Cristián Rojas M.

Nada quietas están las aguas al interior de la Democracia Cristiana, luego de que se publicara en la prensa que el partido estaría al borde de la quiebra, dado que el Servel les está reteniendo los aportes fiscales debido a observaciones no resueltas del último balance financiero, por lo que desde enero apenas suman poco menos de $20 millones que han entrado a sus arcas, mientras los gastos operacionales se elevan a casi el doble de esa cifra mensualmente.

La actual directiva de la colectividad, encabezada por el alcalde de La Granja, Felipe Delpin, apunta a la pasada gestión de Fuad Chahín como presidente del partido en los años 2020 y 2021, y en el último Consejo Nacional incluso se analizó la opción de judicializar la venta de algunos bienes inmuebles durante el periodo de Chahín, pues además consideran que se vendieron por un valor muy bajo.

A ello se suma la disminución de aportes fiscales debido a la merma que sufrieron en su representación parlamentaria en las últimas elecciones, donde sus diputados bajaron de 14 a ocho.

Chahín retruca

El expresidente de la DC y único miembro del partido en la Convención Constitucional, Fuad Chahín, expuso que "cuando yo tomé el partido me tocó asumir una disminución de los ingresos fiscales a la mitad, el 50%, y sin embargo, a pesar de esa disminución drástica por el resultado de la elección parlamentaria del 2017, logramos tener un plan de gestión de inmuebles que fue aprobado por el Consejo y por la Mesa Directiva, lo que nos permitió contar con recursos".

El convencional hizo notar que "después de que yo partí, la expresidenta interina (Carmen Frei) tomó la decisión de suspender ese plan que fue aprobado por la mesa y el Consejo, y Felipe Delpin, curiosamente, era miembro de la Mesa y respaldó ese plan votando favorablemente. Pero además se despidieron personas sin pagarles las indemnizaciones, lo que se ha traducido en juicios laborales y embargos al partido".

Asimismo, planteó que "el mal resultado de la elección del 2021, con la presidenta interina Carmen Frei a la cabeza, y Felipe Delpin todavía en la mesa directiva, significó una disminución aún mayor de los recursos".

A su juicio, esto podría deberse a que "no quieren pagar los costos políticos con decisiones que son difíciles, como la venta de algunos inmuebles, pero es la única manera de financiar el partido y así tuvimos que hacerlo nosotros". Con respecto a las dudas planteadas por los actuales dirigentes del partido sobre el bajo valor en que se vendieron algunas propiedades en el periodo en que Chahín estaba al mando de la DC, éste explicó que "los valores de las propiedades están establecidos con tasaciones, la Ley de Partidos Políticos no permite vender ni bajo el valor de la tasación ni sobre el valor de la tasación, porque si tú lo vendes bajo el valor podría haber un detrimento, y si lo vendes sobre el valor, podría haber financiamiento ilegal de la política".

Crisis no llega a la región

En tanto, en el plano local el presidente regional de la Democracia Cristiana, Alex Avsolomovich, aseguró que "el tema no es personal con nadie, el tema responde fundamentalmente a que el partido ha ido bajando su votación paulatinamente y no se ajustó a la nueva realidad económica en los últimos años, entonces cuando se tiene una caja con menos ingresos y se gasta más que los ingresos, se produce una crisis".

Añadió que "ésta es una crisis muy temporal, porque el partido tiene bastantes bienes raíces" y aseguró que en la Región "lo tenemos todo solventado adecuada y ordenadamente, acá no tenemos problemas económicos mayores y nos hemos ajustado a nuestra realidad desde hace mucho tiempo, así que no veo en esto un motivo de real preocupación".

"El partido ha ido bajando su votación paulatinamente y no se ajustó a la nueva realidad económica en los últimos años".

Alex Avsolomovich, Presidente regional de la DC

"Se ha agudizado la crisis debido a la incapacidad, la inoperancia, la inacción que se ha vivido en el último año".

Fuad Chahín, Expresidente nacional de la DC