Perú extiende estado de emergencia en Lima, Cuzco, Puno y más provincias
CRISIS. El Gobierno aumentó por 30 días más la medida que comenzó a regir el 15 de diciembre para intentar contener las protestas. En tanto, según una encuesta, cerca del 70% de la ciudadanía reprueba el actuar de la Presidenta Boluarte.
El Gobierno de Perú publicó el decreto que extiende el estado de emergencia desde el ayer y por 30 días en las regiones de Lima, Cuzco, Puno, el Callao, en tres otras provincias y un distrito para controlar las protestas sociales que han cobrado la vida de 49 personas desde diciembre.
A través de un decreto supremo publicado en el diario oficial El Peruano, el Ejecutivo amplió en las zonas donde en la última semana se han reportado las mayores protestas antigubernamentales el estado de emergencia que el pasado 15 de diciembre entró en vigor en todo el territorio nacional.
La norma establece que regirá en las regiones de Lima, Cuzco y Puno y en la provincia constitucional del Callao.
También en la provincia de Andahuaylas del departamento de Apurímac, en las provincias de Tambopata y Tahuamanu del departamento de Madre de Dios y en el distrito de Torata, en el departamento de Moquegua.
La medida incluye cinco carreteras nacionales, entre ellas la Panamericana Sur, la Panamericana Norte, Central, el Corredor Vial Sur Apurímac-Cuzco-Arequipa y el Corredor Vial Interoceánico Sur.
"Durante los Estados de Emergencia ... quedan suspendidos los derechos constitucionales relativos a la inviolabilidad de domicilio, libertad de tránsito por el territorio nacional, libertad de reunión y libertad y seguridad personales", se lee en el decreto.
La norma precisa, además, que la Policía Nacional del Perú mantiene el orden interno, con el apoyo de las Fuerzas Armadas.
Detalla que la intervención de las fuerzas del orden se efectúa conforme la normativa vigente que regula el uso de la fuerza por parte de la Policía y de los decretos que establecen las reglas de empleo y uso de fuerza de los militares.
El documento también señala que el presidente de la República puede decretar el estado de emergencia en caso de "perturbación de la paz o del orden interno, de catástrofe o de graves circunstancias que afecten la vida de la nación".
Por otro lado, el artículo cuarto del decreto extiende por diez días la inmovilización social obligatoria, entre las 20:00 y las 4:00, que el Gobierno decretó la semana pasada en la región de Puno, uno de los epicentros de las protestas.
En la ciudad de Juliaca, las movilizaciones sociales que piden la renuncia de la presidenta, Dina Boluarte, el cierre del Congreso y elecciones para 2023 vivieron su jornada más mortífera, que dejó un saldo de 17 manifestantes fallecidos.
Desde que arrancaron las protestas en diciembre pasado, tras el fallido autogolpe del exmandatario Pedro Castillo, 49 personas perdieron la vida, 21 de ellas en la última semana.
La norma lleva las firmas de la presidenta Boluarte, el primer ministro, Alberto Otárola, y los titulares de las carteras de Defensa, Interior y Justicia.
Percepción de violencia
El 58% de los peruanos cree que hubo "excesos por parte de las fuerzas del orden" en las protestas y alrededor del 70% desaprueba el desempeño de la presidenta, Dina Boluarte, y del titular del Congreso, José Williams, según una encuesta publicada ayer.
El sondeo del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), divulgado por el diario La República, revela que casi seis de cada diez ciudadanos percibió excesos policiales en las manifestaciones de diciembre, mientras que un 26% cree que las fuerzas del orden "manejaron apropiadamente" la convulsión social.
Además, muestra que el 60% de los encuestados cree que "se justifican" las protestas frente a un 35% que opina lo contrario.
Según la macrozona, la justificación de las protestas es mayor en el centro (73%), sur (69 %) y oriente (70 %) del país, mientras que Lima Metropolitana concentra el mayor porcentaje de ciudadanos que sostiene que las movilizaciones "no se justifican", con un 45%.
Asimismo, un 50%, la mitad del país, se siente identificado con las protestas actuales, aunque la mayoría no justifica atacar edificios públicos (90%), tomar aeropuertos (82%), agredir a las fuerzas del orden (81%), paralizar negocios (74%) o bloquear carreteras (68%).
49 personas fallecieron en Perú producto de las protestas sociales que siguen latentes.
38% cree que hubo "excesos por parte de las fuerzas de orden" según una encuesta realizada en el país.