Niña víctima de violación logró interrumpir su embarazo tras escándalo judicial en Brasil
POLÉMICA. Jueza presionó a pequeña de 11 años para que no se sometiera al procedimiento y la mandó a una casa de acogida para evitarlo, aunque es legal.
La niña de 11 años que quedó embarazada producto de una violación en Brasil pudo abortar en un hospital público del país, después de semanas de dilación por la negativa de una jueza a autorizar el procedimiento, que está amparado por ley para este tipo de casos, lo que provocó el rechazo del Presidente Jair Bolsonaro, quien dijo que lo ocurrido fue "inadmisible".
El Hospital Polydoro Ernani de Sao Thiago, en la ciudad de Florianópolis, "adoptó todas las providencias para la interrupción de la gestación de la menor", informó el Ministerio Público Federal, que añadió que la niña está bien.
El caso salió a la luz después de que el portal The Intercept Brasil divulgara el contenido de la audiencia en la que la jueza Joana Ribeiro, con apoyo de la fiscal Mirela Dutra, presionaron a la niña para que tuviera el bebé y lo diera en adopción.
"¿Soportarías un poquito más?", le preguntó Ribeiro a la niña, que entonces estaba con más de 20 semanas de gestación, en esa audiencia celebrada en mayo pasado, según recogió la investigación. La jueza alegó que dar luz verde a un aborto a esas alturas de gestación sería un "homicidio", a pesar de que la víctima tenía derecho al mismo, y además determinó el ingreso de la niña en una casa de acogida para evitar que lo hiciera.
Fin del caso
El asunto terminó en manos de la Justicia después de que el citado hospital de Florianópolis se negara a interrumpir en un primer momento el embarazo porque contrariaba sus protocolos internos. Pero el Ministerio Público Federal recomendó al hospital que cumpliera con la ley, ya que "el aborto legal no necesita autorización judicial".
El caso de esta niña de 11 años tuvo una gran repercusión en redes sociales y fue comentado por algunos políticos, como el diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien dijo que "la jueza de SC (Santa Catarina) tiene razón" porque "el bebé podría ser entregado en adopción".
El gobernante expuso que "no se discute la forma en que fue generado, (o) si está o no respaldado por la ley. ¡Es inadmisible hablar de quitarle la vida a este ser indefenso!".
20 semanas de embarazo tenía la niña cuando asistió a la audiencia. Pasaron cinco semanas más antes del aborto.