"El modelo de Estado (con Boric) se agranda cada vez más y se vuelve más totalitario"
De perfil más bien bajo, salvo en los temas de ciberseguridad, el senador Kenneth Pugh (Ind./RN) decidió tomar un rol más activo en la campaña presidencial de José Antonio Kast y el lunes tuvo una reunión en el comando, la que estuvo centrada en afinar detalles para convocar a la mayor cantidad posible de apoderados de mesa. También ha hecho hincapié en la necesidad de que acudan más personas a votar.
"En una democracia el voto es lo que permite que se pueda elegir al Presidente, y lo que no queremos es que gane la abstención, aquí lo que tenemos que hacer todos los que queremos la democracia es salir a votar y convocar, esa es la tarea, para darle mayor legitimidad al proceso", remarcó de entrada.
Respecto de la decisión que tomará la ciudadanía este domingo, planteó que "son dos alternativas distintas: una propuesta que tiene en su origen la esencia de un Estado más grande, un Estado que busca, de alguna manera, crecer, que es básicamente lo que Gabriel Boric nos expresa, pero también con disminución de ciertas libertades, entonces lo que tenemos que evaluar es si queremos realmente entrar en un estado de esa naturaleza, o en cambio, un Estado mucho más abierto, donde prevalezcan las libertades individuales.
- ¿Qué libertades se restringirían en un eventual gobierno de Boric?
- Un tema no menor es cuando se empieza a hablar de las distintas formas para poder financiar pensiones, para poder construir algo, es destruir básicamente todo lo que se ha construido en libertad, el modelo, la forma como el país se ha ido construyendo. Los modelos que tienden a ser centralistas del Estado, donde el Estado tiene el derecho absoluto a todo, van en contra de un modelo más abierto en el que, por ejemplo, en la educación los padres tienen el derecho preferente a educar a los hijos; modelos de inversión donde tiene que estar la propiedad privada. Son dos modelos totalmente distintos, un Estado que se agranda cada vez más y se vuelve más totalitario, o las libertades de las personas.
- Al parecer la libertad de pensamiento no entraría en aquello, ya que el programa de Kast proponía identificar, detener y juzgar a agitadores de izquierda...
- Yo creo que en ese sentido el discurso inicial y también parte de ese mismo extremo se ha ido moderando a un discurso más democrático. Todo extremo que quiera imponer una condición va en contra de las libertades de las personas. La libertad de expresión es un derecho humano que tenemos que garantizar.
- ¿Esa moderación le parece sincera o más bien una estrategia electoral?
- Más que una estrategia electoral, lo que creo es que se ha hecho propio el pensamiento de una gran coalición. Chile Vamos es una coalición grande, amplia, exitosa, que ha tenido ya dos veces a un Presidente, y él, republicano, lo que ha hecho ha sido, básicamente, asimilar muchos de los conceptos de Chile Vamos, y eso le va a dar tranquilidad al país, la gente busca tranquilidad, que el cambio sea en paz, en desarrollo, en entendimiento, ese es el verdadero cambio que queremos para el país.
- Y esa moderación que ha experimentado Kast, ¿cómo convive con posturas como las del diputado Johannes Kaiser?
- Bueno, él lo expulsó y dijo que lo que hizo está muy malo, que no es propio, no lo quiere ver y lamenta mucho que haya dicho esas expresiones, como también las de la señora Naveillán, diputada electa, por aquellos comentarios jocosos, según ellos. Bueno, eso no tiene nada de jocoso, y Kast ha sido súper claro en expresarlo, en decirlo, y no tiene ningún problema. Y obviamente, estos nuevos diputados van a estar en una coalición amplia, y una coalición amplia tiene que tener gente de diferentes sectores, algunos siguen siendo del Partido Republicano, está toda la gente de Chile Vamos y todos estos otros que quedaron de independientes, porque en la práctica no hay ningún partido que los quiera asumir, y ese es el problema de los que son, llamémosle díscolos, que creen que pueden tener un discurso propio. Las mayorías amplias se construyen con gente de diferentes sectores y diferentes pensamientos, y obviamente no queremos ver extremos como los que se han escuchado.
- En la derecha se han preocupado de recalcar que Boric es el candidato del Partido Comunista, en una suerte de campaña del terror, pero Michelle Bachelet en su segundo gobierno estuvo aliada con el PC e incluso tuvo a dos ministros comunistas que luego fueron respaldados por la ciudadanía, eligiendo a uno constituyente y a la otra senadora. Considerando esto último, ¿cree que ha habido un error en enfocarse básicamente en eso?
- Efectivamente, el Partido Comunista fue parte del gobierno Bachelet 2, y eso quizás produjo que la concertación de partidos, que era el conglomerado tradicional, empezara a desmembrarse, y eso es una reflexión que tiene que hacer la oposición, en la forma en que ellos quedan divididos. Probablemente ahora el Partido Comunista no va a tener una representación tan baja, puede ser más amplia, no lo sabemos, ahí es donde está la duda.
- ¿Hay algo que eche de menos en los programas de gobierno?
- Bueno, sí, yo tengo varios temas. Aparte de la pandemia y la crisis social que estamos viviendo, hay un tema no menor, y es el cómo usar las tecnologías digitales. Ojalá podamos avanzar en la Constitución para establecer a Chile como una república digital, y tenemos que tener un gobierno digital basado en datos, que le dé respuestas mucho más rápido a las personas. No hay datos, y como no hay datos, no hay capacidad para tener respuesta rápida, estamos avanzando ya a la primera cuarta parte del siglo 21, se nos viene la cuarta revolución industrial, viene una inteligencia artificial que va a desplazar a una cantidad de trabajo gigantesca, y todavía estamos trabajando con planillas Excel e imprimiendo los documentos en papel, o sea, estamos en la prehistoria digital. Yo espero que quien asuma tome un verdadero liderazgo político en estos temas y convierta al Estado en un Estado digital al servicio de las personas, para resolverles mejor los temas. La tecnología digital se ha convertido en algo esencial, y en el siglo 21 debemos tener la capacidad de proteger a este ciberespacio, y ahí viene la ciberseguridad. Estos temas de ciberseguridad no son temas de los candidatos, no lo he visto como un tema relevante, y yo creo que eso sí se puede mejorar en el programa.
"Todo extremo que quiera imponer una condición va en contra de las libertades de las personas. La libertad de expresión es un derecho humano que tenemos que garantizar".
"Ojalá podamos avanzar en la Constitución para establecer a Chile como una república digital, y tenemos que tener un gobierno digital basado en datos".