Daniel Duclos: "No es solo voluntad política el traer eventos a la región"
PANAMERICANOS. El exseremi de Deporte señaló que los esfuerzos para recibir a Santiago 2023 en Valparaíso deben apuntar al rubro hotelero y turístico mas que a mejoras en infraestructura.
Organizar unos Juegos Panamericanos y Parapanamericanos es un desafío. En Chile, aunque algunas mejoras deben hacerse, en general la infraestructura deportiva del país está lista para recibir a Santiago 2023, incluyendo a la Región de Valparaíso, que tendrá cinco sedes encargadas de recibir prácticas de la categoría del fútbol o triatlón.
Por ello, los esfuerzos a realizar para llevar a cabo el megaevento deportivo deben apuntarse en otra dirección. O así lo piensa el ex seremi de Deporte de Valparaíso, Daniel Duclos, quien se refirió al impacto social y económico de las disciplinas que llegarán a las sedes de la región (Viña del Mar, Valparaíso, Algarrobo, Quillota y Los Andes).
El profesor de Gestión Deportiva en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), señaló que la infraestructura de la zona tendrá solo mejoras menores y adaptaciones de acondicionamiento para cumplir los estándares de un evento así, y que la organización debe poner la mira en un ámbito que a menudo no se asocia con el deporte, tal como es la capacidad hotelera y turística de la región.
Impacto en la región
En ese sentido, precisó la oportunidad de desarrollo que representan los grandes eventos deportivos, sobre todo en un país tan centralista como Chile. "Un gran evento deportivo como Santiago 2023, que lleva disciplinas a otra región, es una oportunidad de inversión en infraestructura deportiva, mejora en el sector turístico, aumento de camas, generación de empleo", sostuvo.
Duclos recordó que durante su estancia en la Seremi de Deportes, en 2015, recibió un boletín del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el que reflejaba que, "al menos en el sector del turismo y el empleo, se vio activado en los meses de la Copa América".
"En general, en los eventos deportivos hay abundante evidencia que muestra la generación de empleo y actividad turística, tanto previo como posterior del evento. O sea, más que el evento en sí sea una actividad turística, lo es también el movimiento de gente y el ingreso de extranjeros, tanto antes como después del evento", señaló.
Asimismo, complementó que "hay un efecto sobre la imagen ciudad y país. Estas instancias tienen un alcance de cientos de millones de televidentes y audiencia y hoy cada vez más con las multiplataformas. Es una ventana de mostrar y transmitir los atributos y las bondades que tienen nuestros distintos territorios y eso repercute en visitantes futuros".
"La región está lista"
Se refirió también al desarrollo de la Región de Valparaíso, de cara a los Juegos Para y Panamericanos de 2023. Al respecto, señaló que, si se realizaran el día de mañana, "la región y el país están preparados para acoger y organizar cualquier gran evento deportivo".
Sin embargo, "algunos tienen exigencias importantes de capacidad hotelera y camas por estrellas, entonces, es una de las cosas en las que hay que invertir y establecer líneas de desarrollo y cómo se van mejorando las capacidades hoteleras de otras regiones". Añadiendo, además, la mejoría substancial que ha habido en la calidad hotelera y turística en la zona, lo que permite la llegada de instancias así.
"Hace 20 años en Viña del Mar no teníamos hoteles de 5 estrellas. Realizar una Copa América acá era imposible. Hoy sí tenemos hoteles de 5 estrellas que nos permiten postular y ser candidatos a sede de algunos eventos deportivos (en los Juegos Panamericanos)", comentó.
"No es tan solo quizá la voluntad política de organizar un evento en una ciudad, sino hay que ver si las ciudades están preparadas en términos hoteleros para recibir gente, no solo en términos de turistas, sino de la organización. Vienen desde dirigentes, técnicos deportivos, deportistas, equipos técnicos y no podemos tener campamentos de campaña para recibirlos", señaló.
Bajo esa línea, apuntó a mirar a mediano y largo plazo el proceso que implica recibir disciplinas de un evento deportivo de este tipo. "No es lo mismo construir pabellones deportivos o un estadio, que construir o invertir en hoteles", precisó.
"Hablamos de un sector y una industria específica (la hotelera) que tiene mucho que ver con el deporte, pero que responde a un mercado y una actividad económica. En tanto, los recintos deportivos responden a una administración municipal o del Instituto Nacional del Deporte (IND), y quedan para uso ciudadano. Tienen mucha relación, pero son cosas distintas", indicó.
"Siempre que se postula a la candidatura de un gran evento deportivo, no solo en lo que se proyecta en términos de infraestructura, sino que también hay que ver los servicios que se requieren para realizar un gran evento", añadió.
Promoción de deportes
En tanto, el actual docente de la PUCV precisa que, desde el punto de vista de lo deportivo, lograr un evento así es abrir un espacio y una instancia de promoción de distintas disciplinas, sobre todo entre los más jóvenes del hogar.
"No solo está la modalidad deportiva tradicional, porque algunas han tenido una penetración más lenta o poco significativa en nuestro país. Un evento así es una oportunidad para tener un efecto y una consecuencia positiva, sobre todo en niños, niñas y adolescentes, que son las edades de iniciación y especialización deportiva", dijo.
En ese sentido, el ex seremi de Deporte aprovechó de llamar a la organización de Santiago 2023 a promover la instancia entre los más jóvenes, de cara al futuro.
Según explicó, en esta clase de situaciones, el coordinar para que los estudiantes de los colegios puedan participar, requiere de una burocracia excesiva, la que no es suficientemente rápida para que se pueda aprovechar la instancia para promover el deporte.
Para poder llevar a un curso escolar, indicó, "son necesarios 15 días de anticipación y permisos de la dirección provincial regional, siendo que la organización suele liberar tickets de cortesía días antes de los eventos".
"Se pierde una gran oportunidad de convocar a nuestro público, sobre todo infantil y juvenil, a aprovechar estos eventos. Es la oportunidad de promocionar la actividad física y la práctica deportiva en estas edades tempranas, para generar hábitos y cultura deportiva", finalizó.
Las largas sequías amenazan el remo
Uno de los problemas que asoma para el remo en Santiago 2023 es la sequía que azota a la región, y que afecta directamente al Tranque La Luz en Curauma. En ese sentido, el exseremi Daniel Duclos señaló que "hay que preocuparse", aunque se considera "optimista de que no se va a secar de aquí a un año y medio, sí me preocupo de la sostenibilidad del remo, y de que si estas temporadas de sequía se mantienen, pueda desaparecer la capacidad de desarrollo deportivo en este lugar".
"Santiago 2023 es una oportunidad para mejorar el sector turístico en otras regiones".
"Este es el momento para generar hábitos y cultura deportiva en los jóvenes".