La semana del caso Jorge Arancibia y los dos tercios
Acuerdo para que vetado exjefe naval participe de la Comisión de DD.HH. fue seguido de polémica por primer respaldo al quórum para la aprobación de normas.
Una fuerte polémica se vivió en los últimos días de la semana pasada y que terminó impactando el lunes en la Convención Constitucional. Todo se gatilló el viernes, cuando la Comisión de Derechos Humanos aprobó un "voto político" para excluir de las audiencias públicas al excomandante en Jefe de la Armada, Jorge Arancibia, debido a su pasado como edecán naval del dictador Augusto Pinochet. Una decisión que contó con 10 votos a favor, dos en contra y tres abstenciones y que se justificó, entre otras cosas, en que "desde el año 1973 a la fecha en reiteradas ocasiones el Convencional ha avalado y celebrado públicamente el Golpe de Estado cívico- militar y ha negado las sistemáticas violaciones a los derechos humanos cometidas en ese período".
Pero no fue el único, ya que también fueron excluidas varias agrupaciones (Fundación Jaime Guzmán, Acción Republicana, Cuide Chile y Confamilia) argumentando que "no serán recibidas en audiencia personas u organizaciones que a través de sus planteamientos, propuestas o discursos hayan difundido mensajes de odio o que puedan incitar a la violencia respecto de grupos vulnerables o históricamente excluido".
Arancibia, quien sostuvo en una entrevista con El Mercurio que no iba a renunciar y que adoptaría "las acciones legales y disciplinarias que permitan retomar el estado de derecho en los procesos constitucionales que estamos llevando adelante", recibió el respaldo no sólo del oficialismo, sino incluso de figuras de la centroizquierda. El expresidente Ricardo Lagos Escobar, en el programa Mesa Central de Canal 13, expresó que "todos los que están ahí (Comisión de DD.HH.) fueron elegidos. Ninguno de sus pares le puede decir que no puede estar ahí. No es propio de un sistema democrático".
La discusión escaló el 16, cuando en la mañana, representantes de Vamos por Chile salieron en defensa de Arancibia, oportunidad en que Rodrigo Álvarez (UDI) sostuvo que "vamos a analizar todos los recursos nacionales e internacionales que nos permitan revertir cualquier afectación a los derechos. Reitero el punto: ninguna comisión, ninguna mayoría, ni siquiera el pleno puede tomar decisiones que afecten los derechos que tiene un convencional constituyente para desarrollar su tarea".
Finalmente ese mismo día y tras un arduo y extenso debate, la instancia rechazó la propuesta que excluía a las organizaciones antes mencionadas. En el caso de Arancibia, quien participó de un acto de desagravio que organizó Renovación Nacional durante la noche, se acordó que se mantendría sin problemas en la subcomisión de Marco General, pero no asistiría a las audiencias de Verdad Histórica, donde estarían presentes víctimas o familiares de afectados por violaciones a los derechos humanos.
Dos tercios de la discordia
El miércoles, en las subcomisiones de Iniciativa y Norma y la de Organización y Estructura de la Convención Constitucional, pertenecientes a la Comisión de Reglamento, se aprobaron iniciativas clave para el funcionamiento del órgano en los meses venideros. Una de ellas dice relación con la rotación de la mesa directiva al cabo de seis meses de la instalación de la entidad encargada de redactar la nueva Constitución, con una nueva elección en caso de que la labor se extienda por tres meses más.
Pero sin duda la que generó más revuelo dice relación con que se mantendrían los dos tercios para la aprobación de las normas que serán parte de la próxima Carta Magna, ratificando de esta forma lo que se había firmado en el Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución, pese a la oposición que mostraron Bárbara Sepúlveda (PC), Alondra Carrillo (IND), Natividad Llanquileo (Pueblo Mapuche), Ingrid Villena y Daniel Bravo (Lista del Pueblo), quienes votaron en contra de la medida, que deberá ser ratificada por el Pleno.
Pero sin duda lo que más llamó la atención fue el respaldo que entregó el abogado Fernando Atria (Apruebo Dignidad), lo que generó ruido en los sectores de izquierda como fue el caso del convencional Marcos Barraza (PC), que en declaraciones recogidas por CNN Chile sostuvo que "somos muchos y muchas constituyentes que no nos sentimos cómodos, y más bien somos distantes y rechazamos una regla de dos tercios. Evidentemente, la votación del ayer (miércoles) muestra que hay algunos constituyentes que no tienen esa percepción respecto al papel del pueblo en este proceso".
Frente a los cuestionamientos, Atria dijo en una entrevista al citado medio que "los dos tercios están fijados por una regla que se le aplica a la Convención, y que no le corresponde a la Convención cambiarla. Que decidamos unilateralmente cambiar esa regla, no tiene efectos. Es una discusión que se ha dado y se va a seguir dando. La mayoría de las personas que critican a los dos tercios aceptan que para cambiar los dos tercios se requiere de una reforma constitucional tramitada en el Congreso. En ese sentido, si esa reforma se llevara adelante y el Congreso cambiara esa regla, por cierto que la norma de los dos tercios cambiaría".
Hasta el vicepresidente del órgano, Jaime Bassa (Apruebo Dignidad), tuvo que salir a calmar las aguas y en diálogo con radio Cooperativa desdramatizó la situación y defendió a su compañero de pacto: "Los 2/3 no son una quimera inalcanzable. Las fuerzas políticas detrás de los dos tercios están trabajando juntas. Por eso digo que hoy ese tema es innecesario y quizás responde a otra agenda política distinta a la agenda constituyente. (…) Hay grupos en la Constituyente, que son muy vociferantes, que amplifican artificialmente las 'polémicas constituyentes' a través de las redes sociales y tratan de presionar para que las mayorías, de las que no forman parte, decidan en una línea más parecida a la que ellos quisieran".
Convención en terreno
Esta semana también estuvo marcada por los primeros días en que la Comisión de Descentralización, Equidad y Justicia Territorial realizó sus sesiones en regiones. Todo comenzó el martes, cuando la instancia que lideran Cristina Dorador (Movimiento Independientes del Norte) y Adriana Ampuero (Lista del Pueblo) inició su trabajo en las dependencias de la Universidad de Tarapacá, ubicadas en Arica.
En dicha oportunidad, los constituyentes recibieron a un total de 16 movimientos de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta, las cuales entregaron sus propuestas respecto de cómo debiera resolver el órgano el tema de la descentralización. "Es un hito histórico porque es la primera vez que la Convención sesiona en los territorios, y porque marca la pauta del trabajo para las comisiones que se creen después del reglamento", sostuvo Dorador.
Tras su paso por el norte del país, el grupo -que fue alternando entre los convencionales que se presentaron de forma presencial y aquellos que lo hacían telemáticamente- se trasladó a las comunas de San Carlos (miércoles), Ovalle (jueves) y Ancud (viernes). En total, se llevaron a cabo 190 audiencias públicas con agrupaciones y movimientos que plantearon sus inquietudes sobre el proceso. 2
mientras se resolvía su participación en la comisión de derechos humanos, el convencional se reunió con la directiva de Renovación Nacional, que realizó un acto de desagravio.
Nicolás Reyes Acevedo
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