Everton gana en Perú y se mantiene con vida en la Copa Sudamericana
FÚTBOL. El equipo viñamarino, diezmado por cinco casos de covid, triunfó 2-0 ante Ayacucho en El Cusco. Sao Paulo recibe hoy a Wilstermann: si gana, clasifica a la siguiente fase.
Un par de horas antes del partido contra Ayacucho en Cusco, por Copa Sudamericana, Everton informó de dos jugadores del plantel contagiados con covid. Antes de viajar a Perú, el plantel viñamarino sufrió otras tres bajas por la misma razón.
Pero pese a las ausencias, a la dosificación que determinó el técnico Francisco Meneghini y a jugar en una cancha ubicada a 3.362 metros sobre el nivel del mar, los oro y cielo consiguieron un triunfo con ribetes de hazaña.
Los de Viña del Mar siguen vivos en el torneo, a la espera del resultado de hoy entre Sao Paulo y Wilstermann en el estadio Morumbí. Si el Tricolor logra ganar, avanza de fase como único clasificado, sin embargo un empate o derrota de los brasileños extendería todo hasta la última fecha del Grupo D, cuando el equipo de Rogerio Ceni recibe a los peruanos y los auriazules visitan al once aviador.
Más allá de lo que pase en la definición de la serie, el desempeño de los evertonianos en el certamen es digno de elogio: jugaron en serio, pese a tener al lado a un gigante de Sudamérica, que probablemente sea quien pase a la siguiente etapa.
Anoche en el estadio Inca Garcilaso de la Vega, Meneghini decidió cuidar sus piezas más valiosas y además se vio obligado a utilizar a jugadores que no habían tenido regularidad, como López y Moya. También apostó por ubicar al lateral John Salas de zaguero central, una posición que no conoce a cabalidad. En la emergencia, el ex Coquimbo cumplió, pese a los ripios lógicos que se esperan por la nueva función que se le encomendó.
Aprovechando la improvisación en defensa, Ayacucho trató de aprovechar la estatura de sus delanteros para inquietar en la primera fracción. Claramente el juego aéreo de Echeverría y Oyarzún se echó de menos en Cusco.
Sin embargo, cuando fallaba la zaga, De Paul cumplía: paró un testazo de Parodi y sacó al córner un tiro envenenado de Chávez.
La decisión de "Paqui" de quemar naves en el complemento, con los ingresos de Di Yorio y Madrid, fue acertada. Pese a que de entrada Olascuaga casi sorprende en dos oportunidades, de a poco la cancha se inclinaba en favor del visitante.
Un pase filtrado de Adrián Sánchez para Di Yorio apuró a Vidal y a Quina, que se equivocaron dejándole el gol servido al evertoniano.
Ya con Juan Cuevas en la cancha las cosas se pusieron más complicadas para Ayacucho. El argentino puso un pase para el lungo centrodelantero oro y cielo, quien como virtual puntero derecho centró para Matías Campos, que de primera mandó el balón al fondo de las mallas.
El cuadro auriazul manejó la ventaja y pudo convertir incluso un gol más (también pudo descontar el local, sin embargo De Paul de nuevo estuvo atento sacándole dos pelotas a Royón y otras dos a Romani). Pero la tarea ya estaba hecha y pase lo que pase hoy en Morumbí, Everton puede decir que no fue comparsa.
"Más allá de que ellos tuvieron chances, nosotros tuvimos muchas, marcamos dos goles y podríamos haber hecho alguno más".
Francisco Men eghini, DT de Everton
3.362 metros sobre el nivel del mar está ubicado el estadio Inca Garcilaso de la Vega, donde ayer jugó Everton.
20.30 horas juegan hoy, en el estadio Morumbí, Sao Paulo y Wilstermann. Si los brasileños ganan, clasifican.
"