Se inicia una de las estaciones más esperadas debido al alza de las temperaturas y la extensión de la luz diurna, y para los vegetales las condiciones del entorno también son más favorables y es posible tener una mayor diversidad de especies cultivadas. Así lo explica el jefe de la carrera de Agronomía de la Universidad Viña del Mar (UVM), Ricardo Astorga, quien detalla que "esta época es la ideal para darle mayor valor nutritivo a la alimentación, incorporando especies vegetales que durante el año no hubo o estaban escasas".

El docente declara que "las hortalizas de hoja seguirán estando en cantidades abundantes, especialmente hacia las zonas costeras. Lechugas, acelgas, cilantro y perejil son algunas de las que se pueden cultivar sin problemas y que tendrán un desarrollo mayor en esta época del año. Fuente de fibra y, sobre todo, de calcio, son recomendadas en la dieta para mantener los niveles de este mineral de manera apropiada y así cumplir las funciones estructurales en tejidos y huesos".

Astorga agrega que "aparece una familia de vegetales que no puede cultivarse en el invierno en nuestra zona. Las cucurbitáceas son hortalizas de fruto y que necesitan de temperaturas medias a altas para producir sus frutos. Zapallos italianos, pepinos de ensalada, sandías y melones son algunas de las especies más reconocidas. Aparte de los minerales y la fibra que aportan, contienen altos niveles de agua, que permiten mantener nuestro cuerpo hidratado para enfrentar los días con mayores temperaturas y menor humedad ambiente".

El académico añade que como "fuente de proteína vegetal, las leguminosas también son plantas que ven favorecido su crecimiento, especialmente los porotos. Consumidos en verde, granados o secos, son uno de los alimentos más apreciados en la dieta, debido a su aporte en proteínas. Se suman las lentejas y los garbanzos, aunque en nuestro país se tienden a consumir en seco".

El agrónomo UVM concluye que "sin duda las plantas que mejor responden a estas condiciones primaverales son las llamadas aromáticas y/o medicinales. Sus aromas y sabores intensos, así como sus propiedades curativas y culinarias, las hacen muy apetecidas. De poco tamaño, son plantas que se adaptan muy bien a los reducidos espacios urbanos, pero siempre con altas necesidades de luminosidad o sol directo. En este grupo se encuentran el orégano (verde), albahaca, cedrón, melisa, llantén y romero, especies que se expresan con un desarrollo acelerado a partir del aumento térmico. Además se adaptan a condiciones de suelo, sustrato e incluso a maceteros, lo que las hace ser de fácil cultivo y de recolección permanente, ya que son capaces de ir renovando su follaje durante todo el período de crecimiento".