Próximas elecciones de rector en la PUCV
Los dos vicerrectores, Joel Saavedra y Nelson Vásquez, competirán este jueves por suceder a Claudio Elórtegui de cara al centenario institucional. ¿Cuántos fueron capaces de descifrar esa rabia que se paseaba por las calles de nuestras ciudades y que luego derivaría en uno de los principales quiebres democráticos de nuestra historia?
Este jueves 31 de marzo la totalidad de los profesores jerarquizados de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso concurrirá a las urnas para votar por un nuevo rector que, tras la aprobación por parte del Vaticano al nombre enviado por el Gran Canciller, el obispo Jorge Vega, guiará las riendas de la principal casa de estudios de la Región por el próximo cuatrienio, tras los exitosos y celebrados tres períodos del actual mandamás, Claudio Elórtegui Raffo, quien ocupa el sillón de la Av. Brasil desde abril del año 2010, cuando sucedió a Alfonso Muga.
En los citados tres mandatos de Elórtegui, el economista se apoyó en dos nombres clave para el desarrollo de la PUCV en todas las variables posibles: uno de ellos fue el historiador Nelson Vásquez Lara, vicerrector Académico, y el segundo, el físico Joel Saavedra Alvear, vicerrector de Investigación y Estudios Avanzados, quienes lo acompañaron durante la intensa docena de años.
De generaciones cercanas (Vásquez, de 1967; y Saavedra, de 1970), ambos contribuyeron desde sus disciplinas a muchos de los logros que puede mostrar hoy la PUCV, entre ellos y solo por nombrar algunos, su última acreditación por el máximo de siete años hasta 2029, el impresionante despegue y crecimiento en infraestructura, acaso el mayor de su historia, la consolidación financiera, el relevante rol que ha tomado la investigación a nivel país y el liderazgo universitario mostrado no solo desde el G9 o el CRUV, sino también en el farragoso día a día de los convulsos últimos años de la sociedad chilena.
Los desafíos hoy son muchos. La alta vara dejada por Elórtegui, Alfonso Muga y Bernardo Donoso no es solo testimonial, sino que coincide con el centenario de la universidad del año 2028 y la relevancia y compromiso que debe necesariamente tener la academia con la sociedad. Cuando hace algunos años hablábamos de ese eufemismo llamado vinculación con el medio, ¿cuántos -incluyendo a diversas instituciones, medios de comunicación o universidades- fueron capaces de descifrar esa rabia que se paseaba por las calles de nuestras ciudades y que luego derivaría en uno de los principales quiebre democráticos de las últimas cinco décadas de historia?
Llegó el minuto, como tantas veces antes, de que la PUCV asuma su responsabilidad de liderar los cambios del nuevo siglo, como alguna vez lo hiciera para la Reforma Universitaria de 1967, la recuperación de la democracia de fines de los ochenta o para ese farol de innovación que sigue siendo la primera transmisión televisiva de UCV-TV en 1959. Desde sus aulas han egresado muchos de los actuales líderes políticos de creciente relevancia, incluyendo al actual alcalde de Valparaíso y otras figuras de renombre. Su marcada internacionalización y el despegue de su Centro de Formación Técnica deberán ir de la mano de la adaptación a los nuevos tiempos por parte del nuevo rector. No es poca cosa, pero tampoco es posible exigirles menos.