Katherine Escalona M.

Después de una larga espera finalmente hoy, a las 9.00 horas, comienza en el Tribunal Oral en lo Penal de Viña del Mar la audiencia de juicio oral que involucra a cuatro acusados- entre ellos, el "sicario" colombiano Víctor Gutiérrez Londoño- por el homicidio del empresario Alejandro Correa, de 60 años, que fue acribillado en la entrada de su casa en Bosques de Montemar, Concón, el 18 de mayo del 2020.

A casi dos años del hecho, hoy por hoy la familia deposita la confianza en la justicia e ineludiblemente la figura de Byron Castillo, joven camionero de 25 años, se hace presente porque él, al igual que Alejandro, murieron en manos de ciudadanos extranjeros que no habían ingresado de forma regular al país; por lo cual, el primer caso de crimen donde se involucra a un extranjero de forma directa, puede marcar precedente.

Así lo cree la hija de la víctima, Valentina Correa, que conversó con este Diario antes de la audiencia de juicio oral y recordó que Gutiérrez era prófugo de la justicia, recibió un pago para matar a alguien por encargo y hoy enfrenta un juicio oral por los delitos de homicidio calificado contra Correa; homicidio simple respecto a un amigo que estaba con la víctima el día del crimen; porte y tenencia ilegal de arma de fuego y de municiones; y receptación.

Los demás acusados por el caso son: Renato López como autor intelectual en el homicidio; Melissa Palma, expareja de Gutiérrez, por homicidio calificado en calidad de cómplice; y Claudio Riveros, conductor del colectivo que llevó a Gutiérrez a la casa de Correa, por el delito de homicidio simple como cómplice, receptación, y porte y tenencia ilegal de arma de fuego. Según la Fiscalía, el crimen se habría producido por una usurpación ilegal de un terreno que tenía el empresario en Quilpué, predio que aún tiene "tomas irregulares".

- ¿Cómo ven lo que está pasando en el norte de Chile? Lo pregunto, porque hay un ciudadano extranjero involucrado en la muerte de Byron Castillo como lo fue en el caso de tu padre, donde hubo un ciudadano colombiano que actúo, según la Fiscalía, como "sicario".

- Sin ánimo de tener un discurso antimigratorio, tampoco se puede desconocer que efectivamente en el último tiempo han llegado personas en situación de migración irregular que claramente tienen antecedentes previos y no cualquier antecedente. La persona que mató a mi papá, este ciudadano colombiano, por la manera que cometió el delito, nos da todas las luces de que es una persona que había cometido este delito, había matado a otra gente previamente. Es como un delito importado y uno se pregunta ¿cuántos Víctor Gutiérrez están libres? Entender que, además, esta persona no solamente había pasado por un paso no regular, sino que había estado frente a la justicia por otros delitos, incluido un homicidio frustrado y estaba prófugo de la justicia. Entonces también esa es una situación que yo pensaba que era muy excepcional y a raíz de los últimos hechos me doy cuenta que no lo es. Entendiendo que el caso de mi papá es emblemático por varios factores, uno de ellos es que lo mata alguien que estaba prófugo de la justicia. Uno se pregunta ¿qué acciones ha hecho el Estado de Chile en ser más activo para detener a las personas que están prófugas de la justicia por delitos violentos?

- El caso de tu papá puso en agenda el tema de los migrantes y la poca regulación. ¿Qué sientes al ver lo que está ocurriendo?

- Siento frustración, siento también mucha empatía por las familias que han vivido situaciones similares a la nuestra, sabiendo que esto se podía haber prevenido con alguna regulación más fuerte por parte del Gobierno y las instituciones encargadas. Sí, lo veo con preocupación y veo que estamos en una escala muy ascendente, muy rápida, especialmente por el tema de los homicidios. No solamente están originados por personas migrantes, pero lo que sí he visto es el alza de la tenencia de armas que, creo, es algo que está fuera de control.

Marcar precedente

- Sabemos que será un juicio oral largo con mucha presentación de prueba de las partes involucradas. ¿Qué esperan del proceso?

- Esperamos en primer lugar que se haga; luego que se cumpla en tiempo y forma, que no se extienda más allá de 40 días y que la sentencia vaya acorde a la acusación que presentó nuestra familia y la Fiscalía. Que esto le entregue una señal a la ciudadanía que también está mirando este caso. Nosotros estamos en etapa de juicio, pero hay familias que están pasando por esto recientemente y esto va a marcar un precedente. Acá el Poder Judicial tiene una oportunidad tremenda para decir que no hay oportunidad para el crimen organizado y que nuestras policías están preparadas para este tipo de investigaciones, que en el caso de nosotros ha sido tan compleja y se pudo establecer la figura de un actor intelectual.

- Ha sido una larga espera

- Sí, han pasado casi dos años, entonces estamos - por un lado- esperanzados por el proceso que se viene, porque es un proceso que ha sido muy largo y lo que esperamos es que sea el inicio de un juicio transparente, donde se demuestre el buen trabajo que ha hecho la Fiscalía, las policías, y que logre la culpabilidad de las cuatro personas que están imputadas en este delito y se entreguen las penas más altas que entrega nuestro Código Penal. Y que no haya más retrasos, porque es un juicio que nos ha costado mucho.

- Tal como lo dices, lamentablemente en las últimas oportunidades se han reprogramado las audiencias. Como familia ¿cómo han visto este proceso?

- La verdad es que lo que nosotros hemos vivido tiene mucha incertidumbre. Uno porque es una situación absolutamente sorpresiva, violenta y el proceso de justicia también ha sido lento y entorpecido; entonces, el hecho de que nos hayan postergado varias veces las audiencias hace que no nos permita cerrar esta etapa del duelo y poder concentrarnos en la ausencia, en la pérdida, en la nostalgia que es perder a alguien que tú quieres y estar enfocado qué es lo que pasa con la justicia. Cuando uno busca este proceso de justicia, lo que busca es un reconocimiento a tu dolor, a la verdad, y también de que haya una sentencia, un castigo a quienes cometen estos delitos. Si bien, ahora tenemos fecha, yo hasta que no se resuelva mañana (hoy), hasta que no comience, no lo doy por seguro, entendiendo que estamos en una situación de pandemia, que cualquier caso de covid, cuarentenas, podría volver a retrasarlo.

- Al parecer ya están notificadas las partes, los acusados y habría problemas de cuarentena, como dice, en la Cárcel de Valparaíso. ¿Esa situación complica el tema?

- Claro, me tiene en alerta y hasta que yo no vea que comience no voy a estar tranquila. Si mañana (hoy) se posterga porque hay una cárcel en cuarentena, que entiendo que es la de mujeres, después podría ser la de hombres, o la de Los Andes, porque los imputados están en diferentes cárceles. Entonces, siento que es como un agujero negro que no termina nunca y ahí lo que uno esperaría - dado que es una situación de pandemia que llevamos dos años- que el Poder Judicial también tenga resuelto esto, porque si no hay síntomas o riesgo debería haber un aislamiento para que las personas pudieran tomar las audiencias por Zoom.

- ¿Cómo han sido estos dos años?

- Han sido bastante difíciles, porque por un lado hemos sentido como un abandono del Estado, especialmente en la arista de los terrenos. Y no es que el terreno en sí sea importante, pero uno espera que cuando una familia es víctima de un crimen tan violento las cosas se resuelvan y el Estado tome un rol más protagónico y te apoye, pero nosotros nos hemos valido con nuestras propias manos, nuestro apoyo sicológico lo hemos buscado. Si no tuviéramos una red de amigos y familiares tan bonita y tan presente, claramente que este proceso hubiese sido más difícil. Han sido dos años donde a nosotros no solamente nos mataron al pilar de nuestra familia, sino también tuvimos que hacer abandono de una ciudad en la cual vivimos 25 años, perdimos a mi papá, perdimos también nuestra ciudad, nuestro lugar y quedaron muchas (heridas) abiertas en donde no sentimos el apoyo del Estado presente y activo. Si debo reconocer que el trabajo de la Fiscalía en la arista del crimen ha sido bastante prolijo y en esa parte yo me siento bastante confiada.

- ¿Se tuvieron que ir de Concón, perdieron su casa y tuvieron que comenzar nuevamente?

- Sí.

"Tampoco se puede desconocer que efectivamente en el último tiempo han llegado personas en situación de emigración irregular que claramente tienen antecedentes previos".

"