Unión Europea no aceptará restricciones a derechos ciudadanos por reglas anticovid
BRUSELAS. En medio de un debate por el impacto de la contingencia sanitaria en el Estado de derecho, la organización aseguró que las limitaciones deben ser proporcionales y acotadas en el tiempo, sin afectar la legislación vigente.
La Comisión Europea (CE) dijo que no dudará en intervenir si las restricciones que imponen los Estados miembros para frenar el covid-19, afectan a los derechos fundamentales de los ciudadanos, que en algunos casos se han visto limitados durante la pandemia por las medidas adoptadas por los gobiernos.
"Como guardiana de los tratados, la Comisión no dudará en actuar si es necesario y si hay restricciones no justificadas o desproporcionadas que afecten a los derechos fundamentales recogidos en la Carta" de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea, dijo la vicepresidenta de la CE responsable de Valores y Transparencia, Vera Jourová, en el pleno del Comité Económico y Social Europeo (CESE).
La Comisión Europea es una de las siete organizaciones de la Unión Europea y está a cargo del Poder Ejecutivo y de proponer la legislación, además de defender los tratados de la Unión.
La institución debatió sobre el impacto de la contingencia sanitaria en el Estado de derecho en la EU y en el futuro de la democracia.
"Hemos visto que los países miembros declararon estados de emergencia o adquirieron poderes especiales para proteger la salud pública. Esta suspensión del equilibrio de poder nacional puede plantear problemas en materia de respeto del Estado de Derecho", advirtió la comisaria.
Jourová recordó que desde el inicio de la pandemia los países de la Unión Europea han adoptado medidas de excepción que han resultado en la restricción de derechos fundamentales como las elecciones justas, el debate democrático o las libertades de movimiento, expresión, reunión, culto, de empresa y de protección de datos, entre otros.
La también vicepresidenta de la Comisión insistió en que las restricciones tienen que reservarse a lo "estrictamente necesario y proporcionado" dentro de un tiempo limitado y deben respetar tanto las garantías constitucionales nacionales como las normas europeas e internacional.
Recalcó que aunque las medidas de emergencia sean necesarias, los Gobiernos deben garantizar que sean objeto de escrutinio parlamentario regular, en consonancia con el respeto a los poderes democráticos.
"Muchas medidas de emergencia son competencias de los Estados miembros. En estas situaciones no se aplicaría la Carta de los Derechos Fundamentales de la UE, pero sí se debe respetar de acuerdo con sus constituciones nacionales y con los compromisos alcanzados internacionalmente en materia de derechos humanos", añadió.
En este sentido, Jourová aseguró que el Ejecutivo comunitario seguirá "muy de cerca" la implementación de las medidas de emergencia y su impacto en los derechos fundamentales hasta que la situación epidemiológica permita la derogación de todas las medidas de emergencia y el retorno a un "equilibrio de poderes normal".
Las crisis derivadas de la pandemia, añadió por otra parte Jourová, también han agravado las "desigualdades raciales y estructurales preexistentes" con consecuencias que podrían tener un impacto más allá de la conclusión de la pandemia.
La Comisión Europa ha adoptado además medidas sobre la diligencia debida de las empresas en materia de derechos humanos y sostenibilidad. A las empresas se les va a exigir que determinen, prevengan, atajen o mitiguen los efectos adversos de sus actividades en los derechos humanos y en el medio ambiente.
En casos de trabajo infantil, explotación de trabajadores, contaminación, etc.