Fernández prepara cambio de gabinete tras carta de Cristina
ARGENTINA. El presidente canceló sus viajes al extranjero y la vicepresidenta le recordó que ella lo escogió como candidato y le pidió "honrar su decisión".
La tensión abierta en el seno del Gobierno argentino entre el presidente Alberto Fernández y su vicepresidenta, la también peronista y líder del ala kirchnerista Cristina Fernández, mantiene en crisis y en vilo al país, mientras el jefe de Estado canceló sus viajes al exterior y prepara cambios en su gabinete después de que la expresidenta rompió el silencio en una desafiante carta al mandatario.
"Voy a ordenar el gabinete y terminar con esta discusión", mencionó Fernández tras conocerse públicamente la misiva de su vicepresidenta.
"¿En serio creen que no es necesario, después de semejante derrota, presentar públicamente las renuncias y que se sepa la actitud de los funcionarios y funcionarias de facilitarle al presidente la reorganización de su gobierno?", cuestionó Cristina en una extensa carta, el jueves en la noche, en la que aseguró había advertido la derrota electoral que sufrió el oficialismo en las primarias legislativas, previas a los comicios del 14 de noviembre.
"Creía que se estaba llevando a cabo una política de ajuste fiscal equivocada que estaba impactando negativamente en la actividad económica y, por lo tanto, en el conjunto de la sociedad y que, indudablemente, esto iba a tener consecuencias electorales", aseveró.
"No lo dije una vez, me cansé de decirlo, y no sólo al presidente de la nación. La respuesta siempre fue que no era así, que estaba equivocada y que, de acuerdo a las encuestas, íbamos a ganar "muy bien" las elecciones", arremetió Fernández de Kirchner.
En un desafiante tono, inusual para quien ejerce la vicepresidencia, advirtió que fue ella la que eligió a Fernández como candidato presidencial en 2019.
"Sólo le pido al presidente que honre aquella decisión, pero por sobre todas las cosas, tomando sus palabras y convicciones", zanjó con autoridad.
Además, defendió que la crisis institucional no es su culpa. "No, no soy yo. Por más que intenten ocultarlo, es el resultado de la elección y la realidad", arremetió. "No voy a seguir tolerando las operaciones de prensa que desde el propio entorno presidencial a través de su vocero se hacen sobre mí y sobre nuestro espacio político", aseguró.
En ese sentido, criticó frontalmente al vocero presidencial, Juan Pablo Biond, de quien dijo que "es un raro caso: un vocero presidencial al que nadie le conoce la voz. ¿O tiene alguna otra función que desconocemos? ¿La de hacer operaciones en off por ejemplo? Verdadero misterio".
Tras la arremetida kirchnerista, ayer en la tarde se conoció la renuncia de Biond, según reportó el diario La Nación de Argentina.
"Espero que mi alejamiento del cargo contribuya a pacificar, en parte, estos momentos difíciles", sinceró, mientras en la Casa Rosada continuaban -hasta el cierre de esta edición- las frenéticas reuniones del Gobierno que busca rearmarse.
El desarme de Fernández llegó solo un día después de que asegurara que tenía las riendas del asunto. "La gestión de gobierno seguirá desarrollándose del modo que yo estime conveniente. Para eso fui elegido", había dicho.
Cancelación de viajes
En medio de la incertidumbre política, fuentes oficiales confirmaron que ayer el mandatario decidió suspender sus viajes al exterior, incluida su visita a México por la cumbre de jefes de Estado de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que se realizará hoy, grupo que Argentina busca presidir en 2022.
La ausencia de Fernández era delicada dado que cuando viaja fuera corresponde a la vicepresidenta ejercer interinamente la jefatura de Estado.