las calles es un problema que lleva años y no se ha solucionado, solo parches. Hay poblaciones establecidas desde hace años y no cuentan con su título de dominio, lo que les impide postular a beneficios para mejoramiento de sus viviendas. La limpieza de quebradas también lleva tiempo planteándose y no hay respuesta, al igual que muchas solicitudes por exterminio de plagas de ratones. Esas son las prioridades, entre muchos otros puntos".

Rosa Arias, integrante de la Mesa Social de Viña del Mar, en el ámbito solidario: "Con el estallido social, me entró la necesidad de ayudar a otras personas. Por ejemplo, apoyamos al campamento La Bendición en Reñaca alto, que empezó en 2014 y no tiene gran ayuda. El camión que les lleva el agua es inconstante. Hace poco, por los feriados y la lluvia, no subió y estuvieron más de una semana sin agua; en la Mesa Social hubo que juntar plata para comprar en bidones. También ayudamos a un grupo de mujeres que estacionan autos y que tienen un comedor solidario".

"A la nueva administración le pediría que cumpla con las promesas de nivelar los cerros con el centro para mejorar la vida de la gente, tanto en el agua que falta en los campamentos como en arreglar las calles, ya que hay partes donde no puede llegar locomoción. Yo tengo confianza en que la nueva alcaldesa va a cumplir con las promesas que hizo en su campaña, pienso que tiene la fuerza, la entereza y la inteligencia para hacerlo, porque Viña hasta el momento había sido mirada solamente para el turista y para el centro, y los cerros estaban totalmente desprotegidos. Espero que esta nueva era sea para mejorar los cerros. Es un capital inmenso de gente que necesita apoyo y van a surgir muchas cosas buenas de ahí".

Campamentos: vivienda, accesos y aseo

Carolina Rojas, presidenta del Comité Acogida 2001, uno de los 23 comités del Campamento Manuel Bustos, representa a 75 familias: "Como excandidata a concejal y como dirigenta social veo con buenos ojos la denominación Municipio de Cuidados pensando que esta nueva administración va a venir a proteger a los ciudadanos de Viña del Mar. Puntualmente mi solicitud es que se preocupe de la calidad de vida en los campamentos en general, en especial de los accesos, las calles, porque desde hace bastante tiempo la anterior administración dejó de hacerles mantención y el tránsito por ellas se torna muy peligroso, y ante una emergencia podemos lamentar pérdida de varias casas".

"También coordinar el retiro de basura, ya que no existe regularidad en el retiro del aseo domiciliario en los campamentos, y eso genera microbasurales y atochamiento en contenedores cercanos. Personalmente le pido que dentro de las tareas de los primeros cien días, sea una prioridad mejorar un poco la calidad de vida de la gente de los campamentos, partiendo por el arreglo de calles, y sobre todo fortalecer el trabajo con el Ministerio de la Vivienda para la construcción de viviendas sociales en Viña del Mar".

Katherine Riffo, dirigenta del campamento Felipe Camiroaga, representa a 950 familias y más de 4 mil personas: "Las prioridades son muchas, y una de las fundamentales, como la alcaldesa lo dijo, es que va a ser un gobierno comunal ciudadano y participativo, pero el tema prioritario es el de la vivienda. Antes de las elecciones le planteé el tema de la expropiación de los terrenos privados del campamento, ya que ella puede ayudar en conjunto con el Serviu para que esto pueda avanzar, y también obviamente el de las necesidades básicas y las mejoras en calidad de vida que se requieren".

"Por ejemplo, arreglar los accesos, que uno pueda hacer la gestión y no haya burocracia ni trabas para que la situación pueda mejorar. Que hagan una gestión más proactiva, que no haya que esperar a que pase una emergencia como la que tuvimos hace poco -un incendio en que murió calcinada una vecina- para que se ejecuten las soluciones. Que exista disposición para eso y para ir siempre avanzando, haciendo la pega como si fuera para ayer, porque eso se puede hacer…"

Problemas con permisos para comerciantes

Luis Rivera, presidente del sindicato Emprendedores Fe y Esperanza, Feria Caupolicán-Bazar: "Luego de un intento de entregar en comodato todo el terreno del parque a la feria hortofrutícola, a lo que tres dirigentes nos opusimos, porque el sector Bazar iba a quedar abandonado, el predio se dividió en dos partes. Una se entregó en comodato a la feria, y la otra a la municipalidad. Pero en octubre de 2018 nos congelaron los permisos porque se determinó que no podía cobrar plata por un terreno que no es suyo, sino de Bienes Nacionales, y los comerciantes de los bazares quedamos sin permisos".

"Después, por la pandemia, muchos que habían pagado techos y estructuras no fueron a trabajar y llegó gente de otras comunas que se empezó a tomar los puestos. Ahora recién hicieron empadronamiento del terreno y están pidiendo los documentos a las personas para darles los permisos".

"Cuando eso pase, vamos a exigir que no haya más ambulantes afuera de la feria, y para eso queremos seguridad, carabineros desde la 8 a las 15 horas, inspectores municipales en el sector de bazares para que controlen, un administrador de la feria, e instalar baños, que no tenemos. Necesitamos un buen cierre perimetral, iluminación, cámaras de seguridad y una enfermería para casos de emergencia, porque han ocurrido accidentes y también peleas por los puestos, ya que en este momento los puestos no son de nadie, porque nadie tiene permiso".

Fátima Jatib, dirigenta de la Agrupación de Comerciantes con Capacidades Diferentes de Calle Valparaíso: "Somos poco más de 20 socios que trabajamos entre la Plaza de Viña y la calle Quillota hace casi 30 años. Siempre nos hemos reunido con las autoridades comunales y hemos presentado proyectos para nuestra actividad. Con la administración anterior también lo hicimos, pero desarrollaron uno a la pinta de ellos, que son los carros azules donde trabajamos, que prácticamente nos obligaron a aceptar porque lo tomábamos o lo dejábamos. El problema es que antes de los carros nosotros pagábamos por bodega 20 mil pesos mensuales, y ahora nos cuesta entre $80 mil y $100 mil mensuales, más $2 mil diarios para que los saquen y los guarden. Siempre se habló de que la municipalidad nos iba a apoyar para buscar un lugar donde guardarlos para no tener que pagar, pero no se concretó".

"Con la pandemia hemos trabajado muy poco y casi todos estamos adeudando el permiso municipal. Después de mucha lucha y con el apoyo de algunos concejales, logramos que nos condonaran de marzo a octubre de 2020. Pero desde octubre muchos no hemos podido pagar, de modo que estamos pidiendo que se nos condone aunque sea parcialmente, toda ayuda es buena. Tenemos harta confianza en que la alcaldesa nueva pueda cambiar las cosas con respecto a nosotros. Sobre todo que nos ayude con el tema de los carros, porque discapacitados y ciegos tenemos que armarlos…si va tipo 9 de la mañana va a ver a los ciegos armando sus módulos".

Equilibrio barrio residencial, turismo y comercio

María Adela Baeza, presidenta de la Junta de Vecinos Casino: "Estamos llenos de esperanza, ya que para nuestra nueva alcaldesa la participación ciudadana es un pilar fundamental, el concepto de Municipio de Cuidados nos interpreta profundamente, pues necesitamos autoridades que nos cuiden".

"Desde hace años venimos haciendo un trabajo horizontal con otras organizaciones sociales. Es así que sabemos que hay necesidades urgentes en todos los barrios y territorios de nuestra ciudad muchas de ellas las compartimos todos, y la acaldesa lo sabe, como seguridad pública, narcotráfico, desastrosas veredas y calles, falta de acceso universal a todos los espacios públicos, luminarias, exceso de velocidad vehicular, ciclovías, descuido de áreas verdes y patrimoniales, y la basura en todos lados".

"¿Qué esperamos para nuestro barrio? La prioridad es que la nueva administración cumpla con el dictamen de la Corte de Apelaciones de agosto 2020, respecto a nuestro recurso de protección por las graves irregularidades, que padecemos los residentes: contaminación acústica, sanitaria y lumínica, responsables de que la vida de nuestros vecinos y vecinas sea una pesadilla permanente. El dictamen de la Corte se resume en una correcta fiscalización con consecuencias que producen cambios reales y terminan con las violaciones a los derechos ciudadanos debido a la falta de cumplimiento de leyes y ordenanzas municipales pertinentes. Creemos que eso no es demasiado esperar de una administración honesta e incorruptible, que quiere cuidar a sus residentes".

"Viña fue durante años la ciudad turística por excelencia de Chile, sin embargo, hoy es una ciudad desgastada, no es turística ni cultural. Nuestro barrio residencial e histórico fue transformado en un barrio mixto sin consulta ciudadana en el 2002. Sabemos que muchos viñamarinos viven del comercio y de la gastronomía, pero hay muchas ciudades turísticas reconocidas en el mundo, que cuidan un equilibrio sano entre los derechos y necesidades de sus residentes junto al turismo y comercio. Saben que un turismo sustentable necesita también de residentes que dan vida a sus barrios y espacios públicos y los cuidan. Este equilibrio hace años se perdió en desmedro de los residentes y su recuperación nunca fue una meta para la administración saliente. Si los residentes abandonan el barrio, llegan el narcotráfico, la prostitución callejera y la criminalidad en todas sus otras formas. Este proceso ya comenzó en nuestro barrio, pero todavía podría ser reversible. No tenemos tiempo para esperar el próximo Plan Regulador y confiamos en que la alcaldesa Macarena nos devolverá el derecho a una vida digna". 2

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