Correo
Plaga
Somos como burros de porfiados. No podemos entender que el virus a nadie respeta. Las mascarillas no son suficientes para defenderse de este mal. Así, como procedemos, el día del níspero en la tarde nos libraremos del contagio. Las playas atestadas, todos sin mascarilla, se revuelcan en la arena, pensando que así, con el aire de mar, nada les va a pasar. En las noches, todos quieren bailar, se juntan treinta personas para pasarlo muy bien. Al otro día, quince personas están contagiadas de covid.
Si reaccionáramos racionalmente, otro gallo cantaría. En poco tiempo venceríamos a la famosa plaga.
Renato Norero V.
Fallo de la Suprema por toma
El reciente fallo de la Corte Suprema respecto de la toma ilegal de un terreno en Viña del Mar establece un precedente y jurisprudencia para casos futuros.
El fallo reconoce el derecho de propiedad del propietario, pero a la vez reconoce el derecho de permanencia en la toma ilegal a los usurpadores por motivos de necesidades sociales.
El fallo exige dar una la solución global y efectiva que debe ser coordinada por distintas instituciones, pero sin indicar las condiciones específicas y los plazos para ello.
Lo anterior en la práctica significa eternizar este tipo de conflictos y un incentivo adicional para las tomas ilegales de terrenos y otras propiedades sin ocupantes permanentes.
Por otra parte, las tomas ilegales precarizan el espacio urbano y la convivencia humana, dado que estos asentamientos carecen de las condiciones urbanísticas y viviendas que cumplan con las normativas, seguridad y habitabilidad mínimas necesarias para generar calidad de vida digna.
El fallo de la Corte Suprema es justo en su intención de salvaguardar los intereses y necesidades de ambas partes, pero es deficiente para la solución del conflicto.
Mauricio Moltedo M.
Diálogos para la educación
El futuro ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, conoce desde adentro el sistema educacional en Chile, ha participado en equipos que apoyan su desarrollo y es consciente de las brechas de acceso que actualmente existen en esta materia. Su trayectoria y conocimiento serán relevantes para poder enfrentar uno de nuestros grandes desafíos: abrir nuevas oportunidades para mejorar el acceso a la educación.
En este sentido, la tecnología, la innovación y la libertad se vuelven fundamentales a la hora de apostar por la diversidad de ofertas educacionales.
Quienes hace algunos años no podían acceder a la educación superior, hoy ven en la incorporación de las tecnologías que impulsan la educación online, un modelo que entrega oportunidades y accesibilidad, manteniendo la calidad y pertinencia necesaria para que las personas se enfrenten de mejor manera al mundo laboral.
Mantener este camino hacia la innovación será un desafío para todos los agentes del sistema educacional que, en diálogo con el futuro ministro, debemos trabajar para mantener la ambición de ir un paso más allá. Debemos seguir avanzando en la entrega de soluciones que inviertan en tecnología para llegar a todo Chile. Somos muchos los interesados en ser un apoyo en este desafío que mejora el acceso sin descuidar la calidad.
María José Gutiérrez Gerente general Grupo Enovus
Historia de la Copa Davis
La primera Copa Davis se disputó en 1900 entre EE.UU. y Gran Bretaña. Se llama Davis en honor de uno de los jugadores estadounidenses, que creó la forma de la competición y que ganó EE.UU. 3-0. Posteriormente, en 1905, gracias al éxito del torneo, invitaron a Francia, Austria, Bélgica y Australia. Ya para la década 1920 más de veinte naciones jugaban regularmente en la competencia. En 1927 Francia ganaba prestigio con sus jugadores Cochet y Lacoste.
En 1969, 50 naciones competían y en 1981se estableció el actual formato: las 16 mejores naciones disputan el título y el resto de las naciones, se dividieron en Grupos Zonales Regionales. En 1993 Copa Davis dio la bienvenida a 100 naciones y cerca del año 2000 celebró su centenario.
Casimiro Perocarpi
No más test
Una máxima tradicional en la atención médica es "no pedir exámenes que no se necesiten". Esto se pregunta cuando los resultados no ayudan al diagnóstico, tratamiento o cuando pueden confundir en relación a estos, generando además un gasto innecesario.
En la situación actual de la pandemia, la realidad es que las personas que llegan con sintomatología respiratoria tienen una alta probabilidad de padecer de COVID-19, tan alta, que el diagnóstico está suficientemente claro sin necesidad de realizar el test.
Lo que vemos actualmente es un colapso del sistema de atención en salud, que se produce por una alta demanda de personas asintomáticas o con muy pocos síntomas que buscan una RT-PCR, lo que puede invisibilizar o hacer esperar de forma innecesaria a la gente que realmente requiere una atención en salud. Al mismo tiempo, vemos un gran ausentismo laboral por una enfermedad que en esta etapa tiene un muy bajo riesgo clínico para la población.
Pensamos que la política de salud debiera estar destinada a los pacientes que requieran atención médica que puede cambiar su pronóstico y evitar el desgaste del personal de salud en una conducta que en esta etapa se puede considerar de bajo impacto sanitario.
Por otro lado, la probabilidad de contagio es tan alta que las estrategias de aislamiento son poco efectivas para evitar su diseminación. Desde el punto de vista epidemiológico, tanto la búsqueda como el aislamiento, se han transformado en medidas poco efectivas.
Mientras dure el predominio de esta variante, proponemos dejar de realizar tests diagnósticos para COVID-19 en la población ambulatoria, especialmente como estrategia de pesquisa activa, al igual que las medidas de aislamiento en personas con poca sintomatología o asintomáticos. Así optimizaremos la atención sanitaria a personas que realmente necesitan, lo que se podría reconsiderar ante un cambio en el comportamiento epidemiológico de la enfermedad.
Marcela Garrido Jefa Epidemiología U. los Andes