Estacionamientos y el aumento de la demanda
Debido al crecimiento del parque automotriz, la disponibilidad de espacios en Valparaíso ha caído en un 26%, creando un problema urbano. El estudio mencionado y la simple observación del movimiento en nuestras calles dan cuenta de una realidad urbana que ofrece oportunidades para mejorar la oferta de parqueaderos.
Un estudio realizado por la empresa Prop-Tech y Tango Rent confirma una realidad presente en la ciudad de Valparaíso, la baja disponibilidad de estacionamientos para vehículos. Esta situación tiene su origen principalmente en el aumento del parque automotriz y en las variaciones de las condiciones de trabajo, especialmente el remoto, según afirma Valentina Pardo, ejecutiva de la empresa señalada. La disposición de esos espacios ha caído en un 26 %, a lo cual lógicamente se suma un aumento en el precio de los arriendos ante el crecimiento de la demanda. Así, Valparaíso es una de las comunas con mayor reducción de la oferta en el país, sólo superado por Las Condes, Providencia y Ñuñoa, cercanas al 50%. Determina el estudio que mientras los espacios disponibles en Valparaíso para arriendo en 2021 eran 1.481 unidades, el año actual solo llegan a 1.094. En estas cifras no se consideran los estacionamientos regulados en las calles, donde el pago es por tiempo de ocupación ocasional.
Se da el caso, precisa Valentina Pardo, que "si antes un edificio contaba con el 10% de sus estacionamientos disponibles, eso ya no existe, porque el propietario se compró un auto y necesita el estacionamiento o ya está arrendado".
A lo anterior se debe sumar la preferencia por usar el automóvil particular debido a la mala calidad y poca seguridad del transporte público, por lo cual residentes en otras comunas que trabajan en Valparaíso buscan un espacio permanente para su vehículo. Asimismo, la incertidumbre general y el aumento de los costos ha significado que no se estén levantando edificios exclusivos de estacionamiento, como ocurría hasta hace algunos años. Esta realidad determina que muchos vecinos, especialmente de los cerros, dejen sus automóviles en las calles, una evidente tentación cuando prolifera la delincuencia, pero es la única solución, pues la mayoría de las viviendas antiguas no contempla espacios para vehículos. Paralelamente esta necesidad de ocupación de las calles provoca congestiones y situaciones de peligro, particularmente en las vías de acceso a los cerros.
Esta misma situación se presenta en edificios relativamente nuevos, que no tienen estacionamientos en relación a la cantidad de departamentos, pese a que la mayoría de sus residentes tiene un automóvil. Independiente del estudio mencionado, el problema de espacios definitivos para estacionar también se presenta en algunos puntos de la comuna de Viña del Mar para ocupantes de viviendas o edificios de relativa antigüedad en los sectores céntricos. El estudio mencionado y la simple observación del movimiento en nuestras calles dan cuenta de una realidad urbana que ofrece oportunidades para la construcción de edificios de estacionamiento y también da la posibilidad de reconvertir algunos, de poca ocupación, para ese destino, evitando así congestiones, contaminación y espacios para la delincuencia.