Un episodio bastante polémico se vivió en los últimos días en la coalición gobernante, luego de que los senadores socialistas Alfonso de Urresti y Fidel Espinoza acusaran al ministro Secretario General de la Presidencia, Giorgio Jackson, de estar más preocupado por la "destrucción de instituciones democráticas", a propósito de la discusión en torno al fin de la Cámara Alta -propuesta en el borrador de nueva Constitución-, en desmedro de la agenda de seguridad y orden público del Ejecutivo.

Pese a lo bullada de esta situación, que se suma a las discrepancias que hubo hace unos meses cuando se dio urgencia al proyecto de indulto a los "presos del estallido", la nueva presidenta del Partido Socialista, Paulina Vodanovic, se reunió con el secretario de Estado y dio por cerrado el impasse. "Todos los parlamentarios socialistas están preocupados de colaborar con el gobierno y tener un diálogo más fluido con el ministro de Segpres", asevera.

Vodanovic, abogada y exsubsecretaria de Fuerzas Armas, no ha escondido las discrepancias que existen en el oficialismo e incluso ha apuntado que hay diferencias políticas entre la tienda que lidera y Apruebo Dignidad. Así y todo, sostiene que "las diferencias de opinión no llevan a confrontación. Creo que la diversidad de partidos políticos que sustentamos al gobierno es evidente, pero eso no quiere decir que no haya una unidad por los objetivos y grandes desafíos que tiene este gobierno".

Por otra parte y mirando de reojo el plebiscito -elección donde ella fijó uno de sus principales desafíos al asumir la dirección del PS, comprometiéndose a apoyar el Apruebo-, la jurista detalla que "nuestra militancia, las bases en las comunas, ya están todas trabajando por esta opción, dado que hay que informar a la ciudadanía sobre el cambio que significa pasar de un Estado subsidiario a un Estado democrático de derecho. Necesitamos que la ciudadanía entienda que para los cambios y las transformaciones que se han pedido por tantos años y de los cuales los socialistas hemos llevado estas banderas desde hace mucho, para hacerlos realidad, se requiere una nueva Constitución".

"Los cambios que exige la ciudadanía vienen de largo tiempo. Esto no se traduce solamente en el estallido social. Creo que la ciudadanía ha pedido fortalecer el Estado y se ha dado cuenta hace largo tiempo que este no satisface las necesidades básicas y por lo tanto, esto es lo que podemos hacer una vez que la Constitución cambie. Muchas veces dicen "no, esto no depende de la Constitución", pero hemos visto cómo el Tribunal Constitucional ha estado en contra de ciertas normas, hemos visto los altos quórum de reforma que no permitieron cambiar lo esencial de la Carta Magna de 1980", complementa.

Asimismo, defiende la elección de Eduardo Bermúdez como vicepresidente del partido, pese a haber sido jefe de gabinete del exalcalde de San Ramón, Miguel Ángel Aguilera, quien se encuentra en prisión preventiva, investigado por delitos de corrupción. "Soy abogada y como tal, seré la primera -y lo dije el día que asumí- en denunciar si es que hubiera faltas a la probidad o cualquier otro tipo de situación que pueda ser considerada un delito, pero lo que no podemos hacer es juzgar por la prensa a personas que nos están siendo investigadas ni han sido citadas por los tribunales", sostiene.