Expansión y suspenso de norma reguladora
Nueva objeción de Contraloría al Plan Regulador de la costa norte deja en el aire inversiones y medidas de protección del territorio. El seremi de la Vivienda, junto con expresar su preocupación por la decisión, recordó que en el pasado Contraloría ha tramitado instrumentos de planificación "con alcances".
El crecimiento poblacional hacia el norte es una realidad desde hace muchos años en la Región de Valparaíso. Un caso concreto y cercano es el de la comuna de Concón que de ser un balneario tradicional se ha convertido en una zona de residencia permanente asociado a un importante desarrollo comercial y productivo.
Algo similar se advierte en el sector costero que va más allá, el correspondiente a las comunas de Puchuncaví, Zapallar, Papudo y La Ligua.
Puchuncaví desde hace largo tiempo enfrenta problemas ambientales que han motivados intervenciones diversas y justificadas protestas sociales. Por otro lado, si bien La Ligua, capital de la provincia de Petorca, tiene un centro urbano interior, también tiene un atractivo litoral costero al norte de Papudo, limitando con la Cuarta Región.
Pues bien, toda esta periferia costera y parte del interior en los últimos tiempos ha tenido un importante crecimiento más allá de lo industrial y enfocado especialmente en el turismo, lo que ha significado proyectos inmobiliarios diversos y, consecuentemente, mayor población de residentes y visitantes.
Esta realidad determinó la formulación del Plan Regulador Intercomunal Valparaíso Satélite Borde Costero Norte, que fue aprobado por el Gobierno Regional de Valparaíso pero que ha sido por cuarta vez objetado por la Contraloría Regional.
El seremi de la Vivienda y Urbanismo Felipe Vergara, junto con expresar su preocupación por la decisión del organismo, expresó que se trata de observaciones menores y que "sería mucho más eficiente y rápido poder conversar acerca de aquello con el órgano contralor de manera interna". Recordó que en el pasado Contraloría ha tramitado instrumentos de planificación "con alcances", modalidad que pudo aplicar ahora "en atención al carácter formal, de menor relevancia o pertinencia que muestran las observaciones".
Insistiendo en el valor del instrumento Vergara afirmó que la "nueva norma permitirá incentivar inversiones en algunos sectores que se ven detenidas por la demora en su aprobación, como también restringir el uso de áreas que requieren ser protegidas con urgencia".
En las municipalidades involucradas hay temor en lo que significaría formular un nuevo plan regulador. Es pertinente lo expresado por el consejero regional Manuel Millones. Pese a sus carencias y desactualización, afirma, el plan "resuelve demandas importantes y protege territorios con valor ambiental de la presión inmobiliaria".
Bajo ese punto de vista, resueltas las objeciones de Contraloría, habría que dar curso al instrumento considerando especialmente el punto de las inversiones y la protección de territorios que están siendo ocupados a una velocidad mucho mayor que las normas que buscan su resguardo, y evitando así eternas judicializaciones.