EN LA VIÑA DEL SEÑOR El rinconcito de la consentida
POR GABRIELA CHOMER GABRIELA CHOMER
La situación económica, bien lo sabemos, no es nada fácil. Ya sea por la guerra en Ucrania, el murmullo constituyente o las cosas del fútbol, encontrar pega se ha tornado una hazaña no menor. Díganmelo a mí que de antes del estallido social que intento abandonar el periodismo y esta cárcel de cristal que es el famoso rinconcito de la consentida, que a todo esto es puro nombre, porque de consentida la verdad es que tampoco tengo mucho.
Dicho eso, y como una es muchas cosas pero jamás rencorosa, claro que me alegra saber que otros tienen mejor suerte que una. Ya lo sé. Muchos dirán que nuestro invitado de hoy fue "enchufado" en su nuevo rol por el diputado de Revolución Democrática, Jorge Brito, solo por ser el pololo de su hermana, Camila, que a todo esto también trabaja en el municipio, pero como bien dijo la alcaldesa Ripamonti, "por méritos propios".
Les hablo del guapetón Juan José Gonzalo Solari Chávez, actual bombero de la Octava Compañía de Viña y exvendedor de VTR en la Avenida Pedro Montt, y de departamentos en una inmobiliaria familiar, quien -tras un largo y diligente proceso de selección, según cuentan con abominable ironía desde el propio municipio- es el flamante coordinador de Dirección Comunal y asesor de Seguridad Pública en la Municipalidad "de los Cuidados" de Viña del Mar.
También es importante destacar en su currículum que por un buen tiempo le pituteó a su cuñado parlamentario en la Cámara de Diputados, cobrando un honorario de $400.000.
Pero buscarle un puesto no fue fácil, porque primero había que ver dónde se instalaba. El perjudicado fue Álex Barrientos Garín, quien debió ser reubicado en la Dirección de Gestión de Riesgos de Desastres. De esta manera le generaron el cupo a Solari, y pudo llegar sin complicaciones a la Municipalidad.
Los funcionarios antiguos de Arlegui bautizaron a Camila Brito Hasbún, famosa por su "no" al Festival Puerto de Ideas por sus vínculos con Israel y consanguínea del diputado de Revolución Democrática, como la "hermanísima". Ahora, y en esto sabemos que un funcionario herido no es muy creativo, resulta que al enchufar a su novio Gonzalo Solari, éste pasó a ser el "cuñadísimo", generando mucha tensión en diferentes entornos, pues pareciera ser que llegó con el pie izquierdo, llevándose mal con más de alguno.
Otra arista del arribo del asesor de Brito, según fuentes del municipio, es que viene a realizar "marcación personal" a la actual directora de Seguridad Pública, Amal Kdiemati, la del famoso viajecito a Europa en plena crisis de seguridad, quien mantiene una buenísima relación con el abogado Janna Sakalha, quien ingresó a la lista negra de la dupla Ripamonti-Brito, y quien además se fuera de mala manera del municipio.
Quien también sigue en el municipio viñamarino es la pareja del propio Sakalha, Camila Isaac Faura, quien permanece en Comunicaciones.
Ahora que se acerca final de año, y se deben renovar los contratos de quienes no estén en la planta funcionaria, seguramente comenzará a realizarse una verdadera caza de brujas, entre los leales a Ripamonti y los viudos de su exhombre fuerte. También se produce una bonita oportunidad para Jorge Brito, quien puede seguir instalando a su círculo de colaboradores, amigos y parientes en la gigante Municipalidad de Viña y así poder avanzar en su afán de ser candidato a senador y desbancar a su compañero de partido Juan Ignacio Latorre.
Desde el propio Concejo Municipal reclaman que ya es insostenible este modelo de los contratus parentelis (en latín), pero lo más grave es que estos parientes no llegan solos, sino que vienen acompañados por sus parejas y estas parejas llegan empoderadas y se ponen creativas, incluso pasándole máquina sus propias jefaturas.
Al parecer en Viña pasamos de ser un Municipio de Cuidados, a un Municipio de Enchufados, juego de palabras que puede no ser muy gracioso, pero por Dios que resume bien la rasquería actual.
Y yo que decía que la Manam había dejado la vara "alta"...