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compartido y propio que una nueva Constitución, donde nos reconocemos con nuestras diferencias como parte de algo que es de todos. Por lo mismo, en nada se opone la palabra República al presente o futuro reconocimiento de los diferentes orígenes culturales que dan lugar a la Nación o al Estado. Por el contrario, la República garantiza que esa diversidad pueda expresarse y reconocerse de manera armónica e integral. Con todo, es necesario precisar que estamos frente a una discusión de procedimientos y no de fondo, ya que recordemos que uno de los límites para elaborar nuestra nueva Carta Fundamental, expresada en el acuerdo del 15 de noviembre, es justamente, entre otros, el que Chile no puede dejar de ser una República y una democracia.
- ¿Chile es un Estado plurinacional, en que "los pueblos están hablando en este momento de refundar la historia con muchas banderas y derechos", como dice la convencional Rosa Catrileo, o es un Estado multicultural con otros reconocimientos?
- La plurinacionalidad o multiculturalidad del Estado será un tema que definir en nuestra nueva Constitución. De una y otra opción se siguen consecuencias diferentes, las que podrían devenir a ciertos grados de autonomía e incluso con independencia territorial. Los países que han tenido este debate devinieron en diferentes derroteros, algunos virtuosos y otros muy dolorosos. Reconozco la deuda y la carga simbólica de esta discusión, como la necesidad de reconocimiento y reparación, pero no estoy seguro de que nuestros actuales convencionales tengan la claridad y plena conciencia sobre las consecuencias de tomar una u otra opción.
- ¿Qué opina del voto político de la Comisión de Derechos Humanos de la Convención que acordó dejar al almirante Jorge Arancibia fuera de las audiencias públicas por "haber celebrado públicamente el golpe de estado cívico- militar y negado las sistemáticas violaciones a los derechos humanos cometidas en ese período", tras lo cual se llegó a una fórmula intermedia?
- Los derechos -en sentido fuerte como decía Dworkin- suponen respetarlos y defenderlos con independencia de nuestro desacuerdo sobre las razones que subyacen a su ejercicio. No tiene sentido que hablemos de derechos, si su reconocimiento está sujeto al acuerdo con la conducta que supuestamente los protege, confundiendo la validez con lo valioso. La designación de Arancibia en esa comisión fue un error, un despropósito e incluso una provocación que a muchos genera gran dolor e irritación; amén de sus declaraciones previas que sólo revelan la indolencia y frivolidad para un momento muy doloroso de nuestra historia. Sin embargo, se trata de un miembro de la Convección elegido mediante sufragio universal, con los mismos derechos y deberes que les asisten a los otros 154 miembros de esa institución, por lo que su censura en dicha comisión me parece un acto ilegal, arbitrario y poco democrático.
- "El tema de fondo es que todos los que están allí es porque fueron elegidos y no pueden sus pares decirles usted no tiene derecho a estar presente en tal o cual reunión. Eso no es propio de un sistema democrático, así de simple", sostuvo al respecto el expresidente Lagos. ¿Está de acuerdo?
- No sólo estoy de acuerdo con el expresidente Lagos, sino además creo que quienes censuraron a Arancibia cometieron un error estratégico, pues su decisión pudiera afectar la legitimidad de la Convención Constitucional. En efecto, hoy la derecha no sólo puede recurrir a la Corte Suprema con los 39 votos que requiere para accionar el reclamo reglamentario, con altas posibilidades de éxito, sino incluso podría ventilar esta disputa en jurisdicción internacional, generándose una innecesaria y evitable disputa sobre el respeto de la diversidad y las reglas del juego democrático. Y resulta más incomprensible que esa censura se haya producido días después de que el propio Arancibia había anunciado que dejaría esa comisión más adelante. Entonces, por razones tanto de fondo como de forma, se cometió un grave error.
- Después de sus primeras semanas de funcionamiento ¿cómo cree que lo ha hecho la Convención Constitucional y cuáles son sus expectativas respecto de su labor?
- Nada de lo ocurrido me sorprende, está dentro de mis expectativas y continúo optimista. Lo reflejo con una imagen. Recordemos el día de la instalación de la Convención el 4 de julio y multipliquemos cada hora por un mes; para así, más o menos, predecir la trayectoria y resultado de esta Convención después de un año. Al principio, fue todo muy caótico, emocional, subjetivo, lleno de informaciones contradictorias, desconfianzas, trifulcas e insultos. Sin embargo, con el paso de las horas, las cosas se fueron aquilatando y ordenando, especialmente por el peso de la responsabilidad que significa la tarea y la importancia de desarrollarla con éxito. Pasaron más horas y todo fluyó de manera institucional, y muchos de los que habían cuestionado el proceso y la autoridad -representados en la abogada del Servel- terminaron aplaudiéndola de pie. Finalmente se culminó votando de forma democrática y republicana (en un cáliz quiero recordar), para elegir a sus principales autoridades. Entonces, recién llevamos una hora y media de ese primer día y ya de a poco este proceso toma forma. 2