Martín Hernández B.

Se fue a Universidad de Chile el 2016 luego de varias temporadas exitosas en Santiago Wanderers, y para este 2022 volvió a Valparaíso buscando el ansiado retorno a Primera División. Franz Schultz, lateral formado en la cantera porteña, regresó a Playa Ancha con un sello diferente.

Más maduro y con mayor experiencia, el carrilero arribó al conjunto caturro en esta segunda etapa con la misión de ser más que un jugador, esperando aportar experiencia y, junto a Luis García, convertirse en los líderes de un camarín renovado.

Trece años han pasado desde su debut en Copa Chile en 2009. Los mejores momentos del "Coreano" fueron entre el 2014 y el 2016, cuando el cuadro verde disputó con los mejores el título de Primera División. Ese es el último recuerdo de Wanderers que tiene el oriundo del Barrio O'Higgins antes de partir hacia nuevos horizontes.

Hoy las cosas son distintas: el equipo busca volver a la división de Honor, tras una de las campañas más desastrosas jamás vistas en nuestro país. Sin embargo, el porteño sabe que tienen la capacidad para volver a Primera, solo falta demostrarlo.

- Ya van cuatro amistosos de pretemporada, ¿cómo siente al equipo?

- Bien, la verdad es que bien. El equipo está bien, está fuerte. Pero yo no saco nada con decirte algo ahora, si al final, la gente estará esperando el torneo, que es todo lo que el porteño quiere, que a fin de año nos demos los abrazos y estemos en Primera. Pero el equipo se ha visto bien, la verdad es que muy bien. En Uruguay fuimos a competir, no a participar. Perdimos, pero lo hicimos con Peñarol, un rival de alto calibre. Tal vez son rivales que uno no se va a encontrar acá en Chile, obvio, pero sí te da más intensidad de juego, son distintos los movimientos que tienen. Sirvió mucho.

- El partido con Peñarol se suma al de Sarmiento y la "U", rivales de categoría.

- Más allá de fijarme en el rival, yo me fijo en el rendimiento del equipo. Nosotros estamos más concentrados en cómo funcionar y lo que queremos para el torneo. Más allá del resultado, lo importante es que el día de mañana en el torneo nos vaya bien. Al final, no sacamos nada de repente con ganar todos los partidos amistosos en pretemporada si después en el campeonato no arrancas en buena forma.

- Sin embargo, hay una suerte de envión anímico cuando se ganan los amistosos.

- Yo no lo pienso tan así. No me gusta tanto ganar amistosos, me interesa ganar en el torneo, que es lo importante. Me pasó muchas veces acá en Wanderers que ganamos muchos amistosos, muchas Noches Verdes y después en el torneo no nos iba bien. Mejor empezar con el pie derecho el campeonato.

- Honestamente, ¿el equipo tiene lo necesario para ascender?

- Claro, obviamente. Vamos a dar la pelea, toda la gente, todo el país sabe que Wanderers es fuerte de local. Tenemos que serlo para poder subir. Ganar todos los partidos de local y de visita no perder. La B muchas veces es muy incierta. Por ahí, en Primera el último jugaba con el líder y es esperable que el primero los golee o le gane. En la B es distinto, cualquiera le puede ganar a cualquiera, porque es un fútbol que es lucha, de mucha garra. A la gente de Wanderers le gusta mucho ese fútbol, así que a nosotros nos viene bien el equipo que se está armando.

- Hablemos de Daniel Gonzalez: Lo conoce desde que era un niño en las cadetes del club.

- Imagínate, yo lo conozco desde que tenía nueve o diez años. Viví todo el proceso de él como jugador de fútbol y como persona, cómo se fue desarrollando. Entonces yo creo que la mejor decisión que tuvo fue quedarse. Es complicado cuando te vas a un lado, con dolor de rodilla, lesionado, sin confianza, porque no estaba jugando, eso no es fácil para el jugador de fútbol. Lo mejor que pudo hacer fue quedarse, retomar el nivel que lo llevó a la selección, el que todos le conocemos acá en Wanderers, de lo que se espera de él. Y entender que es un pilar fundamental en el equipo, y él tiene que verlo así y la gente lo tiene que sentir así, nosotros ya lo hacemos. Es un tremendo aporte que esté con nosotros este 2022.

- Un 2022 que tiene un ambiente muy distinto a cuando se fue, tras haber peleado el título el 2014 y el 2016.

- Llegué más maduro. El 2014 era un juvenil. Como experiencia fue maravilloso pelear un torneo en Wanderers, dos veces, porque el 2016 también estuvimos ahí. Pero el 2014 fue distinto, terminamos segundos con 41 puntos y no salimos campeones, fue una locura. Le hicimos la pelea a Colo Colo y la "U", hasta el último día. Y era un Wanderers vistoso, ese año no perdimos ningún partido de local, los ganamos todos. Y ahora, este 2022 obvio que es distinto, en la B, que es una categoría que es mucho más difícil, donde cualquiera puede ganar.

- ¿Son entonces el rival a vencer?

- Wanderers será el rival a vencer este año. Nosotros tenemos que tener claro que en Valparaíso los equipos se nos van a echar atrás, va a ser difícil entrar, y que de visita va a ser prácticamente igual. Nos verán como equipo grande en la B y se va a notar el respeto que nos tendrán. El envión que te da la gente en Valparaíso es importante, en Segunda la gente que vas a llevar serán 8 mil, 10 mil personas y en campañas buenas, hasta 15 mil. Imagínate jugar con 15 mil personas en la Primera B.

- Tienen que trabajar todos en conjunto para lograr el objetivo: la gente, los jugadores, la dirigencia...

- Si la dirigencia está bien con los jugadores y el cuerpo técnico, y viceversa, y todos somos un conjunto y trabajamos como tal, al final todo irá bien. Y por momentos, este año yo lo siento así. He hablado con la dirigencia, ahora que llegué en otro rol, completamente distinto. Cuando me fui, recién estaba empezando a ser considerado como referente, el 2016. Ahora vuelvo con otro rol, de ayudar a los más jóvenes, ser el vocero del camarín junto a (Luis) García, de hablar con los dirigentes. Si tú como jugador te llevas bien con ellos y con el cuerpo técnico y trabajan en conjunto, van a lograr muchas cosas, porque habrá un ambiente grato para trabajar.

"Lo mejor que pudo hacer (Daniel González) fue quedarse, retomar el nivel que lo llevó a la selección, el nivel que todos le conocemos acá".

"La Primera B es de un fútbol de lucha y mucha garra. A la gente de Wanderers le gusta ese fútbol, así que a nosotros nos viene bien".