"En la Convención no tuvimos mayor oportunidad de expresarnos"
Como una inédita señal de descentralización, por primera vez en su historia y tras dos años suspendida debido a la pandemia, la Comunidad Judía de Chile realizará hoy, a las 19.30 horas, en la sinagoga de Viña del Mar, el tradicional acto ecuménico y republicano "Tefilá por Chile".
De esta manera, altas autoridades nacionales y religiosas darán inicio a la celebración de Fiestas Patrias desde la Ciudad Jardín, por medio de una oración que rezará por el bienestar nacional. Desde el Gobierno confirmaron su participación la ministra de la Secretaría General de la Presidencia, Ana Lya Uriarte, y el titular de Desarrollo Social, Giorgio Jackson.
Por su parte, el presidente de la colectividad, Gerardo Gorodischer, adelantó algunos temas que abordará durante su discurso en el solemne acto. También analizó el proceso constitucional y las relaciones institucionales de la Comunidad Judía de Chile con el Gobierno.
- ¿En qué va a consistir el acto?
- Hace más de 10 años, todos los septiembre llamamos a una oración, la Tefilá por Chile. En el fondo, a rezar por el país y sus gobernantes es un momento de encuentro entre los distintos representantes y la comunidad judía.
Presencia en regiones
- ¿A quiénes invitaron?
- Están invitados desde el Presidente hacia abajo. El Presidente no va a asistir. Hay ministros invitados, diputados, senadores, alcaldes. Es un encuentro interreligioso, por lo que también están invitados miembros de otras iglesias y credos que hay en Chile.
- ¿Usted pronunciará un discurso?
- Mi discurso va a relevar todo lo que han hecho los judíos en Chile a lo largo del país y un par de párrafos que habla del momento que se está viviendo. Básicamente de respeto a nuestras diferencias y lo que se quiere aportar a los destinos de Chile para trabajar juntos.
- ¿Otros temas que va a destacar sobre el contexto nacional?
- Tienen que ver con el diálogo, el respeto a la diversidad, con crear un mundo y país mejor. Tener empatía y garantizar la paz social.
- ¿Por qué razón se está celebrando en Viña del Mar?
- Es una señal importante de descentralización. Parte importante de la comunidad judía en Chile se concentra en Santiago, pero también hay ciudades del país que tienen miembros de nuestra comunidad y hay instituciones. Era importante demostrar nuestra presencia en Chile.
- ¿Hay un sello especial para la ceremonia?
- El hecho de que estemos en Viña del Mar demuestra un importante apoyo a la región y a valorar el quehacer de los judíos en Chile, con una vasta historia desde Arica a Punta Arenas.
Chile nos necesita
- ¿Cómo vieron el trabajo de la Convención Constitucional?
- La comunidad judía en Chile es diversa, pero siempre estamos por el diálogo, mecanismos sin violencia, la paz y trabajar en conjunto, porque sí podemos tener diferencias, y es bueno que las hayan, pero es importante trabajar en lo que nos une, porque Chile nos necesita a todos, y dejar la violencia de lado. Tenemos una segunda oportunidad, no sé si va a haber otra, pero se ha ido madurando para poder generar una nueva Constitución que tenga un consenso mayoritario.
- ¿Fueron escuchados por los constituyentes?
- Estuvimos con la presidenta de la Convención, la señora Loncon. Sí hubo diálogo, pero no nos escucharon mucho. A pesar de que fuimos con un planteamiento de colaboración, estar abiertos y disponibles, nosotros, como comunidad, no tuvimos mayor oportunidad de expresarnos. Lamentablemente, hubo una distancia importante, no recogieron todas las opiniones, tampoco dieron espacios para poder presentar y valorar algunos puntos.
Sin ánimo de odio
- ¿Esperan un mayor acercamiento en esta segunda oportunidad?
- Con gente experta, con ponderación y responsabilidad, sin el ánimo de odio y discriminar a nadie. Tratar de unir a todos, así vamos a tener una buena Carta Magna, la cual debería representarnos a todos. En ese sentido, obvio vamos a estar dispuestos a aportar y hacer ver nuestros puntos en la medida que sea posible.
- ¿Qué temas debería abordar?
- La incitación al odio y la violencia. De alguna manera, el tema del antisemitismo, que es una forma de discriminación, no necesariamente con la palabra misma. El tema del aborto es una situación. El judaísmo lo permite bajo tres causales, que son muy parecidas a las que existen hoy día en Chile.
-¿Cómo ha sido la comunicación el Gobierno?
- Hemos tenido con algunas personas una buena llegada; con otras, lamentablemente, no hemos podido cruzar esa barrera.
- ¿Autoridades?
- Autoridades. Había una tradición, esto no es para quejarse, entendemos cuáles son las diferencias. Hay una tradición que nosotros siempre íbamos a saludar al Presidente electo o después cuando asumía y la verdad es que no hemos tenido la suerte de poder ir a saludarlo, ofrecerle nuestros respetos y toda la colaboración.
Posición del presidente
- ¿Esperan aún ese encuentro?
- Sería un honor poder ofrecerle todo lo que podemos hacer. El problema es que la posición del Presidente con respecto Israel es bastante compleja, no tiene claro la forma de cómo nos relacionamos con Israel. Somos chilenos judíos, votamos acá. Él tiene un tema; además, debe tener presiones por otros lados, la ultraizquierda nunca ha sido muy amiga de Israel, entonces tendrá sus restricciones.
- Hace un tiempo tuvieron un impasse con el municipio de Viña del Mar por el Festival Puerto Ideas.
- No es un impasse nuestro, es entre la organización de Puerto Ideas y Viña del Mar. Un par de diputados aprovecharon la oportunidad y no lo van a reconocer, fue una cosa contra el Estado de Israel, de parte de las autoridades del municipio, la jefa de gabinete o una de las personas es la hermana del diputado Brito, de los grandes promotores dentro de la Cámara de todas las resoluciones contra Israel.
"Nosotros siempre íbamos a saludar al Presidente electo o después cuando asumía y la verdad es que no hemos tenido la suerte de poder ir". "Estuvimos con la presidenta de la Convención, la señora Loncon. Sí hubo diálogo, pero no nos escucharon mucho".