercanías. Jefe de la ONU "consternado" por muerte de familia completa.
Israel y Gaza no cedieron en la sexta jornada de la actual escalada bélica, que incluyó bombardeos israelíes que derribaron un edificio de medios de comunicación internacionales, mientras que el presidente de EE.UU., Joe Biden, llamó a su homólogo palestino, Mahmud Abás, y le comunicó "la necesidad de que Hamás cese el lanzamiento de cohetes a Israel".
El diálogo con Abás fue el primero desde que Biden asumió el cargo y se produjo mientras un enviado estadounidense intenta mediar para conseguir un alto el fuego.
Según la Casa Blanca, Biden además "informó a Abás sobre los esfuerzos diplomáticos de EE.UU. en el conflicto actual. El mandatario estadounidense remarcó "su apoyo a los pasos para que la gente de Palestina disfrute de la dignidad, seguridad, libertad y oportunidades económicas que merecen".
Biden también se comunicó con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y le dio su "contundente respaldo al derecho de Israel a defenderse" de los cohetes lanzados por Hamás desde Gaza, aunque mostró su "preocupación por la seguridad de los periodistas" tras el bombardeo israelí al edificio donde tenía su sede la agencia estadounidense Associated Press (AP).
Ataque a la prensa
Las llamadas de Biden ocurrieron ayer después de que Israel derribó una torre de 14 pisos en Gaza, que era sede de la agencia de noticias estadounidense AP, la cadena de noticias Al Jazeera y otros medios internacionales.
Pese al intenso bombardeo, no hubo pérdidas humanas, porque los ocupantes recibieron una orden de desalojo antes del ataque. El derrumbe de la torre Al Jalaa fue transmitido en vivo por múltiples cadenas de televisión internacionales, incluso aquellas que hasta ayer transmitían desde allí.
Según el Ejército israelí, el edificio "contenía activos militares pertenecientes a la inteligencia militar" del movimiento islamista Hamás.
Un portavoz militar israelí agregó que Hamás escogió ese edifico para albergar sus activos precisamente debido a la presencia de medios de comunicación, que dijo son "utilizados como escudos humanos" del grupo.
Ataques a ciudades
Este ataque ocurrió poco después de que las milicias palestinas lanzaran una ráfaga de cohetes hacia Tel Aviv, la mayoría de los cuales fueron interceptados, aunque muchos llegaron a destino y uno de ellos impactó en la cercana ciudad de Ramat Gan, donde un hombre de 55 años murió y 13 personas resultaron heridas.
En esa ciudad, múltiples proyectiles cayeron en residencias cercanas a la playa, donde se registraron escenas con cientos de personas huyendo despavoridas mientras cohetes impactaban en las cercanías.
Tras ese ataque, Hamás advirtió a los habitantes de Tel Aviv que desalojaran la ciudad y muchos de ellos recurrieron a búnkeres. Una hora después, se registró una nueva ráfaga de cohetes que impactaron en carreteras e intentaron llegar nuevamente a zonas residenciales y otras ciudades israelíes, pero el sistema antimisiles los detuvo en su mayoría.
Caos y violencia
En el sexto día de escalada bélica en la zona hubo además varios bombardeos israelíes sobre "objetivos militares de Hamás". Sin embargo, en uno de estos bombardeos, sobre el campo de al-Shati, murieron diez civiles palestinos y miembros de una misma familia.
El secretario general de la ONU, António Guterres, se declaró "consternado" por este hecho y por el creciente número de víctimas civiles en el conflicto, dijo su portavoz, Stéphane Dujarric.
El Consejo de Seguridad de la ONU convocó parahoy una reunión urgente para abordar los enfrentamientos.
Los numerosos ataques aéreos que llevó a cabo Israel elevaron la cantidad de muertos palestinos al menos a 145, entre ellos 41 niños, mientras que hay por lo menos 1.100 heridos en Gaza. Por su parte, Israel registró su décima muerte, mientras que los heridos por disparos desde la franja son más de 250.
Según el Ejército israelí, en total se han lanzado más de 2.800 proyectiles, de los cuales 400 cayeron en Gaza y 1.000 fueron interceptados Israel.
Israel: "No es el momento de un alto al fuego"
El vocero de la Cancillería de Israel, Lior Haiat, dijo que su Gobierno considera que "no es este el momento para un alto al fuego, mientras Israel se encuentre bajo un ataque terrorista". En una conferencia de prensa global y vía Zoom, agregó que "el final del conflicto será cuando Hamás deje de atacar a nuestra población y ya no pueda volver a atacarla". En la cita, donde se abordaron las tratativas diplomáticas para desescalar el conflicto y se evaluó la operación contra Hamás, llamada "Guardián de las Murallas", estuvieron también el vocero de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) Jonathan Cornicus, y el de la policía, Micky Rosenfeld.
2.800 proyectiles se han
145 lanzado desde el lunes, cuando escaló el conflicto entre Israel y Gaza.