Francisco Meneses V.

Los conciertos en vivo, cual ave fénix, están retomando su vuelo. Es así que el próximo fin de semana, en plenas Fiestas Patrias, el Valparaíso Sporting de Viña del Mar recibirá a dos grupos fundamentales de la Nueva Canción Chilena: Quilapayún, el sábado 18, e Inti Illimani Histórico, el domingo 19.

Eduardo Carrasco, líder de la legendaria agrupación de los ponchos negros, no oculta su satisfacción con el regreso a los escenarios y el encuentro con el público de la región, a la que le guardan mucho cariño.

"Es muy significativo para nosotros que la vuelta sea en Viña, cerca de Valparaíso, que es nuestro lugar de origen; si bien nosotros no somos de Valparaíso, artísticamente se puede decir que sí lo somos porque ahí empezamos y siempre ha habido un lazo muy especial con la gente del Puerto y de Viña también, en los tiempos en que hacíamos los grandes recitales en el Teatro Municipal", recuerda.

- ¿Cómo proyecta este reencuentro con el público después de tanto tiempo sin poder tocar en vivo?

- Lo que queremos es hacer un concierto bien completo, con hartas canciones y en el que recorramos los puntos más hermosos de la carrera de Quilpayún desde el comienzo hasta ahora. Por supuesto vamos a cantar a Víctor Jara, Violeta Parra y las grandes canciones que hemos ido nosotros recopilando a través del tiempo, que son muchos años ya. Imagínate que estamos en esto por 54, 55 años, es mucho tiempo.

- Mencionaba lo que ha sido este tiempo de confinamiento, donde la actividad artística se ha reducido a cero, pero a la vez es un tiempo muy creativo, generando canciones, proyectos.

- Ha sido un tiempo bien prolífico, hemos hecho cosas, pero lo principal que hemos hecho ha sido la Cantata a Murieta, que ya está empezando a grabarse y que va a ser presentada en enero del próximo año. Además hemos tenemos varios proyectos que estamos realizando con Matanza, un DJ que organiza fiestas y que va a hacer una fiesta muy bonita a fin de año, multitudinaria con música nuestra y del Inti. Ya están haciendo las canciones, están quedando preciosas, es otro tipo de música y a nosotros nos gusta mucho explorar otras zonas de la música popular, porque hay muchísimas zonas. Hicimos la canción con Pablo Chill-E que ahora va a tener otro momento importante, porque en Francia se está comenzando a filmar el clip de esa canción, "Aburrido"; y probablemente en octubre va a salir por las redes "Aburrido" en un remix de Matanza.

- ¿Cómo ha sido esta fusión con los sonidos más actuales de temas clásicos de la Nueva Canción Chilena?

- Para nosotros es muy importante que la música se meta por todos lados, que no se quede relegada a la forma en la cual fue compuesta o presentada por primera vez, y que vengan muchas reversiones con otras personas. Nos ha gustado siempre hacer eso; hemos hecho por ejemplo, canciones con distintas personas de la música chilena, de la historia de la música chilena, como Álvaro Henríquez, Manuel García y distintos artistas nacionales de gran nivel. En eso estamos y este concierto es para retomar la relación con nuestro público, que la peste cortó lamentablemente y restablecer esos lazos profundos que tenemos, cantar juntos y vivir una experiencia de poesía, música juntos, pasarlo bien, que de eso se trata, y recordar canciones del pasado y canciones actuales.

- Este tiempo de pandemia no sólo ha servido para generar nuevo material artístico, también para reflexionar acerca de lo que ha pasado en Chile desde la crisis social de 2019.

- Claro, por supuesto. Yo creo que todos hemos vivido con intensidad lo que está pasando en Chile, es algo que nos ha tocado a todos independientemente de los colores políticos, las tendencias que tengamos. El estallido social y todo lo que ha venido después, la Convención y todas estas cosas, nos han tocado profundamente, nos hacen pensar y generan una tremenda esperanza, en el sentido de que podamos realmente construir un Chile en el que quepamos todos y en el que todos nos sintamos contentos, seguros, esperanzados y que podamos ver el futuro de nuestra patria con optimismo. En cierto modo, lo que ha ido pasando ha confirmado esa impresión, de que el estallido social no ha sido una cosa que va a quedar ahí simplemente, si no que es una cosa que está cambiando paulatinamente, a pesar de que haya problemas por aquí y por allá, no lo podemos esconder tampoco; pero a pesar de eso, está trayendo unas nuevas relaciones entre las personas, un nuevo Chile. Hay que estar dispuesto a vivir esta época con mucho optimismo y así lo hemos hecho nosotros, estamos en un momento histórico, hemos vivido muchos otros momentos históricos antes, sabemos perfectamente reconocerlo y estamos muy esperanzados, seguros de que vamos por buen camino.

- Después de este concierto y de la grabación de la Cantata a Murieta, ¿qué otros proyectos se vienen para Quilapayún?

- Fundamentalmente eso, la Cantata a Murieta es lo más importante que vamos a hacer este año, pero no va en menoscabo de nuestros conciertos y lo que son las actividades que estamos haciendo, por supuesto. Este concierto que vamos a dar en el Sporting de Viña, para nosotros va a ser el inicio de todo lo que ahora viene, en todo sentido de la palabra, de ahí la importancia que tiene y esperamos que, así como nosotros estamos saliendo de esta crisis, nuestro país también salga de esta pandemia y vuelva a su vida tal como la conocimos, y la quisimos cuando estábamos felices viviendo sin saber los momentos muy importantes de nuestra vida, sin darnos cuenta de que eran tan importantes como se ha revelado ahora.

"Este concierto es para retomar la relación con nuestro público, que la peste cortó lamentablemente y restablecer esos lazos profundos que tenemos, cantar juntos y vivir una experiencia de poesía, música juntos, pasarlo bien".

"Hay que estar dispuesto a vivir esta época con mucho optimismo y así lo hemos hecho nosotros, estamos en un momento histórico (...) y estamos muy esperanzados, seguros de que vamos por buen camino".

"Aquí estamos otra vez, y qué fue, y qué fue"

Fecha: 18 de septiembre, 19.00 horas.

Lugar: Valparaíso Sporting, Viña del Mar

Entradas: Desde los $23.600 hasta los $36.800. Se pueden adquirir a través del sistema Puntoticket. Pase de movilidad obligatorio.

en resumen