Con dos años de postergación, en noviembre del año 2022 se realizará la tradicional exposición de equipos navales y transporte que organiza la Armada de Chile desde 1998, actividad conocida con el nombre de ExpoNaval. Considerada una de las mayores muestras navales del mundo y con seguridad la más relevante de Latinoamérica, la exposición chilena posibilita el encuentro entre marinas de diferentes países y el intercambio de negocios en el sector de la industria de la defensa, lo que se materializa con la asistencia de altas autoridades navales y destacadas empresas del rubro, las que dan cuenta de sus principales avances en los últimos años.

La reactivación de un encuentro como la ExpoNaval tiene una serie de externalidades positivas para la Región de Valparaíso. Una de ellas es la oportunidad que representa para las universidades locales el intercambio de conocimiento, experiencia y procedimientos con empresas de alto reconocimiento mundial en las áreas de defensa y transporte. Aunque este tipo de interacción colaborativa suele tener menos visibilidad que otros durante los días de muestra, es quizás el que mayor impacto de largo plazo puede generar.

Tampoco es menor el volumen de negocios que se inician o cierran en el marco de la exposición que organiza la Marina. Esto permite a nuestro país retomar su condición de líder natural en estos ámbitos a nivel sudamericano, una posición que para perdurar en el tiempo exige de estabilidad política y económica.

En ExpoNaval 2022 estarán presentes 160 empresas de 35 países, entre ellos Francia, Reino Unido, España, Rusia, Estados Unidos, Holanda, Italia, Alemania, Brasil, India, Australia, Israel y Canadá. Esto permite movilizar al sector turístico, ya que las delegaciones confirman su arribo con meses de anticipación, activando un flujo de divisas de alto nivel. Por ello, en los 15 meses que restan, tanto hoteles y restaurantes como guías y operadores turísticos deberán prepararse adecuadamente, tanto para recibir al número de visitantes como para responder con calidad a las necesidades de servicio que exigen, dado que los participantes en este tipo de eventos responden a un perfil de turismo de negocios, que es muy distinto al que suele venir a la zona durante el verano.

Aunque aún no está del todo definido, es probable que la exposición se realice en la base aeronaval de Concón, un lugar de alto valor logístico para la región, pero subutilizado para el rango de sus posibilidades. La ExpoNaval 2022 se alza de esa manera como una oportunidad para revalorizar este espacio, para el cual hay proyectos previstos en el mediano plazo.

Luego de un duro periodo de pandemia y cuando algunas actividades tienen problemas para desarrollarse - el triste caso del Festival de Viña- y otras no terminan de consolidarse -la industria de cruceros-, la recuperación de una muestra emblemática como la ExpoNaval 2022 le devuelve a la zona algo de la normalidad perdida hace ya casi dos años.

Recientes datos del mercado laboral muestran un fuerte crecimiento del empleo durante julio pasado. Pese a ser una buena señal, hay razones para ser cautos. Una información complementaria a los datos de encuestas y registros administrativos es la obtenida de portales de búsqueda de empleo en internet. En el proyecto SABE (Sistema de Análisis de Bolsas de Empleo), del Observatorio Laboral de Sence, ejecutado por ISCI y el Web Intelligence Centre de la Universidad de Chile, monitoreamos el comportamiento de algunos de los portales más importantes del país y clasificamos los "avisos" y los "postulantes" utilizando algoritmos de inteligencia artificial. Si bien nuestros indicadores no muestran puestos de trabajo creados, podemos medir directamente el esfuerzo de búsqueda, tanto de empleadores (avisos) como de trabajadores (postulantes y postulaciones).

Nuestro último informe mensual (hasta el 31 de julio) muestra que las vacantes abiertas superan en 80% el nivel de marzo de 2020. En contraste, el número de personas que está postulando se encuentra 60% más abajo. En otras palabras, las posibilidades de trabajar hoy son relativamente abundantes, pero las postulaciones escasean. Los cesantes y quienes buscan cambiar de empleo tienen mayores probabilidades de encontrar un nuevo puesto de trabajo que antes.

La situación nos lleva a ser algo escépticos respecto de que el nivel de empleo pueda recuperarse pronto a los indicadores que tenía previo a la pandemia. Los datos muestran que el número de postulantes activos es el mejor predictor del empleo (con dos meses de anticipación, correlación 0,77) y de la fuerza de trabajo (con siete meses de anticipación, correlación 0,81), mucho más que el número de avisos publicados. Esto sugiere, por lo tanto, que la recuperación del empleo podría tomar un largo tiempo si los postulantes no aumentan su actividad.

Este es un fenómeno atípico en las recesiones, que se caracterizan por el mayor número de despidos y la escasez de vacantes. Algunas causas probables son el temor al contagio de covid-19, las cuarentenas, los cierres de colegios (niños en el hogar afectan empleo femenino especialmente) y las trasferencias monetarias desde el Estado. Con una pandemia en un punto muy bajo, sin cuarentenas, y con amplia cobertura de vacunación, es difícil no pensar que las transferencias fiscales y los retiros de las AFP juegan también un rol.

En este contexto, urge que las autoridades económicas y los actores políticos tomen en consideración la evidencia disponible al tomar decisiones de políticas económicas. En el último tiempo se han redoblado las preocupaciones por el incremento del gasto fiscal y las consecuencias negativas -para la inflación y el funcionamiento del mercado de capitales- de un posible nuevo retiro de fondos previsionales. Hay un elemento nuevo que agregar a este complejo escenario: la escasez de trabajadores.