Cristián Rojas M.

L a presentación del artículo 12 de la propuesta de capítulo inicial de la nueva Constitución, propuesto por Agustín Squella y otros convencionales del Colectivo del Apruebo, generó polémica entre la comunidad de las diversidades sexuales, al no incluir la palabra "disidencias". Incluso la actriz Daniela Vega se refirió en duros términos a Squella en su Twitter y lo llamó a informarse.

El artículo 12 de la propuesta señala que "Chile reconoce y promueve la igualdad sustantiva entre las personas, y, por ende, entre hombres y mujeres, y prohíbe toda forma de discriminación entre ellas. Reconoce también las distintas identidades de género y las diversas orientaciones sexuales de las personas y prohíbe igualmente cualquier forma de discriminación a su respecto".

El constituyente dio conocer el texto, que contiene 14 artículos, ante la Comisión de Principios, Democracia, Nacionalidad y Ciudadanía, que comenzó el debate sobre normas constitucionales justamente con la exposición y debate de la propuesta del Colectivo del Apruebo.

Squella explicó por qué se decidió no incluir en el artículo 12 la expresión disidencias sexuales: "Tenemos orientaciones y preferencias sexuales ¿por qué usar la palabra disidencia como si el que tiene una condición sexual de minoría es un disidente, un rebelde? ¿Por qué disidencia? Simplemente tiene otra sexualidad".

Lo importante, concluyó, el Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales, es que "ese artículo reconoce la igualdad sustantiva de todas las personas, y, por ende, entre hombres y mujeres, prohibiéndose toda discriminación ente distintas identidades de género y orientaciones sexuales de las personas".

El hecho que el convencional Squella cuestionara el uso del concepto de disidencias sexuales en vez de orientaciones sexuales diversas, generó críticas en redes sociales de parte de algunos grupos de comunidades LGBTIQ+.

Al respecto, Jaime Rojas, presidente del Partido Liberal de Valparaíso, pidió, también en Twitter, un poco de altura de miras y tolerancia: "Lo que comenta (Agustín Squella) es que la palabra disidencia discrimina a una persona por su orientación sexual y para un texto constitucional, no debe haber diferencias. El ser humano se respeta en dignidad completamente", agregando que "por más que a algunos no les guste, la Convención es un espacio democrático de deliberación. La estrechez de mente y la cultura de la cancelación solo ayudan a desprestigiarla. Nadie podría pensar que un Premio Nacional Humanidades busque disparar a alguien".

El vocero del Movil, Óscar Rementería, puntualizó que la propuesta "hace mención de que el Estado tiene que reconocer y promover la igualdad entre todas las personas, y después recalca entre hombres y mujeres. No había necesidad de identificar hombre y mujer si ya estaba hablando de personas".

Con respecto a la controversia por la palabra disidencias, explicó que "cuando hablas de disidencias sexuales a lo que se refiere es a esas personas o grupos de personas que son discriminadas por apartarse de la norma prestablecida tradicionalmente en los cánones sociales, que expresan un género diverso al sexo con el cual se le asignó al nacer, especialmente en las expresiones públicas, y eso es lo que no reconoce este artículo, o no lo manifiesta con evidencia".

Rementería estima que el artículo "es deficiente, pero la verdad es que se puede mejorar y puede ser un precepto constitucional bastante positivo si es que se le hacen los cambios y las mejoras que sean necesarios".

En tanto, para la directora ejecutiva de la fundación Iguales, Isabel Amor, la discusión semántica sobre la utilización o no del término disidencias es "irrelevante y errónea, a mi parecer. No todo lo que escapa de la heteronorma es válido, ni todo lo que pertenece a ella es bueno".

Subrayó que "lo que nos importa es que la nueva Constitución garantice la igualdad sustantiva para todas las personas. Para que el texto se mantenga vigente, es fundamental que los conceptos usados sean amplios. Es importante que participemos y podamos ponernos a disposición de la Convención, dejando de lado funas y otras prácticas que no aportan a la defensa de un nuevo texto constitucional".

"¿Por qué usar la palabra disidencia como si el que tiene una condición sexual de minoría es un disidente, un rebelde?"

Agustín Squella, Constituyente Distrito 7