Mayores libertades sanitarias regionales
El avance de Valparaíso a fase de Preparación y el acortamiento del toque de queda son buenas noticias, pero no hay que confiarse. La libertad, se entiende, acarrea grandes responsabilidades y es tarea no solo de las autoridades hacer que se cumplan, sino que de la propia ciudadanía, aun cuando se entiende el cansancio.
Como era de esperarse, producto del buen comportamiento de las cifras en las últimas semanas, el Ministerio de Salud decidió finalmente ordenar el avance a fase 3 de Preparación para las comunas de Casablanca, Zapallar, Cabildo y Valparaíso, medida largamente demandada por sus autoridades (el alcalde Jorge Sharp dijo la semana pasada no comprender la lógica del Gobierno), el tan golpeado comercio y, cómo no, sus habitantes.
Simultáneamente, el destacado avance del proceso de vacunación, que ya consiguió la inoculación completa del 80% de la población regional, acortará también el toque de queda, el cual desde hoy regirá desde las 00.00 horas y no desde las 22.00, como estábamos acostumbrados, para finalizar a las 5.00 de la madrugada.
El propio Sharp, interpretando el sentir mayoritario de sus conciudadanos, definió la medida como "una ventana para oxigenar el comercio de Valparaíso", en coincidencia con el inicio de las vacaciones de invierno y el reciente feriado largo, que mostró un fuerte retorno del turismo en otras localidades, tales como Viña del Mar y Olmué.
En la práctica, salvo por los aforos de los locales establecidos, las calles de la Ciudad Puerto no han estado precisamente en cuarentena durante los últimos meses, con vistosas aglomeraciones junto al comercio ambulante, las ferias hortofrutícolas e incluso publicitados "carretes" en el clásico sector de la subida Cumming y la plaza Aníbal Pinto.
Por lo mismo, suena mesurado hacer un llamado a la prudencia, por cuanto -tal como también dice el alcalde- el nuevo toque de queda relajará la vida nocturna, creando "un efecto concreto en un potente motor económico de la ciudad, cual es la bohemia porteña; el comercio nocturno va a despertar, las noches van a volver a ser poco a poco lo que eran en Valparaíso".
Toda reactivación es positiva. La gran pregunta es si se fiscalizará el efectivo cumplimiento de esta nueva medida para no tener que lamentar en el futuro cercano alzas de contagios o retrocesos en el plan Paso a Paso.
La libertad, se entiende, acarrea grandes responsabilidades y es tarea no solo de las autoridades hacer que se cumplan, sino que de la propia ciudadanía, aun cuando se entiende el hastío y el cansancio provocado por esta larga e insufrible pandemia que ha cercenado casi un año y medio de nuestras vidas.
Deberemos acostumbrarnos a las mascarillas, el lavado frecuente de manos y el distanciamiento social, tres factores que Salud jamás ha dicho que dejemos de cumplir. Por el contrario, la única forma segura de convivencia sigue siendo la suma de ello con las vacunas respectivas.