"No se puede dialogar con metralletas sobre la mesa"
Muestra su preocupación respecto de la escalada de violencia en la macrozona sur y hace énfasis en la deposición de las armas antes de ponerse a conversar. "Tolerar la existencia de la comisión de delitos es intolerable en un Estado de Derecho", subraya.
En las últimas semanas, los hechos de violencia se han tomado la agenda en la macrozona sur, específicamente en La Araucanía, en especial luego de la muerte del integrante de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Pablo Marchant, en un enfrentamiento con Carabineros ocurrido el viernes 7, en las cercanías de una forestal. Lo anterior suscitó no solo una escalada de ataques en la zona, sino además un inédito comunicado de la agrupación, que se adjudicó varios de estos hechos y declaró una "guerra directa a las forestales".
El exministro de las carteras de Defensa e Interior, Jorge Burgos Varela (DC), es claro en señalar que "no se puede dialogar con alguien tenga la metralleta encima de la mesa, porque es muy complejo y tiene muy poco de diálogo eso. Se puede dialogar con todo el mundo, en determinadas circunstancias, aunque hayan estado poco tiempo antes con el uso de la armas, en la medida de que tú lo depones incondicionalmente. Eso ha ocurrido en muchas partes del mundo y se han logrado acuerdos con grupos que estuvieron en la práctica del delito, incluso del terrorismo".
Asimismo, el exdiputado por las comunas de Ñuñoa y Providencia fustiga los llamados a desmilitarizar La Araucanía, asegurando este tipo de peticiones "pareciera presumir que la seguridad pública en la macrozona está en manos de las Fuerzas Armadas y eso no es así, eso es instalar un hecho falso. La situación desde el punto de vista del régimen de seguridad es la misma que existe en el resto del país, las FF.AA. excepcionalmente están en la calle producto del Estado de Catástrofe generalizado que se ha establecido en el país, primero por decisión unilateral del Presidente, porque tenía facultades para eso y después, las dos últimas veces, con el aval del Congreso. (…) ¿Qué es lo que quieren? ¿Que se retiren las FF.AA. de la macrozona sur?".
Convencidos de ser nuevo poder
- En diálogo con radio Duna, usted señaló que se debate "entre el optimismo y los temores", respecto de la Convención Constitucional, mostrando preocupación por la idea de "refundar" la República. ¿Sigue en ese limbo o se inclina por una de las dos posturas?
- No es limbo, es una preocupación real, porque pasan los días y veo que la Convención está dedicada a temas que pueden ser muy importantes, pero que no tienen que ver con el encargo que se les dio, que es ni más ni más que proponerle al país una nueva Constitución y para eso tienen un plazo muy acotado. Uno ve que se acercan a las tres semanas y siguen en discusiones procedimentales, provisorias, en largas discusiones sobre cómo se pronuncian sobre temas coyunturales que no estaban en su competencia y cuyas declaraciones van a ser meras declaraciones, porque no son oponibles. Hay muchos convencionales que están convencidos que son el nuevo poder del Estado, que tienen capacidad de tomar decisiones y que esas decisiones sean oponibles a todos los chilenos, a los otros poderes del Estado, que produzcan efectos jurídicos y eso no es así.
- En particular, ¿cuál es su análisis respecto del grupo denominado "Vocería de los Pueblos", que en los días previos a la instalación de la Convención presentaron una declaratoria en que instan a no subordinarse al Acuerdo de Paz y entre cuyos firmantes figura la presidenta de la Convención?
- Ellos fueron elegidos democráticamente, tuvieron una votación muy importante, lograron instalar un número no despreciable de mujeres y hombres convencionales, tienen una visión de Chile que no es la que tengo yo y probablemente la mayoría de este país, pero ellos son los que establecen como tema central la refundación del país, que es una mala idea desde el punto de vista del futuro del país. Pero bueno, están ahí, hay que respetar sus posiciones, lo que sí a mí me parece que llevan la bandera de las cosas que no puede hacer la Convención y quieren hacer. O sea, que una delegación diga que somos soberanos y las reglas no nos obligan, esa es una declaración profundamente antidemocrática e inaceptable.