"Soy partidario de retirar las querellas por Ley de Seguridad Interior y revisar el contexto del estallido"
No fue fácil, dada la situación pandémica, pero el diputado Gabriel Boric logró reunir las firmas para inscribir su candidatura a La Moneda y participar en las primarias legales. El debate televisivo de los precandidatos de la izquierda fue entre la carta del Frente Amplio y la del Partido Comunista, Daniel Jadue. Lejos de ser ríspido, mostraron muchos puntos en común, pero el legislador aprovechó de señalar algunas diferencias con su contendor. El abanderado del Frente Amplio dice que la suya es una candidatura competitiva.
-¿Quedó conforme con el debate antes de las primarias?
-Quedé conforme. Creo que fue un buen debate, que tal vez no cumplió con el deseo de, para las expectativas de algunos, meterse en el barro. Fue un debate fraterno, de exposición de ideas, donde también se marcaron algunas diferencias que para mí son importantes y en el cual demostramos tener un proyecto que es sólido, de futuro y que convoca al mundo que quiere transformaciones estructurales en Chile.
-¿Le habría gustado primarias más amplias? ¿Se arrepiente de no haber conformado una alianza con Unidad Constituyente?
-Siempre he señalado, lo he dicho públicamente, que me hubiese gustado que Paula Narváez fuera parte de estas primarias. Eso no se dio. Yo ya di vuelta la página y espero que podamos conversar más adelante con el Partido Socialista.
-A pesar que no fue un debate áspero con Jadue, es de suponer que no le da lo mismo quién gane.
-Pero por supuesto.
-Marcó, como dijo, algunas diferencias claras en algunos puntos. Por ejemplo, el papel de la ciencia al enfrentar la pandemia.
-Todo gobernante, a diferencia de lo que ha hecho Sebastián Piñera, por ejemplo, tiene que asumir que no se las sabe todas y, por lo tanto, en cuestiones tan complejas como el manejo de una pandemia tiene que gobernar escuchando más voces, especialmente las voces expertas y técnicas. En ese sentido, las recomendaciones de los mismos gremios científicos no han sido escuchadas y, por lo tanto, parte del mal manejo de la pandemia es responsabilidad también de este Gobierno en el sentido de no haber abierto las puertas y los oídos a las recomendaciones de los sectores que saben.
-Otra diferencia con Jadue es la condena a las violaciones a los derechos humanos en distintos países. ¿Hay que rechazarlas vengan de donde vengan?
-No tengo ninguna duda de eso. Mi postura siempre ha sido clara a lo largo del tiempo. Las violaciones a los derechos humanos no tienen ninguna justificación, no importa el gobierno que las cometa. Sea en Chile, Nicaragua o Venezuela, tenemos que ser muy claros y tener una sola posición al respecto, sin doble estándar.
-Esto suele decirse también de la violencia: rechazarla venga de donde venga. ¿Es su caso?
-¿Cuál es el contexto de esa pregunta?
-Es simplemente eso: así como se rechaza siempre la violación de los derechos humanos, se rechaza la violencia siempre, o no.
-Es que hay muchos tipos de violencia. Por supuesto que a mí no me gusta ni justifico ningún tipo de saqueo ni de ataques a comercios, tampoco justifico la tremenda violencia que significa la desigualdad en este país. Y por eso estamos justamente tratando de luchar para que ninguna de las dos tenga espacio.
-Mencionó los saqueos: ¿considera que los actos violentos, o al menos algunos de ellos, durante el estallido social por parte de manifestantes, deben ser tratados como delitos comunes?
-Yo soy partidario de retirar las querellas por Ley de Seguridad Interior del Estado y creo que por el contexto en el que se dio el estallido social, es necesario revisar por qué llegamos a ese momento para que no se vuelva a repetir. Me parece que hay una clara desproporción del uso de la cárcel en particular para con ciertas personas, por ejemplo, el profesor que destruyó un torniquete del Metro, quien estuvo meses en la cárcel y hoy día tiene una sentencia pendiente de años. Creo que si eso se hubiese producido en otro contexto, la sentencia hubiese sido diferente. Me parece que los daños, en particular contra la propiedad, hay que revisarlos.
-Respecto de las denuncias de violaciones de derechos humanos por instancias estatales durante el estallido, usted señaló que pretende perseguir la responsabilidad del Presidente Piñera.
-Lo que estamos diciendo es que a todos quienes sean responsables políticos o materiales de las violaciones de los derechos humanos, los vamos a perseguir con todas las instancias de la ley, siendo, por cierto, respetuosos de la autonomía de los tribunales, pero vamos a poner todos los antecedentes ante los organismos internacionales que correspondan para que no se consolide la impunidad en Chile. Vivimos un período de impunidad muy grande después de la dictadura y no queremos que vuelva a suceder algo similar después de las violaciones a los derechos humanos a partir del estallido social.
-Quizá la mayor diferencia con Jadue ha sido su defensa del Acuerdo por la Paz de 2019. ¿Lo considera un momento fundamental?
-Creo que fue un momento importante, dentro de muchos otros, que permitieron abrir el proceso constituyente para el pueblo de Chile. Me siento orgulloso de haber colaborado con un grano de arena para que eso haya sido posible. Estoy plenamente consciente de que nadie puede atribuirse la autoría de un proceso que es de todo el pueblo chileno, pero me parece que la actitud que tomó Daniel en esos días no fue constructiva.
-En su "manifiesto programático" señala como aspecto crucial apoyar la Convención Constitucional. ¿Tiene esperanza en ella?
-Tengo muchas esperanzas en el proceso constituyente. La participación del pueblo organizado va a ser importante en ese proceso porque la legitimidad del proceso constituyente no está solamente en los papeles, sino en que todos quienes quieran ser parte se sientan parte. Por eso es necesario también aumentar el presupuesto de participación de la Convención y respetar la autonomía de los convencionales, acompañando ese proceso con todas las instituciones que sean necesarias. Vamos a ser un Gobierno al servicio de la Convención Constitucional.
-Señala en su programa que hay aspectos transversales. ¿Qué entiende por perspectiva feminista y qué tan amplia puede ser?
-El feminismo nos ha enseñado que las problemáticas de género no son algo que se pueda tratar de manera aislada, sino que debemos incorporarlas a todas las políticas públicas. Por ejemplo, en materia de reactivación económica, si dejamos que solamente el mercado sea el que opere, la reactivación económica va a ir por áreas como la minería o la construcción, que emplean principalmente a hombres. Queremos potenciar y generar subsidios para la inclusión de la mujer, que permitan revertir esa situación, en áreas como la industria del turismo o la ciencia o la gastronomía. También vamos a crear un Plan Nacional de Cuidado que socialice, visibilice y valorice los trabajos que generalmente se le cargan a la mujer, como el cuidado de las personas en situación de discapacidad, adultos mayores, niños y niñas.
-Habla en su programa de una transformación económica y social y un nuevo modelo de desarrollo. ¿A qué se refiere?
-Eso es tremendamente importante. Hoy día la crisis climática, pese a que se dejó de hablar de ella en Chile, ha seguido avanzando. Nuestro país, por su borde costero, va a ser de los países más afectados por ella. Tenemos que avanzar hacia un modelo de desarrollo que sea sustentable con el medio ambiente y eso significa terminar con la lógica del desarrollo únicamente centrado en las industrias extractivas. Nosotros propusimos el "Programa de transporte doble cero", que significa avanzar para que el transporte público en las regiones y en Santiago tenga cero emisión de gases contaminantes y además tenga valor cero.
-En cuanto a descentralización, ¿qué planes tiene para regiones?
-Yo soy nacido y criado en la Región de Magallanes y he visto y vivido cómo el centralismo asfixiante termina limitando la capacidad de desarrollo del país. Las oportunidades muchas veces se terminan concentrando en el centro y se obliga, en particular a los jóvenes, a emigrar de las regiones. Queremos generar polos de desarrollo regionales mediante encadenamientos productivos que generen trabajo, conocimiento, transferencia tecnológica, hacia las regiones. Les vamos a entregar mayores facultades y competencias a los Gobernadores regionales, crear una Ley de Rentas Regionales, mejorar las competencias en materia de orden público y ordenamiento territorial. Y, por supuesto, mejorar la conectividad.
-Propone además un Sistema Universal de Salud: ¿qué significa, a grandes rasgos, tal sistema?
-Lo que significa es que terminemos con la discriminación que existe hoy día entre usuarios de isapres y Fonasa, que todos coticemos en un mismo fondo público que sea un seguro único que entregue prestaciones universales para que la calidad de la Salud a la que accedes no dependa de cuánta plata tienes.
-¿Cómo pretende financiar su programa?
-Nosotros tenemos un piso base del costo programático que es del orden de 5,5 puntos del PIB. Esto va a crecer un poco y lo que estamos proponiendo es, en un período de cuatro a ocho años, porque esto no se logra de la noche a la mañana, aumentar la recaudación entre 8 y 8,5 puntos. ¿Cómo se logra esto? Con un impuesto a los súper ricos permanente; disminuyendo la evasión y la elusión, con lo que calculamos que podemos aumentar la recaudación en el orden de 3,5 puntos del PIB, pero eso requiere una modernización del Servicio de Impuestos Internos que toma algo de tiempo; también revisando y mejorando los tramos del Impuesto Global Complementario para que sea más progresivo; incorporando algunos impuestos verdes que fomenten el desarrollo de industrias no contaminantes.
-¿Su contendor ideal si gana las primarias?
-Estoy dispuesto a enfrentarme con quien sea necesario. Sería muy bonito que las ideas de derecha no logren pasar a segunda vuelta y tener un enfrentamiento, por ejemplo, con Yasna Provoste. Pero eso lo definirá el pueblo de Chile.
"Me hubiese gustado que Paula Narváez fuera parte de estas primarias. Sin embargo, eso no se dio. Yo ya di vuelta la página y espero que podamos conversar también más adelante con el Partido Socialista".